Contra la dictadura política oposicionista .

*Francisco Rangel Gómez

La reciente victoria del PSUV en el municipio Pedro Padre Chien y la democrática decisión de consultar nuevamente a las bases para la selección de los candidatos a la Asamblea Nacional, develan importantes lecciones sobre, la participación protagónica para la oposición.

Sin duda, nuevamente el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ha dado el ejemplo democrático de consultar a las bases en un proceso electoral que comienza a desatar pasiones, generalmente sectarias, en los sectores políticos a las cuales no escapamos quienes apoyamos la Revolución Bolivariana.

Sin embargo, en su corto tiempo de vida, el partido de la revolución, ha demostrado con hechos concretos, que sí es posible practicar la democracia participativa y protagónica que se expresa en nuestra carta magna y más aun cuando es el poder del pueblo el epicentro del proceso bolivariano. Por eso tenemos sobradas razones para decir que el Congreso de Angostura se celebra en Venezuela todos los días.

Resulta verdaderamente lamentable que cuando hemos avanzado tanto en el empoderamiento del pueblo en todos los sentidos, veamos aún la dictadura política que se vive en la oposición, donde no hay cabida para nuevos nombres y mucho menos para que sean las bases de esa supuesta “unidad”, las que se expresen en cuanto a la representación que quisiera llevar a la contienda electoral por la Asamblea Nacional.

El reto que desde aquí les lanzamos a partidos políticos de diez, veinte y hasta setenta años, es que abran la posibilidad de consultar a las bases y así cumplir, no solo con la Constitución Bolivariana, sino con sus propios seguidores.

El estado Bolívar es un ejemplo perfecto de esa dictadura política oposicionista, cuando no hay forma que se permita la expresión de las escasas bases para escoger a sus candidatos, especialmente cuando se imponen nombres, como el de quien tiene diecisiete (17) años perdiendo elecciones en este estado y que por cierto la penúltima paliza fue de candidato a la Asamblea Nacional, cuando obtuvo la pírrica suma de seiscientos votos, habiéndose postulado de primero en todas las listas y circuitos como lo pretende hacer ahora.

La reciente victoria del PSUV en el Municipio Padre Chien, demuestra en primer término el fraude electoral impugnado y que con la mayor justicia se revirtió por parte de un pueblo que clamaba por una Alcaldesa de la talla de Sol Rubineti, mujer que demostró con su fortaleza ante tanta adversidad, que viene a trabajar con la mayor pulcritud por un pueblo que se merece lo mejor.

En esas elecciones vimos con mucha preocupación el reforzamiento de los anti valores por parte de la anterior autoridad quien pretendió comprar la conciencia de un pueblo, agarrado de tanta necesidad por el desempleo que no logró revertir él mismo durante su corta gestión.

Sigamos venciendo en revolución, dando el ejemplo como grupo político que reivindica las decisiones de sus bases como aporte fundamental en el fortalecimiento del naciente poder popular y asumiendo nuestros puestos de batalla, rodilla en tierra, como lo acabamos de hacer en Padre Chien, pero ahora para iniciar de una vez la Campaña Admirable por la Asamblea Nacional el próximo 26 de Septiembre.

*Gobernador del Estado Bolívar por el período 2008-2012.