Antonia Muñoz.
Le damos gracias a Dios y al soberano pueblo de Venezuela por habernos concedido la oportunidad de que Hugo Chávez, el máximo líder de la revolución bolivariana pueda presentarse como candidato presidencial para las elecciones del 2012, lo cual plantea la posibilidad cierta, dependiendo del trabajo y de las actitudes de todos nosotros, de continuar al frente de los destinos de nuestro país. Esta victoria era necesaria para profundizar y consolidar los logros alcanzados y para aplicar estrategias más efectivas en asuntos en los cuales no hemos sido muy exitosos, siendo el más importante de todos la inseguridad. Ciertamente debemos hacer lo posible y lo imposible para atacar por todos los flancos el cáncer social de la inseguridad, sobre todo la personal. Para enfrentar esta enfermedad de la sociedad se necesita el concurso de todas y todos, incluidos los venezolanos y venezolanas que adversan nuestro proyecto político. Próximamente reflexionaremos sobre este complejo y multifactorial problema, que me permito adelantar, no es un asunto exclusivo de la policía. Mucho tiene que ver en esto la constitución de la familia, y por ende la formación familiar, así como la escolar. También tiene su peso la calidad del entorno donde se crían nuestras niñas y niños, a veces rodeados de ventas de aguardiente por doquier, lo cual es aderezado en oportunidades por la venta y consumo de drogas, cáncer éste que cada día pareciera hacerse más incontrolable. Si a todo lo anterior le agregamos la promoción de antivalores desde muchos medios de comunicación, incluyendo Internet, donde nuestros jóvenes pueden escoger sin mucha dificultad entre prostitución infantil o mensajes satánicos como parte importante de su deformación espiritual. Si a todo este cóctel le agregamos la impunidad de los delitos debido a muchas menudencias, pero entre otras, al trajinado retardo procesal por quítame esta paja, beneficios procesales hasta para los crímenes más horrendos contra la sociedad, y por supuesto, el Dios dinero moviendo muchas bisagras, entonces hasta los más mentes cuadradas podrán comprender que el problema de inseguridad es un monstruo de mil cabezas y debemos enfrentarlo con objetividad y entre todos. Volviendo al punto inicial, recomiendo administrar el triunfo con humildad. Está terminantemente prohibido engolosinarse y dejarse dominar por la prepotencia que produce el triunfo en muchos de nosotros. Está prohibido aferrarse a la idea equivocada de que supuestamente somos quienes mandamos. Prohibido olvidar que aquí quien manda es el pueblo soberano que tiene ojos para ver nuestras acciones y oídos para oír, y tengo la fuerte sospecha que la mayoría del pueblo quiere oír palabras sanadoras de las heridas que siempre dejan las derrotas en cualquier tipo de contienda. Y por favor, que nadie vaya a creer que estoy hablando de conmiseración con o de claudicar principios ante el adversario. No, entre otras cosas, estoy hablando de respeto. La burla y el uso de expresiones mordaces generan rabia, dolor, resentimiento, y por ende violencia.¿Que si la oposición hubiese triunfado se estaría burlando de nosotros? ¿Que si la oposición hubiese triunfado nos agrediría? Tal vez, pero ¿Acaso pertenecemos a las filas del odio o a las filas de la revolución que es sinónimo de amor? Si es verdad, y así lo creo, que nos mueve el bien común y hacemos buena nuestra palabra de amar al prójimo como a nosotros mismos, entonces debemos al menos dejar de un lado las ofensas del adversario. Debemos tener presente que nuestro primer guía espiritual: Jesús de Nazareth nos habla muy claro en Romanos 12: 17: No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres…19: No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: mía es la venganza, yo pagaré, dice el seño.20. Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer, si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza.21: No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal. Antonio José de Sucre también nos ofrece sabias enseñanzas en este particular: “Gloria al vencedor y Honor al vencido”. Así que honor al vencido y gloria al vencedor, de lo contrario corremos el riesgo de que nuestras acciones no se parezcan a nuestras palabras, lo cual es sumamente peligroso porque nos hace perder credibilidad, ya que la gente nos percibiría como los propios fariseos, que dicen pero no hacen. Finalmente, felicitaciones a los portugueseños y portugueseñas, una vez más lo hicieron muy bien. Felicitaciones al gobernador y a los 13 alcaldes y a nuestra única alcaldesa. Felicitaciones al PSUV que debe potenciarse cada vez más. Felicitaciones también al PPT, al PCV y al MEP ojalá encontremos la fórmula para seguir marchando unidos. Gracias a las misiones, diferentes comités por el SÍ. Gracias a todos, pero por encima de todos nosotros, gracias a Dios que no nos desamparó. RESPETO A LOS OTROS Y ENTRE NOSOTROS Si por norma mínima de convivencia y para mantener la paz es necesario que reconozcamos y respetemos a los otros, cuanto mas se hace necesario cumplir con esta regla de oro entre nosotros. Esto lo digo porque desde que ocurrió la transmisión de mando el 03 de diciembre, he tenido conocimiento de fuente de todo crédito sobre reiteradas descalificaciones hacia mi persona y algunos miembros del equipo que me acompañaron en el gobierno. Por los comentarios y acusaciones que hacen públicamente entiendo que intenta crear la matriz de opinión que el gobierno que dirigí durante un poco más de ocho años además de no haber hecho nada hizo un uso indebido de los recursos públicos.1. En relación a este trato que no creo merecer, quiero puntualizar lo siguiente: En primer lugar les recuerdo al nuevo gobierno que la ley les concede 120 días a partir de la fecha de entrega para que revisen cada dirección “hasta las uñas”, claro está sin parar la administración Pública, porque perjudican. Es su deber y es su derecho. Todas las irregularidades que Uds. detecten hagan la debida acusación ante la Fiscalía. Sin embargo, en nombre de la revolución les pido que recuerden que todo ciudadano o ciudadana es culpable hasta que se demuestre lo contrario, por lo tanto, me parece que no es ético que algunos de Uds. constantemente estén arrojando dudas sobre mi persona y sobre quienes trabajaron en el gobierno que yo dirigí.2. En relación a lo anterior, no es ni será mi intención jamás pedirle alguien que encubra delito, lo que si pido es que no fomenten tan abiertamente el odio y el desprecio público “hacia todo lo que huela a la negra”, como dicen peyorativamente algunos de Uds. En cuanto a los miembros del gobierno saliente y al entrante respecta, todos deben tener muy claro el artículo 139 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: El ejercicio del poder público acarrea responsabilidad individual por abuso o desviación del poder o por violación de esta Constitución o de la Ley. Igualmente, les recuerdo a todos y a todas el artículo 25 de la CRBV: Todo acto dictado en ejercicio del poder público que viole o menoscabe los derechos garantizados por esta Constitución y la Ley es nulo; y los funcionarios públicos o funcionarias públicas que lo ordenen o ejecuten incurren en responsabilidad penal, civil y administrativa, según los casos, sin que les sirvan de excusas órdenes superiores.
viernes, 20 de febrero de 2009
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