Greti Richard
Greti Richard: ¿Cuáles han sido para Ud. Y de acuerdo a su experiencia las dificultades y limitaciones en que se encuentran los trabajadores y trabajadoras para conformar los consejos de trabajadores y trabajadoras en las instituciones del Estado?
Greti Richard: ¿Cuáles han sido para Ud. Y de acuerdo a su experiencia las dificultades y limitaciones en que se encuentran los trabajadores y trabajadoras para conformar los consejos de trabajadores y trabajadoras en las instituciones del Estado?
Alberto Bonilla: Yo pienso que hay dificultades en los dos lados de las contradicciones, en los trabajadores y trabajadoras por un lado y por el otro los administradores públicos. Del lado de los trabajadores y trabajadoras es que existe un vacío importante del ejercicio de la democracia participativa, control obrero, y por el contrario si existen practicas muy frecuentes de delegación de soberanías individuales en representantes, es decir, existe un pasado que está lleno de prácticas donde fuimos adiestrados para delegar, lo cual perfectamente funciona con la lógica capitalista, se fundamenta en la propiedad privada, en la división del trabajo, es decir en la división ente los que saben y los que no saben, entonces como vemos fuimos formados en ese estilo, de no participar, de delegar, de obedecer y nosotros somos producto de esas relaciones sociales de producción que nos otorga un papel subordinado, pasivo.
Sumado a lo anteriormente expuesto, todo lo nuevo genera resistencia, y genera angustia, también somos víctimas de eso, ya que por primera vez podemos decidir por nosotros mismos y no lo hemos hecho por temor.
Un tercer elemento del lado de los trabajadores es la ausencia, que no debería ser, de un marco legal que garantice la conformación de los consejos de trabajadores y trabajadoras en cualquier empresa pública o privada.
Y del lado de los decisores, llámense funcionarios jefes o administradores en la función pública con cargos de dirección, se encuentra el hecho de estar preñados de la ideología capitalista, que es una ideología autoritaria, dictatorial, que no admite replica, entonces, para un decisor público se le hace difícil permitir la participación protagónica de los trabajadores y trabajadoras, cuando es inconveniente con sus intereses.
Greti Richard: Muchos trabajadores y trabajadoras que desean conformar un consejo de trabajadores y trabajadoras pide acompañamiento institucional, que esta previsto en la Ley Orgánica del Poder Popular, de igual manera piden formación ¿Qué mecanismos autogestionarios o institucionales conoces tu como docente y educador popular para obtener dicho acompañamiento y dicha formación?
Alberto Bonilla: Para efectos de los consejos de trabajadores y trabajadoras de su ámbito natural, a su ámbito lógico, es la Ley Orgánica del Trabajo, que como sabemos habiendo tenido una correlación de fuerzas favorable en la Asamblea Nacional, no se aprobó por una decisión política que no sabemos de donde viene.
La clase ha tenido que educar a la clase ante esta ausencia de un marco institucional, los trabajadores y trabajadoras iniciaron hace como cuatro o cinco años procesos de autoformación e investigación, que les fue permitiendo hacerse de un acumulado histórico, incluso de Venezuela como referente histórico con una discusión muy rica de los consejos de trabajadores de los años 70. En ese proceso de investigación llegaron a las fuentes de los clásicos del marxismo, Rosa Luxemburgo, Antonio Gramsci , Panicof , entre otros y además empezaron a construir su propia experiencia, su propia critica de la democracia representativa a la democracia protagónica y participativa alrededor de la empresa y fueron surgiendo una serie de experiencias muy interesantes que desde su sistematización y crítica es de la fuente de la cual nos nutrimos en el actual proceso de formación.
grettyrichard@gmail.com
(*) Entrevista a Alberto Bonilla, Sociólogo, educador popular, docente del Centro de Estudios de Economía Política de la UBV, cofundador del primer consejo de trabajadores del Ministerio del Trabajo durante la gestión del ex ministro José Ramón Rivero.
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