¡Que Molleja de razones humanitarias ¡

Eileen Padrón

Con todo respeto, y sin ánimo de inmiscuirse en política exterior, el asilo otorgado por parte del gobierno peruano al delincuente prófugo Carlos Ortega, nos deja perplejos a muchos venezolanos de buena fe que vimos con beneplácito y a la vez con cierto recelo, la actitud del Presidente Alán García para con Hugo Chávez después de mutuas descalificaciones. No obstante, la diplomacia prevalece y aunque se tengan diferencias existen buenas relaciones. Ahora bien, ¿que pasará? no lo sé, lo que si es seguro es la reacción de nuestro pueblo ante tan injusta y mal agradecida decisión, soberana claro está, pero descocada 100%.
Sinceramente, la respuesta de personeros del gobierno, la respeto, mas no la comparto, está bien que sea una decisión soberana del gobierno peruano, pero debería haber algún pronunciamiento por parte del nuestro, y no solo pedirle al Presidente García que se pronuncie, con darle el asilo se pronunció. Carlos Ortega cometió delitos muy graves, no solo políticos que no dejan de ser graves, hubo atropellos hacia el sector laboral, hacia el sector empresarial, fueron muchas las víctimas que quedaron sin empleos, muchas empresas quebradas por culpa de este facineroso corrupto que luego se lavó las manos ante el sabotaje del 2002/2003 con la famosa frase “se nos escapó de las manos” ¡que vaina es esa! No fue suficiente calarnos la impunidad sobre este caso cuando andaba felizmente recorriendo el país, conspirando nuevamente, hasta que pidió asilo en la Embajada de Costa Rica y el gobierno la acepta también por “razones humanitarias”.
La decisión del gobierno venezolano en otorgarle el salvo conducto, cayó muy mal entre los que sufrimos en carne propia la inclemencia del paro-sabotaje, pero asumimos que son acuerdos internacionales y aunque el Presidente no estaba obligado a hacerlo, lo firma. No conforme con lo que hizo aquí, allá en Costa Rica emprende una campaña de desestabilización y junto a otras fascistas en Miami interviene en actos antidemocráticos obligando al gobierno de Costa Rica, solicitarle que se retire de su territorio en Marzo del 2004. Por su puesto huye como rata y llega a estar clandestinamente por meses aquí en Venezuela hasta que es atrapado en el famoso bingo con falsificación de identidad. Por fin se le sigue juicio y es condenado a 15 años y 11 meses por los cargos de rebelión civil, instigación a desobedecer las leyes y el uso de documentos falsos ¿Y lo demás? ¿Y los muertos productos del paro? ¿Y los desempleados por su culpa? ¿Y las empresas que le impedían abrir sus puertas y quebraron? ¿Y el señor quemado en su autobusete en Maracay
solo por querer trabajar? ¿Y los niños quemados por prender una cocina de kerosene por no haber gas? ¿Y el niño muerto por no llegar a tiempo al hospital por falta de gasolina? Sin contar la cantidad de denuncias que reposan en la Defensoría y la Fiscalía por lo ocurrido el 11 de Abril cuando fue él quien desvió la marcha hacia Miraflores. Y a este especimen se le otorga un asilo por “razones humanitarias”...
Que alguien me explique como una persona que cometa tantos delitos y que haya violado un acuerdo internacional de asilo político, con una sentencia penal de casi 16 años a cuestas y prófugo de la justicia venezolana, no pierda todos los derechos a un nuevo asilo político y de paso también se le conceda por “razones humanitarias” ¿Y que carajo hizo el gobierno venezolano en el 2003? Garantizarle sus derechos humanos aunque no los mereciera y le otorgó el salvo conducto. Ojalá y a la publicación de este artículo, alguien se haya pronunciado aunque sea elevando una palabra de protesta y me refiero al Ejecutivo Nacional. Me imagino que a esta altura no solo yo he protestado. El gobierno venezolano y el pueblo se jactan de ser humanitarios con los hermanos que nos necesitan y Perú no escapó a esta solidaridad, el pueblo es otra cosa y seguiremos ayudándolos sin esperar nada a cambio, pero ante la puñalada trapera del gobierno de Alán García, sinceramente no podemos bajar la cabeza, aunque sea por la memoria de los camaradas fallecidos en los días de Abril 2002…

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