*Luisa Ortega Díaz
Los espacios de acercamiento del Ministerio Público con las comunidades se consolidan. El 30 de junio del presente año se inauguró la Fiscalía Municipal Primera del estado Miranda, ubicada en la estación del Ferrocarril Ezequiel Zamora, en Cúa.
De esta manera se garantiza el procesamiento de hechos punibles de poco impacto social y cuya impunidad acrecienta la disposición delictiva del autor.
Ante tales casos, hoy mediante las fiscalías municipales podemos hacer valer figuras procesales como el principio de oportunidad y la suspensión condicional del proceso, para someter a los autores de estos delitos de bagatela a un régimen de prueba que actúe como un verdadero mecanismo de prevención de la criminalidad.
A un mes de la puesta en marcha de esta nueva Fiscalía Municipal, ya ha atendido, aproximadamente, 70 casos de violencia de género. Contrarrestar este fenómeno es una necesidad social, y por las propias implicaciones familiares del mismo se requiere de instituciones muy cercanas a la gente para evitar que dichos hechos ingresen a la cifra negra de la impunidad.
Y es que contar con fiscalías cuya competencia territorial se limite a un municipio, permitirá detectar con mayor facilidad los factores criminógenos que con mayor fuerza inciden en tal espacio geográfico. En consecuencia, obtendremos datos precisos para la elaboración e implementación de políticas criminales apropiadas para disminuir los índices delictivos.
Además, aquellos procesados sometidos a una medida cautelar sustitutiva o a un régimen de prueba, pueden realizar trabajos comunitarios en su propio contexto social y, de esa manera, obtener un mejor provecho en cuanto a la reinserción social de estos ciudadanos.
También resulta importante destacar que las Fiscalías Municipales permitirán una mayor relación del Ministerio Público con las instituciones que tienen contacto directo con la comunidad, como entes policiales, lo cual redundará en un fortalecimiento de la respuesta del Estado al fenómeno criminal.
Indudablemente que estos entes fiscales contribuirán significativamente con la sociedad venezolana en la consecución de una justicia penal de mayor calidad.
Los espacios de acercamiento del Ministerio Público con las comunidades se consolidan. El 30 de junio del presente año se inauguró la Fiscalía Municipal Primera del estado Miranda, ubicada en la estación del Ferrocarril Ezequiel Zamora, en Cúa.
De esta manera se garantiza el procesamiento de hechos punibles de poco impacto social y cuya impunidad acrecienta la disposición delictiva del autor.
Ante tales casos, hoy mediante las fiscalías municipales podemos hacer valer figuras procesales como el principio de oportunidad y la suspensión condicional del proceso, para someter a los autores de estos delitos de bagatela a un régimen de prueba que actúe como un verdadero mecanismo de prevención de la criminalidad.
A un mes de la puesta en marcha de esta nueva Fiscalía Municipal, ya ha atendido, aproximadamente, 70 casos de violencia de género. Contrarrestar este fenómeno es una necesidad social, y por las propias implicaciones familiares del mismo se requiere de instituciones muy cercanas a la gente para evitar que dichos hechos ingresen a la cifra negra de la impunidad.
Y es que contar con fiscalías cuya competencia territorial se limite a un municipio, permitirá detectar con mayor facilidad los factores criminógenos que con mayor fuerza inciden en tal espacio geográfico. En consecuencia, obtendremos datos precisos para la elaboración e implementación de políticas criminales apropiadas para disminuir los índices delictivos.
Además, aquellos procesados sometidos a una medida cautelar sustitutiva o a un régimen de prueba, pueden realizar trabajos comunitarios en su propio contexto social y, de esa manera, obtener un mejor provecho en cuanto a la reinserción social de estos ciudadanos.
También resulta importante destacar que las Fiscalías Municipales permitirán una mayor relación del Ministerio Público con las instituciones que tienen contacto directo con la comunidad, como entes policiales, lo cual redundará en un fortalecimiento de la respuesta del Estado al fenómeno criminal.
Indudablemente que estos entes fiscales contribuirán significativamente con la sociedad venezolana en la consecución de una justicia penal de mayor calidad.
*Fiscala General de la República Bolivariana de Venezuela.
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