Alexis Adarfio Marín
I.
Los revolucionarios y revolucionarias, prácticamente, hemos vivido dos años de debate desde que el camarada Chávez el 21 de mayo de 2009, asumió el asunto de la clase obrera como una política pública enfocada en el Control Obrero Socialista:
“Guayana, así como es el macizo guayanés, se convertirá en la plataforma del socialismo, de la construcción del socialismo, con la clase obrera como vanguardia (…). Guayana será una escuela socialista. Cada fábrica una escuela, para producir no sólo briquetas y planchones, acero y aluminio, sino al hombre, la mujer nueva, la sociedad socialista”.
Tenemos bastante teoría de la praxis, pocos hechos cumplidos y muchas contradicciones. Es lógico que haya ocurrido así. 100 años de dominación capitalista en las fábricas pesan en la conciencia y organización de la gente para que se produzca al cambio.
Lo cierto es que, la revolución bolivariana obtuvo la primera victoria política: en las fábricas todo el mundo habla del Control Obrero Socialista.
Llegó la hora de relanzarnos con lo que tenemos ganado, busquemos la victoria ideológica para que todo el mundo practique el Control Obrero Socialista en la producción de “(…) briquetas y planchones, acero y aluminio, (…) el hombre, la mujer nueva, la sociedad socialista”.
Esa praxis es la línea revolucionaria.
II.
Una estrategia que se dictó para injertarse en Guayana (fuente mundial de materias primas), ha cruzado el rio Orinoco y de la mano del Camarada Chávez, se está propagando por todo el país.
El Plan Guyana Socialista no está solo, hay una movilización nacional con fuerza de pueblo (y no de siglas) POR el Control Obrero Socialista. Claro está, con las contradicciones ideológicas, que han llevado algunas veces a enfrentamientos, persecuciones, destituciones, prohibiciones, amenazas y condenas contra la vanguardia revolucionaria.
Es necesario Relanzar el Control Obrero Socialista para cohesionar, formar y movilizar, física e ideológicamente a la clase obrera POR la sociedad socialista y CONTRA el burocratismo, el divisionismo, la corrupción, la explotación y el consumismo que existen, gracias al estilo de las fábricas que nacieron en la “cuarta república” para servir al capitalismo.
III.
Relanzar el Control Obrero Socialista pasa por:
- Rendirle cuentas al Camarada Chávez y al Pueblo de la situación del Control Obrero.
- Crear espacios de encuentros permanentes POR el Control Obrero para intercambiar experiencias y trazar planes que derroten las dificultades y los enemigos del proceso: Parlamentos Obreros, Consejos de Soberanía Productiva.
- Luchar por un nuevo marco legal: Ley Orgánica para el Trabajo Liberador y Ley Orgánica para los Consejos de Trabajadores y Trabajadoras.
- Constituir Mesas para transformación en Empresa Socialista: Productividad económica y social; Tecnología apropiada; Ambiente; Presupuesto participativo; Trabajo sin División social y Sana alimentación. Cosas que nos liberen del yugo de la ISO 9000
- Instalar Mesas para la Sociedad Socialista: Seguridad y Defensa de la Patria y la Revolución; Poder Popular; Nuevas empresas socialistas; Generación y distribución de riquezas; y especialmente, Servicios Públicos para que los trabajadores se liberen de la privatización, incorporándose a la defensa de los sistemas públicos de Educación, Salud y Vivienda.
¡Toda la Patria bajo Control Obrero Socialista!.
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