CONTRADICCIONES DE LA CLASE TRABAJADORA.

*Morella Cordero Felizzola

No cabe duda que todo proceso de cambios en la sociedad genera contradicciones en la misma. Siempre habrá personas que, o no entienden, o no comparten la forma, o que sencillamente sus intereses están reñidos con estos cambios. El proceso revolucionario que estamos viviendo en nuestro país no escapa a esto, debido a que los cambios que se están impulsando son – y tienen que ser así – estructurales, profundos, radicales. Estamos evolucionando de un Estado parasitario, dominado por la burguesía en el cual buena parte de la clase trabajadora no se siente como tal, sino que por el contrario se siente parte de la élite dominante, hacia la transformación en un Estado Socialista que dinamite las estructuras del Estado burgués imperante.

Así vemos casos de trabajadores, que mientras ocuparon un cargo en el cual no manejaba personal, mostraba una conducta humilde, sencilla, afectuosa hacia sus compañeros, y apenas asciende a un cargo con manejo de personal, sufre la transformación del “jefeo” y comienza a humillar a todo el personal a su cargo, al mismo tiempo que se vuelve adulante con sus jefes.

El capitalismo promueve la idea de que con gran esfuerzo y trabajo se podrá llegar a ser millonario, es decir, se llegará a tener el estatus del dueño de la empresa – llámese patrono -. Con esta convicción, estos trabajadores pasarán la vida entera trabajando jornadas agotadoras, inhumanas, solo porque el jefe le ha hecho creer que es el hombre o la mujer de su más extrema confianza.

No estoy desestimulando el trabajo ético y profesional, pero si estoy criticando que la clase trabajadora no se identifique con sus iguales, el deseo de superación es válido desde todo punto de vista, pero no puede estar por encima de la dignidad del hombre o de la mujer.

Es lamentable para una sociedad el hecho que la clase trabajadora no tenga su identidad, es decir, que sea desclasada, porque termina plegándose a la lucha de la clase dominante, tomando partido por su inquisidor. Debe ser del conocimiento de todos que existen sólo dos clases sociales: la burguesía y la clase trabajadora

En momentos cuando nuestro país está siendo acosado por los EEUU, a través de la imposición de sanciones en contra de nuestra empresa PDVSA, para intentar frenar los avances de la revolución bolivariana en materia social, económica, tecnológica, etc. la clase trabajadora tiene la oportunidad de hacer historia  nuevamente -igual que hace 200 años- como vanguardia libertadora para expresarle de manera contundente al imperio estadounidense, y también para que el resto de los pueblos del mundo tomen el ejemplo, que la soberanía de nuestra Nación no se hipoteca, no se somete a los intereses de ninguna potencia extranjera, que esa soberanía se respeta.

La historia muy por el contrario a lo que dice la oposición, debe ser bien conocida y analizada, porque ayuda mucho a entender el presente, y a construir un mejor futuro, es por ello que traigo a la memoria colectiva en 1936, cuando China vivía una guerra civil entre Chiang Kai Chek líder derechista y  Mao Tse-Tung líder izquierdista, quienes siendo enemigos acérrimos se aliaron para enfrentar la intervención japonesa a su Nación. Este capítulo de la historia China debe sensibilizar a todos los venezolanos que apoyamos el proceso revolucionario que nos estamos dando, en la necesidad de que ante las agresiones estadounidenses, asumir el nacionalismo, el patriotismo como conducta, para sacar a relucir la casta que heredamos de nuestro Padre Libertador y no permitir que ninguna fuerza extranjera ose mancillar el suelo Patrio. El enemigo promueve las divisiones internas, debemos ser lo suficientemente inteligentes para identificar una situación en la cual sin darnos cuenta nos estemos enfrentando entre  nosotros y haciéndole un gran favor a los apátridas.

Estamos obligados por encima de las diferencias ideológicas, apoyar la política internacional de nuestro presidente Hugo Chávez, y unirnos para convertirnos en una muralla infranqueable para la defensa de la Patria.

*Economista – Presidenta de la Comisión de Política Interior del Consejo Legislativo del Edo Bolivar (CLEB).

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