Una vez conocidos los recientes acontecimientos acaecidos en el Estado Bolívar, tanto la intervención de algunas Empresas por parte de la Fiscalía y los cuerpos de seguridad del Estado, así como los hechos lamentables ocurridos en el portón de CVG-FERROMINERA, que dejara un saldo de un trabajador muerto y dos heridos, el Colectivo de Trabajadores en Revolución (CTR), manifestó su posición.
Ratificamos nuestra postura de condenar la violencia sindical venga de donde venga y en el sector que se produzca, tal como lo señalamos con ocasión a nuestra presencia en el recién culminado Encuentro Nacional de Control Obrero, celebrado en Puerto Ordaz, Estado Bolívar.
Los hechos de violencia generados en varias de las empresas básicas que culminan en FERROMINERA con este lamentable saldo, dejan cuenta de que se mantiene la vieja cultura sindical cetevista, promovida por las bandas armadas de AD en el pasado y que debe ser rechazada de manera contundente por la clase obrera venezolana.
Exigimos a los cuerpos de investigación, al Ministerio Público el esclarecimiento de estos hechos que conduzca a los responsables de estos crímenes a cumplir la pena que por ley les corresponde y condenamos esta conducta que desdice de los principios y valores del movimiento sindical clasista y revolucionario.
Llamamos a todos los trabajadores de FERROMINERA a rechazar a quienes en su disputa por el poder, por la dirección sindical llegan a cometer tan abominables hechos. Exigimos justicia para el compañero asesinado y los heridos, así como vigilancia social para evitar que estos hechos se repitan en ningún rincón del país.
Con relación a la intervención que por instrucciones del Ministerio Público y con participación de los cuerpos de investigación, se han realizado tanto en algunos Departamentos de SIDOR, como en ORINOCO IRON y otras empresas, celebramos esta actuación, esperando que no se quede solo en meras averiguaciones.
Hacemos votos para que se profundicen estas actuaciones y se convierta en una política de estado para erradicar esa cultura capitalista de la cuarta república, de quienes se disfrazan de rojo rojito, y cometen actos que atentan contra las instituciones del estado, lo trabajadores y el pueblo venezolano.
Esperamos que las investigaciones se den a fondo, que se investigue y castigue a los responsables, en toda la cadena de comercialización de estos productos, que presuntamente son desviados en alianza con sectores de la burguesía y las transnacionales. Que se acaben las persecuciones y presuntas imputaciones contra trabajadores, delegados de prevención, integrantes de lo equipos de control obrero de las diferentes empresas por el sólo hecho de cumplir con su tarea revolucionaria de control social y de denuncia de la irregularidades.
Es fundamental que el sistema de justicia de claras señales al país de su eficiencia, y que esto no sea solo una investigación bien intencionada y que después, cuando los casos lleguen a los tribunales se dejen de presentar las pruebas y se mantenga el mecanismo de la impunidad capitalista.
Reafirmamos nuestro compromiso con el Plan Guayana Socialista, con la política de control obrero de las empresas básicas que no puede seguir estando secuestrada por la tecnoburocracia y factores excluyentes, por lo que insistimos a todos los trabajadores de las empresas básicas a participar, incorporarse en las tareas de debate y construcción del control obrero, para lo cual es fundamental la participación de todos los trabajadores, solo así quedarán desenmascarados los “falsos profetas” que se atribuyen tal representatividad para impedir la verdadera participación protagónica.
Desde la UNETE, desde el Colectivo de Trabajadores en Revolución reafirmamos nuestro compromiso con los trabajadores de Guayana plenamente convencidos de que lograremos rescatar nuestras empresas.
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