Publicado el miércoles 30 de mayo de 2012, La columna del diablo / Diario Vea.
¿Cómo les parece? En Guayana un grupo de líderes sindicales que dicen ser “revolucionarios” porque visten de rojo, desde hace varios meses vienen haciendo tomas y guarimbas en empresas como SIDOR, con el fin de presionar al Gobierno bolivariano a discutir los contratos colectivos vencidos.
Esta semana las protestas se trasladaron a la redoma de Bauxilum, donde se congregaron los lideres de la Fuerza Bolivariana de Trabajadores, el grupo de Alianza Sindical que durante este año ha estado mostrando su “fuerza”, llegando a paralizar varias líneas de producción de SIDOR, que le ha costado mas de 200 millones de dólares en perdidas a la nación y miembros de la coordinación regional de la Central Socialista de Trabajadores.
Lo que buscan estos “líderes revolucionarios” es alterar la paz laboral, casualmente en estos precisos momentos cuando entramos en la recta final de la campaña presidencial. Para ser francos, mis queridos lectores, esto me huele a chantaje, a sabotaje y a francas guarimbas con el fin de encender la pradera.
Es bien sabido que las empresas básicas lo que están es dando pérdidas al Estado, porque son contadas las autosustentables, y para el colmo de males esta dirigencia sindical pesetera lo único que busca son sus reivindicaciones laborales, sin importarles la suerte del país ni el futuro del proceso bolivariano.
Ahora, estos seudo revolucionarios que piensan únicamente con el estómago, enfilaron sus baterías contra el ministro de Industrias, Ricardo Menéndez, porque tuvo el gran valor de pedirles sobreponer el interés nacional sobre los reclamos reivindicativos.
De ahí la ira santa de estos “dirigentes”, quienes se escandalizaron por la orden ministerial de posponer la discusión de los contratos colectivos hasta que las empresas recuperen su productividad.
Ya se les olvido un discurso del 15 de mayo de 2010, cuando el presidente Hugo Chávez señaló: “A mi me daría pena estar reclamando dividendos de unas empresas que no dan dividendos, yo no lo haría, aun cuando están firmados en contratos colectivos. ¡Como van a estar pidiendo dividendos, donde no los hay, chico!”.
En aquella ocasión el Comandante los exhortó a renunciar a los beneficios: “¡Que van a estar cobrando, chico, si lo que dan son pérdidas!”.
Por estos cetevistas vestidos de rojo, que se han vendido a algunos dirigentes del PSUV como “verdaderos revolucionarios”, insisten en exigir al Gobierno que cumpla con los contratos colectivos y todos los privilegios. ¡Como si estas empresas estuvieran dando grandes ganancias! ¡Que manera de hacer revolución!
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