Susana Ibarra
Han pasado doce años de cambios, con una fuerte corriente revolucionaria, que se vive, tanto en el imaginario de aquellos que creemos en un mundo mejor, como de los que ponemos en práctica la ética revolucionaria.
Pero que sucede cuando hoy día se encuentra dentro de un ministerio, institución pública, alcaldía, gobernación un ser que llega a su puesto, a su cargo, con lo que llamamos la 5ta republica, que sucede?, se debe hacer una revisión completa, una digitalización a fondo en cuerpo y alma, que nos de luces claras de lo bien que vamos, de lo equivocados que podemos estar o de lo igualito que podemos ser a la 4rta república; es importante aclarar que la primera intención de estas líneas, es revisar lo que he denominado: las sanguijuelas de la quinta república, si, señor, si señora, porque sabemos que la revolución existe, gracias aquellos que creemos, que luchamos, que votamos, que estuvieron en puente llaguno, que lucharon en el paro petrolero, que apoyamos al comandante una y otra vez, pero debemos criticar duro hasta erradicar aquellos que aún quieren pasar por un puesto de trabajo en la administración publica de nuestra revolución, con todos los comportamientos de un verdadero cuarto republicano.
¿Qué sucede?, fíjese bien, vamos al grano, cuando usted llega a trabajar en un puesto alto, y usted, lo primero que hace, es olvidar sus raíces, lo primero que hace es aprovechar los beneficios del cargo, se lucra directa o indirectamente, porque usted ahora es el gerente, es el ministro, es el director, es el coordinador, usted esta haciendo lo mismo que hacían los adecos y los copeyanos, sin piedad, si usted acto seguido, no tiene tiempo para atender al publico, mucho menos a ese pueblo que necesita de usted, que necesita que usted gerencia en la calle, que oiga que escuche, usted, esta haciendo lo mismitico que hacían los adecos y los cope, si usted, lo tercero que realiza es ir a disfrutar en los mejores restaurantes las mejores carnes, los mejores platos, vinos, y el famoso whisky y además paga las facturas con dinero del estado, es usted digno de haber trabajado en un gobierno como el de Lusinchi, o CAP, sería muy bien recibido, si usted, muy estratégicamente, se coloca la camisa roja solo el día de la marcha, de la reunión o del acto, usted ha hecho un posgrado y a mejorado el comportamiento de esos militantes de esos viejos gobiernos, ya que por lo menos ellos si dicen: ¡me muero adeco!, y su camisa blanca siempre, en cambio ustedes, disfruta las mieles y tiene tiempo para hacer como los camaleones, si usted, recibe prebendas, regalos, no paga las cuentas, acepta que le den grandes obsequios materiales, sigue destacándose como el verdadero o la verdadera aprovechadora del cargo, si usted, mantiene a sus trabajadores y trabajadores bien distanciados de usted, nunca jamás les da el ejemplo revolucionario, y al contrario les exige en nombre de la revolución, usted querida amiga o querido amigo, que esta en ese cargo es peor que los dirigentes cabilleros de AD, peor aún si tiene la potestad de incluir personal en la administración publica y a cambio le exige a las damas la famosa horizontalidad y luego el curriculum, es tal cual como hacían con la gata de Lusinchi, reina la inmoralidad, no puedo dejar por fuera aquellos que en todas las vacaciones en sus pasaportes ya no les cabe tanta salida y tanto dinero para viajar al exterior con toda su familia, demás esta decir los que logran pasar dinero del estado a sus cuentas personales, ese es el broche de oro que nos permite decir: estoy en vida, en la quinta república, pero en mi cuerpo… adora los gobiernos anteriores, no hace nada por cambiar todo aquello que se debe cambiar para bien, no hace nada para dar el ejemplo y mucho menos da todo lo que puede dar verdaderamente para que la revolución avance.
Es por ello que el llamado, rumbo al 2012, rumbo a seguir consolidado el proceso de cambios, a pesar de que arrastramos antivalores capitalistas, el llamado es para revisar los cargos de alto nivel, cada día con lupa, el comportamiento, preparar verdaderos cuadros políticos, ojo no robotizados, sino dispuestos a gerenciar, a llevar adelante políticas verdaderamente revolucionarias, que nos permita avanzar a profundidad, sabemos pues que la 5ta columna esta presente en todas partes, que no dudan en sabotear, que la tentación es grande y algunos se atreven a decir que es el diablo mismo, que estar en un cargo, es ostentar poder, y atraer ese montón de antivalores que te sacan del camino, pero también se que existen muchos y muchas que si tienen el norte bien claro, comenzando por nada mas y nada menos el presidente Hugo R. Chávez F. que nunca ha perdido el norte, él como persona, jamás se ha olvidado de donde viene, mantiene su humildad, pero sobre todo su norte.
Nuestra revolución tiene cuatro ingredientes fundamentales, el pueblo, que no claudica, los militares que aman y defienden la patria para que nunca mas vuelvan, los pilares de la administración publica quienes motorizan todos los planes de gobierno y mucho amor, vamos a revisar el brazo ejecutor cada día, es fundamental que la administración publica tenga verdaderos Servidores públicos y no funcionarios públicos, porque es cuesta arriba sumar, despertar, hacer que crean aquellos que nunca creen en nada, es muy fácil en minutos darle todos los argumentos a los funcionarios que en la cuarta republica si sabían manejar las instituciones como un negocio y que disfrutan cuando ven que estamos en algunas ocasiones repitiendo muy mal, lo que ellos hacían descaradamente, en la cuarta, que era: robar, aprovecharse y nunca hacer llegar al pueblo los beneficios.
Creo que es prioridad, hacer una verdadera revisión de los organismos públicos y que sea el pueblo en la calle, que ningún ministro, director, jefe, gerente, coordinador verdadero tenga temor de sentarse con su comunidad para revisar lo que se esta haciendo mal y enrumbar verdaderamente el país hacia la consolidación de la revolución Bolivariana.
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