¡Cuidemos el legado de Chávez!

ANTONIA MUÑOZ.

Desde que nuestro amado Comandante Chávez no está físicamente entre nosotros, todos quienes compartimos sus ideas; de una u otra forma, de manera formal e informal, de manera explícita o tácita, hemos expresado que ÉL VIVE ENTRE NOSOTROS, y por lo tanto, estamos comprometidos a defender su legado. En este sentido, se nos ocurre que no está de más recordar algunos aspectos fundamentales y neurálgicos de su legado, “antes que se nos olvide”, parafraseando al querido camarada Alí Rodríguez Araque, en el título de su más reciente publicación. En este sentido, consideramos que lo primero que debemos tener presente son las razones que hicieron posible el “fenómeno político” que fue el Comandante Chávez, en el sentido de aglutinar en torno a su carismática figura tanto apoyo de pueblo en un tiempo tan corto.

En nuestra humilde opinión, el Comandante Chávez irrumpió en la vida política de Venezuela cuando más desesperada y hastiada estaba buena parte de la población, debido a tanto despropósito de los gobiernos de la Cuarta República. Por eso el “por ahora” del Comandante Chávez el 4 de febrero de 1992, representó una gran esperanza para el pueblo en general, que se sentía agobiado de problemas de diversa índole. Por eso al salir de la cárcel, comenzar a recorrer el país y a expresar su pensamiento político de una manera más expresa y directa, concitó el interés de gente independiente, a la que era o había sido militante de los partidos de izquierda; sin embargo, también despertó el interés del pueblo que hasta ese momento había votado por Acción Democrática y Copei, pero que estaba profundamente decepcionado de esos gobiernos. Así que la primera premisa que debemos tener en mente es que: líderes y liderezas políticos de la revolución, al igual que las servidoras y servidores públicos, debemos mantenernos alejados de “lo que no le gusta al pueblo”, porque el pueblo tiene memoria y cobra caro desviaciones y traiciones.

Siendo que la mayoría del pueblo encontró al líder que paró un “estado de cosas” que ya no soportábamos, líder que como primera gran acción política de gobierno ofreció al pueblo venezolano LA CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA, una Constitución Revolucionaria, que desde el preámbulo dibuja el país que queremos. Líder que durante 13 años nos ofreció un gobierno de INCLUSIÓN SOCIAL, en función de mayor acceso de la mayoría a la educación, salud, alimentos, por citar sólo 3 aspectos; DEFENSA DE NUESTRO PETRÓLEO, ante el saqueo iniciado con Juan Vicente Gómez en 1908; DEMOCRACIA PARTICIPATIVA Y PROTAGÓNICA, con amplísima participación política, que incluye el novísimo Referéndum Revocatorio y las Leyes del Poder Popular que potencian el protagonismo popular y facilitan al pueblo organizado y consciente el ejercicio de su doble rol, como sujeto activo en el gobierno revolucionario y en el ejercicio del control social y político, a través de las Leyes del Poder Popular y de los Documentos fundamentales del partido de la revolución. De esta manera, daremos cumplimiento a la máxima chavista de que “partido y gobierno son dos brazos de un mismo cuerpo, que se ayudan entre sí para servirle al pueblo”; donde el pueblo no es otro que el cuerpo del cual provienen y al cual pertenecen ambos brazos. En consecuencia, tanto el Gobierno como el partido revolucionario deben “mandar obedeciendo al pueblo”.

Sin embargo, a pesar de todo lo anterior, debemos mantener en mente que los actos humanos nunca serán perfectos, pero si perfectibles. Por lo tanto, no debemos olvidar, que seguimos en transición ya que no hay nada más difícil de cambiar que las viejas costumbres. Por eso, como muchas veces nos recordó nuestro amado Comandante: “lo nuevo no termina de nacer y lo viejo no termina de morir”. En consecuencia, lo nuevo que está naciendo se puede contaminar, y de hecho se contamina, de lo viejo; por lo tanto, debemos estar siempre vigilantes porque a cada nada surgirán desviaciones que confundirán, decepcionarán y alejarán a las masas.

Para minimizar y corregir las desviaciones, además de las Leyes de la República, como remedio de consumo diario tenemos: la revisión de “LAS 5 LÍNEAS ESTRATÉGICAS, que fueron 5 campanazos de alerta que escribió el líder en el último cuatrimestre de 2010, y que las presentó a la dirigencia y militancia del PSUV para su discusión y enriquecimiento en enero de 2011. Para continuar el conjuro, siempre debemos tener a mano como libro político de cabecera: EL LIBRO ROJO, aprobado en abril del 2010. Es deber de todas y todos revisar, profundizar, adecuar e internalizar sus Documentos Fundamentales. Sin ninguna duda, otro libro de cabecera y de revisión obligatoria para quienes tenemos la Misión de cuidar el legado del Comandante Chávez es LA PROPUESTA PARA LA GESTIÓN BOLIVARIANA SOCIALISTA 2013- 2019, QUE NOS PRESENTARA EL Comandante a la consideración del pueblo venezolano el 11 de junio de 2012. Lo juramos! CHÁVEZ VIVE. LA PATRIA SIGUE!