Aurora Lacueva
Se sigue avanzando en la mesa de diálogo nacional constituida hasta
ahora por representantes del Gobierno y de algunos de los partidos de
oposición, como Avanzada Progresista, MAS, Cambiemos, Soluciones y
Esperanza por el Cambio. Ya se han instalado las mesas complementarias
que abordarán temas electorales, económicos y políticos.
Este esfuerzo merece el apoyo de toda la ciudadanía porque va abriendo caminos de convivencia democrática, basada en elecciones libres y confiables. Lo otro es el aventurerismo de buscar el poder gracias a invasiones o golpes de Estado o, de otra parte, la aspiración insana de gobernar eternamente sin el voto de las mayorías, sino a base de tretas y represión.
Creemos que el gobierno presidido por Maduro y también el Psuv tienen una gran responsabilidad en la conducción ágil y productiva de esta iniciativa: precisamente por estar al mando, se hallan en la obligación de hacer los máximos esfuerzos a fin de que logremos salir buenamente de la debacle que vivimos.
A menudo, cuando dirigentes del Psuv hablan de la situación del país pareciera que en el escenario se encontraran ellos y una molesta dirigencia opositora con la que deben lidiar. Pero ellos a quien tienen enfrente y a quien deben responder es a todo un pueblo que sufre la enorme crisis que el propio Psuv contribuyó de modo decisivo a generar. Oí a un importante dirigente de ese partido decir en una entrevista, sobre la gestión del Gobierno: “Hemos hecho cosas buenas y cosas malas”. Por lo menos reconoce esto último, pero la frase igual preocupa porque no le hace justicia a la situación.
El Psuv debería reflexionar a fondo sobre sus errores, desarrollados además en un ambiente de ávida corrupción, muy lejano del ideario socialista. Se tomaron decisiones económicas equivocadas durante estos veinte últimos años. Y especialmente desde 2013, cuando ya era clara la necesidad de rectificaciones, se fue incapaz de cambiar el rumbo, desencadenando al contrario el desastre en que vivimos (¡una caída del PIB de 70% en los últimos seis años!).
Las sanciones del Gobierno de EEUU han venido a agravar nuestro estado, pero la raíz del derrumbe es interna. De otro lado, la conducta golpista de buena parte de la oposición contribuyó a desarrollar la crisis. Busquemos resolver. (@AuroraLacueva
Este esfuerzo merece el apoyo de toda la ciudadanía porque va abriendo caminos de convivencia democrática, basada en elecciones libres y confiables. Lo otro es el aventurerismo de buscar el poder gracias a invasiones o golpes de Estado o, de otra parte, la aspiración insana de gobernar eternamente sin el voto de las mayorías, sino a base de tretas y represión.
Creemos que el gobierno presidido por Maduro y también el Psuv tienen una gran responsabilidad en la conducción ágil y productiva de esta iniciativa: precisamente por estar al mando, se hallan en la obligación de hacer los máximos esfuerzos a fin de que logremos salir buenamente de la debacle que vivimos.
A menudo, cuando dirigentes del Psuv hablan de la situación del país pareciera que en el escenario se encontraran ellos y una molesta dirigencia opositora con la que deben lidiar. Pero ellos a quien tienen enfrente y a quien deben responder es a todo un pueblo que sufre la enorme crisis que el propio Psuv contribuyó de modo decisivo a generar. Oí a un importante dirigente de ese partido decir en una entrevista, sobre la gestión del Gobierno: “Hemos hecho cosas buenas y cosas malas”. Por lo menos reconoce esto último, pero la frase igual preocupa porque no le hace justicia a la situación.
El Psuv debería reflexionar a fondo sobre sus errores, desarrollados además en un ambiente de ávida corrupción, muy lejano del ideario socialista. Se tomaron decisiones económicas equivocadas durante estos veinte últimos años. Y especialmente desde 2013, cuando ya era clara la necesidad de rectificaciones, se fue incapaz de cambiar el rumbo, desencadenando al contrario el desastre en que vivimos (¡una caída del PIB de 70% en los últimos seis años!).
Las sanciones del Gobierno de EEUU han venido a agravar nuestro estado, pero la raíz del derrumbe es interna. De otro lado, la conducta golpista de buena parte de la oposición contribuyó a desarrollar la crisis. Busquemos resolver. (@AuroraLacueva
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