martes, 27 de noviembre de 2018

Presidente, el pueblo anda arrecho por cosas como estas.

*JUAN MARTORANO.
Me permito escribirle de esta manera, Presidente Nicolás Maduro, producto de la reflexión que debe generarnos, a 26 años de la conmemoración de la segunda rebelión cívico militar contra el régimen oprobioso de Carlos Andrés Pérez. Si bien el signo del gobierno que usted dirige no se parece en nada aquel, sin embargo, la cuenta regresiva del reloj producto del malestar de la gente debido al deterioro de su calidad de vida, debe llamarnos a capítulo, a botón.
Si algo hizo que el discurso de nuestro amado Comandante calara en la población, es su sintonía con lo que vivía el ciudadano y ciudadana “de a pie” en su cotidianidad. Además, usted mejor que yo, sabe muy bien la coherencia de Hugo Chávez en su praxis (El Comandante Inolvidable lo que decía, lo hacía, además de ser el primero en reconocer sus errores).
Hoy en día Presidente, no sé si usted lo sabe, o la “burbuja” en la que algunos funcionarios públicos y funcionarias públicas están habría llegado a atraparlo a usted también. Hay gente que la está pasando muy mal, y son sectores en situación de vulnerabilidad que no están recibiendo atenciones ni están gozando de protección por parte de su gobierno.
Por ejemplo, los precios acordados entre usted y los empresarios en el marco del Programa de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica han cambiado su denominación y ahora el pueblo los llama PRECIOS VIOLADOS por los mismos empresarios que acordaron precios con usted, de acuerdo a las Gacetas Oficiales Extraordinarias Nº 6.397 del 21 de agosto de 2018 y la 6.401 del 31 de agosto del mismo año más la Resolución Nº VSE 003-2018. Para muestra un botón:
El atún enlatado en su presentación de 170 gramos, que tiene un precio acordado de 140 bolívares soberanos, está siendo vendido en 700 bolívares soberanos.
El kilo de carne de res de primera, regulado en 90 bolívares soberanos, está siendo vendido en no menos de 800 bolívares soberanos, y cuando se consigue además.
El cartón de huevos, regulado en 120 bolívares soberanos, lo venden en 700 bolívares soberanos.
La Mortadela básica, regulada en 180 bolívares soberanos el kilo, es vendida en 1.500 bolívares soberanos.
El kilo de sardina fresca, y que se ha constituido en la alternativa para que el pueblo aguante la “pela”, regulado en 17,50 bolívares soberanos, es vendido a 500 bolívares soberanos.
La sardina enlatada en presentación de 170 gramos, regulada en 24 bolívares, la puede encontrar usted en 250 bolívares soberanos.
El litro de leche líquida, regulada en 48,50 bolívares soberanos, la encuentra usted en 350 bolívares soberanos, y si la encuentra de paso.
El kilo de pollo beneficiado regulado por usted en 78 bolívares soberanos, no lo puede encontrar a ese precio en la calle.
La margarina de 500 gramos regulada su precio en 65 bolívares soberanos, está en la calle a 550 bolívares soberanos y aumentando.
La mantequilla de 500 gramos regulada en 70 bolívares soberanos, su precio en el mercado hace que este producto este desaparecido de los anaqueles y estantes de nuestro pueblo.
El kilo de arvejas regulado en 65 bolívares soberanos, lo venden en 300 bolívares soberanos en la calle.
Las lentejas, está regulado su precio a 53 bolívares soberanos el kilo, pero nos lo venden a 350 bolívares soberanos.
Las caraotas negras, reguladas en 72 bolívares el kilo, es vendida a 1.500 bolívares soberanos en el mercado.
El frijol, cuyo precio acordado marca 24 bolívares soberanos, no se consigue.
El litro de aceite comestible, regulado en 36 bolívares soberanos, es vendido en 1.000 bolívares soberanos.
El arroz blanco tipo 1 regulado el kilo en 42 bolívares soberanos, lo están vendiendo en 350 bolívares soberanos.
El café molido en su presentación de 500 gramos, regulado en 60 bolívares soberanos, está siendo vendido en 480 bolívares soberanos. Ahora ni café podremos tomar.
La harina de maíz precocida, para nuestras arepas y las hallacas de este mes de diciembre, en la presentación de un kilo, regulada en 20 bolívares soberanos, se la pueden vender a usted perfectamente en 180 bolívares soberanos, no menos de esa cifra.
El kilo de harina panadero para el pan que nos comemos, regulado en 20 bolívares soberanos, es vendido en 100 bolívares soberanos.
Asimismo el kilo de harina de trigo todo uso, regulado su precio en 54 bolívares soberanos, nos es vendido en 1.000 bolívares soberanos.
La mayonesa en su presentación de 500 gramos, su precio acordado es de 58 bolívares soberanos, pero su precio de venta al público en el mercado es de 550 bolívares soberanos.
El kilo de espagueti o pasta regulado en 48 bolívares soberanos, es vendido en 580 bolívares soberanos.
La salsa de tomate en su presentación de 400 gramos, maraca un precio “acordado” de 114 bolívares soberanos, más sin embargo a la fecha es vendido a 490 bolívares soberanos.
La sal de mesa tiene un precio “acordado” de 31,50 bolívares soberanos el kilo. Sin embargo, el comercio nos lo vende en 350 bolívares soberanos.
El jabón de baño en su presentación de 8 gramos y necesario para garantizar nuestra higiene personal, tiene un precio “acordado” de 24,12 bolívares soberanos. El precio real de la calle en el que lo compramos los venezolanos y venezolanas de “a pie” es de 400 bolívares soberanos.
El desodorante en su presentación de 90 gramos, regulado en 150 bolívares soberanos, es vendido en 1.500 bolívares soberanos.
La crema dental de 50 gramos, cuyo precio “acordado” es de 51 bolívares soberanos, perfectamente le puede ser vendida a usted por el módico precio de 700 bolívares soberanos.
Un paquete de cuatro rollos de papel higiénico, cuyo precio “acordado” es de 91 bolívares soberanos, es vendido en 900 bolívares soberanos.
Las toallas sanitarias en presentación de 8 unidades, reguladas su precio en 50 bolívares soberanos, son vendidas a 1.600 bolívares soberanos en la calle.
El litro de cloro para la limpieza de nuestros hogares, hospitales y otras edificaciones y para desinfectar, su precio “acordado” es de 48 bolívares soberanos, pero nos es vendido en 290 bolívares soberanos.
El jabón el polvo para lavar nuestra ropa en presentación de un kilo, regulado en 360 bolívares soberanos, es vendido en 900 bolívares soberanos.
El jabón de panela de 250 gramos, su precio “acordado” es de 145 bolívares soberanos, pero lo puede conseguir usted en 250 bolívares soberanos en cualquier establecimiento.
Y la leche en polvo en la presentación de un kilo, regulada en 250 bolívares soberanos, la venden en 3.000 bolívares soberanos.
No sé si usted está al tanto de la maniobra política en la que está montada la oposición que hace vida en la Asamblea Nacional en desacato, y que fue advertida por el excelente periodista Clodovaldo Hernández, referida a la elección de la junta directiva del parlamento el próximo 5 de enero del próximo año, donde la correspondería ejercer la presidencia de dicho cuerpo legislativo a un parlamentario o parlamentaria de Voluntad Popular. Según Hernández, en caso de respetarse los acuerdos políticos por parte de la derecha, el titular de ese cargo para el año que viene sería el parlamentario Juan Guaidó (yo le agregó que podría ser Juan Andrés Mejías, compañero de tolda de Guaidó) y que a través de una interpretación sesgada del artículo 233 de la Constitución, volverán a declarar la “falta absoluta” del Presidente de la República, y procederán a la convocatoria de nuevas elecciones presidenciales para febrero del año 2019. Mientras estas se dan, se encargaría de la Presidencia de la República el Presidente de la Asamblea Nacional (en desacato) durante esa “transición”.
Si bien es cierto que ya el Tribunal Supremo de Justicia fijó posición en cuanto al inicio del período constitucional en el caso de un Presidente de la República reelecto,  de acuerdo a recurso de interpretación intentado por la colega Marelys D`Arpino el 21 de diciembre de 2012 en el expediente 12-1358, y cuya sentencia fue emitida el 9 de enero de 2013, a propósito de la coyuntura política presentada en el país producto de la enfermedad del Comandante Chávez. No obstante, a la derecha no le interesa esto, es decir, las argumentaciones jurídica- constitucionales, sino que la mueve la actual correlación de fuerzas a nivel de gobiernos a nivel internacional, y más de los países más cercanos geográficamente a Venezuela, que les es totalmente favorable. Una acción de estas características sería apoyada por gobiernos como el de Estados Unidos y del denominado “Grupo de Lima”, a fin de tratar de aislarnos internacionalmente, y complicar aún más el actual cuadro que vive la mayoría de la población en el país.
Sin embargo Presidente, de eso podemos referirnos con mayor detalle en próximos artículos. No obstante, el compañero Diosdado Cabello, en el reciente homenaje que se le rindió al camarada Alí Rodríguez Araque (Comandante “Fausto”) nos señalaba en alguna oportunidad que, para que la Revolución trascienda del rentismo petrolero, nuestro Gobierno debe garantizar electricidad, alimentos y vivienda.
Es mi obligación advertirle, siempre en el marco del respeto hacia usted como persona y por la alta investidura que ostenta, advertirle que 2 de esas 3 necesidades básicas que deben ser cubiertas por nuestro Estado en estos momentos están al borde del colapso (alimentos y electricidad). Uno de mis lectores me advirtió que todos los viernes y sábados desde hace un poco más de 3 semanas y en un intervalo de 5 minutos, se dan cortes no programados de la energía eléctrica en la parroquia La Pastora de Caracas, a pocas cuadras del Palacio de Miraflores, nada más y nada menos.
También es importante tomar nota de que, pese a los esfuerzos que realizan los equipos políticos del PSUV y del resto de organizaciones políticas adscritas al GPP/Simón Bolívar, y los CLAP, continúa, y en algunos casos se ha incrementado el sabotaje desde PDVSA Gas en la distribución del gas doméstico. Usted podrá regalar el pernil, el combo hallaquero, la carne, el pollo y todo lo que usted quiera Presidente, pero si no se garantiza el servicio de gas doméstico, no habrá manera de comer estos alimentos, y esto pudiera actuar como detonante de hechos desencadenantes de eventos violentos en contra de su gestión gubernamental, que les caería como “anillo al dedo” a aquellos actores que en estos momentos se encuentran en la planificación de un nuevo zarpazo en contra de la Revolución Bolivariana.
Ese mismo compañero que me hizo llegar estas advertencias, y que pertenece al equipo político del PSUV en la parroquia La Pastora, y que hace vida en colectivos serios y revolucionarios y despliegan acciones conjuntas, me advirtió que a algunos efectivos de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) les estarían ordenando apagar sus radios, debido a que habrían participado en el secuestro de 4 camiones con bombonas de gas que iban a un sector específico de La Pastora a despachar 800 bombonas en un sector que no llega a 100 familias. El meollo del asunto estriba en llevar las bombonas hacia ese sector, y de allí bachaquearlas. ¿Quién le pone el cascabel al gato?
El pueblo humilde y de “a pie” le está echando un camión de bolas Presidente, y es importante entender, y me disculpan las expresiones, pero así las siente el pueblo llano, que aquí no se ha armado un peo porque el pueblo en su mayoría es chavista. Pero aquí no nos están dejando visualizar al enemigo de clase, el cual se disfraza de pueblo y esa es una de las razones por las cuales no es visibilizado. El enemigo también se disfraza de trabajador de instituciones públicas, de viceministros y viceministras, de directores y directoras, de ministros y ministras, de presidentes y presidentas de instituciones públicas.
Necesitamos de manera urgente visibilizar a nuestros enemigos para dirigir toda nuestra arrechera. Muchos tenemos claro quién es y lo combatimos con nuestro trabajo político, pero no todos están claros en esto. De hecho, hay militantes dentro del PSUV que no están claros con este peo.
Asimismo, y como lo señala Darío Morandy, el caso Gorrin-Andrade es como un ventilador a toda velocidad cargado con excremento que salpica a burócratas inescrupulosos, falsos profetas de encuestas prepagadas, periodistas faranduleros, empresarios de toda ralea, ministros de probeta, gobernadores desechables y toda suerte de corruptos...se está desnudando un inmenso tejido de corrupción y perversión que involucra la convivencia de algunos actores  gobierno-oposicion...un vaho pestilente embriaga el ambiente político ...
Yo le agregaría a la afirmación de Morandy, y vienen más casos que reventarán en los próximos días, que no los pierda de vista. Algunos viejos y otros nuevos.
Son elementos que deben ser objeto de una profunda reflexión, y hasta del relanzamiento de las “3R” que en alguna oportunidad planteo el Comandante Chávez.
Reflexiones largas y extensas, pero necesarias en estos tiempos de múltiples preocupaciones y pocas soluciones.
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!

*Abogado,Activista por los Derhttp://juanmartorano.blogspocom /http://juanmartorano.w). jmartoranoster@gmail.com . @juanmartorano (Cuenta en Tuiter)

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¿El 10 de enero de 2019 es otro "Día D" para el antichavismo?


Ha llegado el mes de noviembre, y no de cualquier año, sino del último que se corresponde con el período constitucional que inició el Comandante Chávez y ejerció, casi íntegramente, el presidente Maduro. En esta afirmación hay una verdadera proeza del pueblo venezolano que logró mantenerse firme tras tres períodos de revolución de colores que intentaron transformarse en auténticas y abiertas guerras civiles. Acechos internacionales sin precedentes. Bloqueos financieros y guerra económica.
En este marco y habiendo sido electo en mayo del año en curso Nicolás Maduro Moros como Presidente de la República para el período constitucional que inicia en enero de 2019, la oposición vuelve al esquema de sus famosos "Días D" que utilizó en el pasado para afirmar que, hasta allí, ni un minuto más, durará el chavismo en el poder.
Quizás, como esto ya ha pasado varias veces, podríamos sentirnos en la fábula de "Pedro y el Lobo", o dedicarnos a mirar lo absurdo que hay en una oposición que dice que destituyó al Presidente por abandonar el cargo, luego lo juzgó, y que desde 2015 afirma que no lo reconoce porque -según sus discursos- tiene menos apoyo popular que ellos.
Por ello, puede ser razonable creer que no va a pasar nada sino el mismo show desde una Asamblea Nacional cada vez más vacía e irrelevante y un par de declaraciones internacionales que tan pronto llegan como se olvidan.
Sin embargo, hay algunos elementos a considerar. El primero es que hay un evento electoral en agenda sobre el cual pueden aspirar construir un discurso que intente deslegitimar al Presidente, con base a que las elecciones municipales son históricamente los procesos con mayor tasa de abstención y que ellos son expertos en declarar que cualquier hecho electoral tiene sobre el chavismo un efecto plebiscitario, y en las últimas ocasiones todo el cuestionamiento ha estado no en la diferencia de votos entre los participantes, sino en el tamaño de la abstención.
En segundo lugar, debemos ver cómo pueden intentar ellos jugar con las categorías jurídicas con base a lo dispuesto en la Constitución y la situación de hecho en la que hasta ahora se encuentran. Así las cosas, la Asamblea Nacional se encuentra por el momento en una situación jurídica anómala, pues sus actos son nulos por disposición de la Sala Constitucional que ha castigado el desacato de dicha autoridad a las órdenes emanadas de la Sala Electoral.
Sin embargo, el desacato es una situación de hecho que puede revertirse. De hecho, el Poder Judicial ha exhortado al Poder Legislativo a corregir su actitud y desincorporar a los cuestionados diputados de Amazonas. La Asamblea Nacional no lo ha hecho porque es un punto de honor para ellos desconocer a los Magistrados que conforman el Tribunal Supremo de Justicia, al punto de juramentar otra estructura que opera fuera del país.
Pero si esto cambiase, si la Asamblea Nacional estimase más conveniente ponerse a derecho y decidiera salir del desacato, podría intentar declarar una vacante absoluta como lo vienen insinuando y generar una situación distinta, lo que podrían aprovechar para avanzar en sus agendas de desestabilización.
Puede que nosotros pensemos que si ese era el juego, han podido hacerlo en cualquier momento desde el año 2015, pero no es así. Esto porque la Constitución divide los efectos de la vacante del Presidente en función del momento del período constitucional en el que ocurre.
Hasta ahora, la Asamblea Nacional opositora ha convivido con un Presidente que se encontraba en la fase final de su mandato cuando, de producirse su ausencia, debía asumir el poder el Vicepresidente de la República, mientras que a partir del 10 de enero se encontrarán con un Presidente que inicia su mandato y que, si su ausencia se produce, esta debe ser compensada por la Asamblea Nacional, de conformidad con lo previsto en la Carta Magna.
Un aspecto importante es recordar que cualquier lectura que hagamos en el presente del Estado venezolano, debe considerar que está activo el Poder Constituyente, que sirve como padre de todo el Poder Público y este no desaparece, como el desacato, porque la Asamblea Nacional demuestre tener un propósito de enmienda de su testaruda decisión de los últimos años. Por lo cual, puede que veamos una nueva forma de interrelación de los poderes donde será vital el Poder Constituyente para garantizar la paz de la República y la estabilidad del Estado.
Puede que por esto es que el 10 de enero es su nuevo "Día D", sobre el cual ya dicen tener el concierto de otras naciones y algunas estructuras internacionales que han declarado desconocer a la Asamblea Nacional Constituyente. Si bien esto no tiene ningún sentido porque la legitimidad de las elecciones no se mide fuera sino dentro de un país, ellos redoblarán la batería para señalar que la única autoridad que reconocen es la Asamblea Nacional. Los debates que hemos visto en torno a la oposición, donde algunos voceros abogan por un nuevo esquema de relaciones y de entendimientos, puede estar en relación con que si esta fuera la vía que quieren usar en 2019, será de nuevo vital para quien quiera liderar la oposición hacerse de la Presidencia de la Asamblea Nacional.
Si esto es jurídicamente posible, puede que sea la causa por la que se ha visto tanto revuelo en los últimos días en determinar quién es el verdadero líder y cuál es el centro de gravitación actual de la oposición, que algunos consideran que de hecho ya no se encuentra en el territorio nacional.
Por estas causas, nosotros tenemos que ir tomando consciencia del nivel en el que nos encontramos, porque, como en abril de 2002, las semanas que vienen van a exigir la defensa consciente del proceso revolucionario, divisando la situación interna y los riesgos externos, cuando apenas cerrado el capítulo electoral en Estados Unidos, vimos a Donald Trump tomar medidas sumamente fuertes contra el pueblo iraní.
Nosotros, quienes conformamos los millones de votos históricos del chavismo y los que condujeron a Nicolás Maduro nuevamente a la Presidencia para el futuro período presidencial, tenemos que mirar los escenarios que tenemos por delante, puesto que estas jugadas serían equivalentes a las que sacaron a Fernando Lugo o a Dilma Rousseff del poder en sus respectivos países, con una agravante: ni sus pueblos habían sido tan atacados y debilitados, ni la comunidad internacional preparada para entender el desconocimiento de la voluntad popular electoralmente expresada como hechos democráticos, como lo ha sido en el caso de Venezuela.

Horror gringo a Bolívar!… y ya está la orden firmada para asesinar a Maduro

  jsantroz@gmail.com       @jsantroz

José Sant Roz

Mujeres bajo la bota

Nicolás Maduro clausura la Fitven 2018 (Feria de Turismo de Venezuela)

Llaman a marchar el 28 N por un salario que cubra la canasta básica y contra Lineamientos del Min.Trabajo

Asesinado campesino Tomás Rivas en complejo porcino Batalla de Santa Inés, del estado Barinas

Congreso Venezuela Libre “Millones de venezolanos No se rinden”

Partido, Gobierno y pueblo debemos trabajar para construir un socialismo concreto

La base de nuestro sistema es la igualdad establecida y practicada en Venezuela.

domingo, 25 de noviembre de 2018

José Vicente HOY. Entrevista a Carolys Pérez y los confidenciales

La Hojilla con Pasqualina Curcio, J.C. Valdez, Olga Alvarez, M.A.Díaz, 24 noviembre 2018

Maestros convocan nueva toma del Ministerio Educación

Trabajadores de Guayana denuncian terrorismo laboral en CVG

¡Siempre me he dirigido a la oposición llamando al diálogo!

¡El pueblo merideño se merece lo mejor del mundo!

¿Cómo llegaremos al 10 de enero de 2019?

*JUAN MARTORANO.
De acuerdo con el artículo 231 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el período constitucional del Presidente o Presidenta de la República inicia el 10 de enero del primer año del período constitucional, para el cual dicho funcionario o funcionaria fue electo o electa. En el caso de Nicolás Maduro, por tratarse de un Presidente en funciones, el sexenio en el que resultó reelecto fue el comprendido entre el año 2019-2025.
Ciertamente pudiéramos señalar, que estamos en una transición, pero no del paso de un gobierno a otro, sino de un período histórico a otro. Evidentemente, Nicolás Maduro ejerció durante seis años y prácticamente de manera íntegra, el sexenio presidencial 2013-2019 que le correspondía a Hugo Chávez. No en balde, luego de los comicios presidenciales y legislativos del 20 de mayo de 2018, señalamos que ahora veremos el verdadero gobierno del heredero del legado gubernamental del Comandante Inolvidable.
Evidentemente ese fin de este período ha estado signado, tal y como lo señalo Ana Cristina Bracho en un artículo publicado en el portal Misión Verdad titulado “¿El 10 de enero de 2019 es otro “Día D” para el antichavismo”? donde el pueblo venezolano logró mantenerse firme tras tres períodos de revoluciones de colores (2013, 2014 y 2017) que intentaron transformarse en auténticas guerras civiles, acechos internacionales sin precedentes, bloqueos financieros y comerciales sin precedentes y guerra económica.
En su debida oportunidad, y en artículos anteriores, hemos resaltado fechas emblemáticas que han marcado puntos de inflexión de la actual coyuntura. El más reciente, evidentemente fue el 20 de agosto de 2018, fecha de implementación del denominado Programa de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica, a tres meses del triunfo electoral de Nicolás Maduro en los comicios presidenciales y legislativos de mayo. Ciertamente, durante los primeros quince días, las medidas económicas de este plan resultaron positivas y rindieron sus frutos, pero el resto de los casi ochenta días de implementación del Plan, volvimos a la situación inicial, incluso agravada del cuadro de merma del poder adquisitivo y deterioro de la calidad de vida de la mayoría de la población venezolana.
Ciertamente el país afronta medidas coercitivas unilaterales que hacen pasar penurias a nuestro pueblo. Hemos podido observar como mercenarios económicos se dedican a financiar mafias para escalar en el acaparamiento, la especulación y el boicot a nuestra economía, afectando el estado de bienestar que tuvo nuestro pueblo durante esta década de oro, evidentemente aprovechándose de las debilidades estructurales de nuestro modelo rentístico, basado en vivir de los ingresos de un medio de producción no producido como el petróleo.
Pero no es menos cierto también que se ha visto a un Gobierno cruzado de brazos, que luce impotente ante la bestial ofensiva multidimensional y multiforme que ha ocasionado y ocasiona terribles heridas al cuerpo de la República. Un cóctel que se ha traducido en descontento y malestar de la población.
La oposición política al gobierno de Maduro luce inexistente. Sus líderes más emblemáticos se encuentran fuera del país, por lo que la vanguardia opositora está siendo liderada en estos momentos por dirigentes gremiales empresariales de la talla de Carlos Larrazábal (Fedecámaras), Juan Pablo Olalquiaga (Conindustria), María Carolina Uzcátegui (Consecomercio), Aquiles Hopkins (Fedeagro), entre otros, quienes aprovechándose de estos meses de noviembre y diciembre, donde se incrementa el consumo y la movilidad social, buscan el despliegue de operaciones psicológicas tendientes a reforzar la percepción de escasez, carestía, desabastecimiento, fallas en el transporte terrestre y la conectividad marítima, fluvial y aérea, a fin de que esta actúe como detonante de una implosión social que derroque al actual jefe del Gobierno Nacional.
Asimismo, la implementación del Programa de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica se ha traducido en algunas falencias en cuanto al poder adquisitivo de la masa laboral en Venezuela. Si bien es cierto que el Jefe de Estado venezolano decretó en agosto un salario mínimo de medio petro (1.800 bolívares soberanos, que implica un aumento en más de un 5.000%) y que este porcentaje del aumento se debía traducir de la misma manera en los incrementos de las tablas de la Administración Pública, no obstante tal incremento no se tradujo en el mismo porcentaje en dichas tablas y primas. Y la adecuación ante el nuevo esquema ha ido a pasos paquidérmicos y de “morrocoy”, que ya hacen risible el actual salario mínimo como fue decretado  por Maduro.
Evidentemente como muchos venezolanos y muchas venezolanas, tenía la expectativa esta semana que pasó, de los anuncios económicos de ajustes  en el Programa de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica, a tres meses de su implementación y a seis del triunfo electoral de Nicolás Maduro. Esto debido al incremento del Petro, que paso de 3.600 bolívares soberanos a 4.362 bolívares soberanos, lo que evidentemente debe obligar al ajuste de sueldos y salarios y de otras medidas económicas. No obstante, el fallecimiento de Alí Rodríguez Araque, el cumpleaños del Presidente de la República, pero sobre todo, por las siete semanas consecutivas que han venido cayendo los precios del petróleo y la próxima reunión de países OPEP y no OPEP, obligan al recalculo de una serie de estimaciones, a fin de poder realizar estos anuncios, y es algo que debemos tomar en cuenta a la hora de los análisis.
Todas estas situaciones han impulsado y activado el descontento de diferentes dirigentes obreros y sindicales, por lo que se han incrementado de manera ostensible las jornadas de protestas y manifestaciones, debido a que la hiperinflación inducida ha confiscado el poder adquisitivo de la familia venezolana. Esto sin contar con las falencias en la producción de alimentos denunciada en su oportunidad por los compañeros y compañeras de la Plataforma de Lucha Campesina, que pudieran colocarnos en una situación comprometida en el año 2019, en caso de que EEUU decida estrechar aún más el cerco alimentario y de medicamentos, como en efecto lo está haciendo.
Esto debe quedar bien claro. No se puede perseguir ni criminalizar toda protesta de los gremios laborales, y más de aquellos que se identifican con la Revolución, que en uso de su constitucional ejercicio de la protesta, buscan llamar la atención del Ejecutivo Nacional para que éste haga las rectificaciones que deba hacer. Es precisamente esa falta de atención y de respuesta la que puede ser aprovechada por grupos vinculados con sectores de la oposición, a fin de desviar el justo reclamo por el camino de la reactivación de una agenda politiquera y de reinicio de la violencia, producto de la generación de condiciones para propiciar el derrocamiento y la salida violenta del poder del presidente Nicolás Maduro.
Esto es algo que debe ser tomado en cuenta y poner a pensar al Alto Mando Político y Militar de la Revolución, a fin de adoptar las rectificaciones para preservar la Revolución. Hago esta acotación a fin de propiciar ese necesario enderezamiento del rumbo, antes de que sea demasiado tarde.
Esto sin obviar la ocurrencia de un evento electoral como lo son los comicios municipales previstos para el domingo 9 de diciembre de 2018, para la elección de los y las integrantes de las 335 Cámaras Municipales que conforman la geografía nacional. Evidentemente el escenario que plantee del referendo de la nueva Constitución no se concretó, en primer lugar, porque el proyecto de nueva constitución no fue dado a conocer a la población, por no encontrarse listo aún, y por la otra, debido a que se buscan las mejores condiciones políticas, económicas y sociales para la realización de este referendo, que pudiera ser en el año 2019.
Lo cierto del caso es que, habrán grupos y coaliciones de la oposición que aprovecharan los comicios para la elección de concejales y concejalas para construir un discurso que busque “deslegitimar” al Presidente Nicolás Maduro y a la Asamblea Nacional Constituyente, en base a la mayor abstención que se registrará en dichos comicios, y que forma parte de un comportamiento histórico de la población, evidentemente exacerbado por la situación económica y psicológica propia de estos momentos difíciles. Actores políticos y operadores comunicacionales serán los encargados en darle un carácter “plebiscitario” a los comicios a realizarse dentro de dos semanas en el país, y basaran sus cuestionamientos no en la diferencia de votos de los participantes, sino  en el tamaño de la abstención.
El ambiente que he podido observar en estos días es de mucho descontento y malestar de la población. Ya he mencionado sobre el incremento de protestas de varios sindicatos y gremios de trabajadores por las razones antes expuestas. Si determinados actores y sectores consideran que están dadas las condiciones óptimas, tratarán de darle la “patada a la mesa” antes de la Noche Vieja de 2018, aprovechándose de cierto relajamiento y descuido de algunos y algunas, producto del asueto navideño. No obstante, un buen amigo me señalo que no había que confiarse, puesto que varios gobiernos han caído entre diciembre y enero, cuando supuestamente no se daría ningún tipo de “golpe de mano”. La rebelión militar del 1 de enero de 1958 liderada por el Coronel Hugo Trejo, o la huida del entonces dictador cubano Fulgencio Batista, tras ser derrotado por el Ejército Rebelde liderado por el eterno Comandante Fidel Castro Ruz (al que recordamos a dos años de su siembra) el 1 de enero de 1959, así lo confirman.
No obstante, coincido con la opinión de varios y varias analistas que, el antichavismo realizará su más alta apuesta para el 10 de enero de 2019, planteándolo como su nuevo día “D”, ya que señalan que tienen el concierto de otras naciones y algunos organismos a nivel internacional, que han manifestado no solo su desconocimiento a la ANC, sino que procederán al desconocimiento del nuevo mandato de Nicolás Maduro. Si bien esto desde el punto de vista constitucional y legal no tiene ningún sentido debido a que la legitimidad de las elecciones no se mide fuera sino dentro de un país, el antichavismo redoblará sus ataques bajo el argumento de que la única autoridad reconocida es la Asamblea Nacional (en desacato) y aprovechando que la correlación de fuerzas a nivel de gobiernos en el contexto internacional les es totalmente favorable.
Todo lo que veremos en estas semanas serán ensayos para medir, coordinar, articular y acumular sus fuerzas y sondear nuestra capacidad de respuesta ante los nuevos retos y amenazas. Evidentemente deben tratar de consolidar el frente interno para la nueva oleada golpista que pretenden realizar. Están trabajando en ello, y se aprovecharán de nuestros errores y fallas, para poder lanzar el zarpazo.
Tampoco podemos descuidarnos con el asedio y amenazas de intervención militar de tipo “humanitario” en contra del país. Tal vez a nivel comunicacional y mediático se resalta la fachada occidental, por estar Colombia con el gobierno de Iván Duque y su mentor político Álvaro Uribe Vélez, impulsando acciones y acelerando la generación de incidentes fronterizos a través de “falsos positivos”, para activar dicha acción armada contra el país. No obstante, no podemos descuidarnos por la fachada sur (Brasil), la fachada Este (Guyana) y la fachada norte (Aruba, Bonaire y Curazao, que pertenecen al Reino de los Países Bajos, el cual, al igual que Colombia, pertenece a la OTAN). Se trata pues, de la reactivación de la estrategia de “tenaza” denunciada en su debida oportunidad por el Presidente Nicolás Maduro en el año 2015.
Evidentemente, la administración Trump está muy interesada en la salida de Nicolás Maduro antes de que finalice el año 2018, o en su defecto, antes de que culmine el primer semestre de 2019, debido a los comicios en varios países suramericanos y centroamericanos que permitan el cambio de la correlación de fuerzas a nivel de gobiernos, nos sea más favorable a fin de ir rompiendo el cerco diplomático, político, económico, financiero y de diversos ordenes en contra del país.
De ahí, que sin dejar de prepararnos en el necesario disfrute de las festividades navideñas, debemos ir tomando consciencia del nivel en el que nos encontramos porque, como en abril de 2002, las semanas que vienen nos obligan y van a exigir de la defensa consciente del proceso revolucionario, divisando en toda su magnitud la situación interna y amenazas externas, y la muestra es que una vez cerrado el capítulo electoral de las elecciones de “medio término” en Estados Unidos, vimos a un presidente Donald Trump tomar medidas fuertes en contra del pueblo iraní.
Debemos mirar con claridad los escenarios que tenemos por delante, puesto que los eventos a desarrollarse en las próximas semanas y las jugadas políticas a desplegar tendrían la equivalencia a las que sacaron a Fernando Lugo de la Primera Magistratura del Paraguay, a Dilma Rouseff de la de Brasil o la de “Mel” Zelaya en Honduras, pero con un agravante: Ni sus pueblos habían sido tan atacados y debilitados, ni la comunidad internacional preparada para legitimar el desconocimiento de la voluntad popular electoralmente expresada en hechos democráticos, como lo ha sido en el caso de Venezuela.
Al Gobierno Nacional, le expreso como lo señalo un amigo con el que converse hace algunos días: “El gobierno debe soltar la comida, porque sino se puede llevar una gran sorpresa”. Así que, a dejar un tanto la retórica panfletaria, porque el pueblo esta arrecho, y a mostrar más gestión y a contener a los mercenarios económicos y a las mafias, antes de que sea demasiado tarde.
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!



*Abogado,Activista por los Derhttp://juanmartorano.blogspocom /http://juanmartorano.w). jmartoranoster@gmail.com . @juanmartorano (Cuenta en Tuiter)

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