Inclusión y calidad

 ALEXANDRA MULINO

El ministro para la Educación, Héctor Rodríguez, presentó el balance de gestión del fin de año escolar 2024-2025 a un nutrido grupo de docentes e investigadores.

El mencionado titular de tan importante cartera mencionó cinco líneas de acción clave que llevan aún adelante hasta su cabal cumplimiento: lograr la inclusión de todos los niños, niñas y adolescentes al sistema educativo; garantizar el cumplimiento del horario escolar establecido para las instituciones; asegurar los docentes necesarios para el óptimo funcionamiento de cada institución; avanzar en la calidad educativa y mejorar los procesos de dirección.

De igual manera enfatizó una serie de logros que merecen ser subrayados: más de 365 mil estudiantes se incluyeron en el sistema educativo; 95,1% de los estudiantes reciben clases entre 4-5 días a la semana, superando el horario mosaico; el déficit de docentes disminuyó en 62%; se incorporaron más de 100 mil docentes en programas universitarios de formación; se rehabilitaron 1.415 planteles a nivel nacional; se beneficiaron 583.046 estudiantes, se otorgaron 151.777 mesas y sillas, y aumentó en 36% la distribución de alimentos mensuales dispuestos por el PAE.

En el marco de la calidad, se ordenaron los programas educativos en las siguientes áreas: matemáticas, ciencias naturales, identidad y prácticas del lenguaje. En aras de profundizar la democracia participativa, estos programas –y subprogramas que los integran– se consultan a nivel nacional entre universitarios, docentes y expertos.

Cabe destacar que en el ámbito de la identidad enfatizan las siguientes áreas: historia, ciencias sociales y geografía. De suma clave entender que en el campo de la identidad se debe apelar a la reconstrucción de la memoria crítica revolucionaria de las ciencias sociales y humanas venezolana, a fin de comprender que los niños, niñas y adolescentes deben internalizar sentimientos de Patria y soberanía en la comprensión de su ubicación geoestratégica respecto del hegemón estadounidense. Luis Antonio Bigott, Federico Brito Figueroa, Belén Sanjuán, Miguel Acosta Saignes, Domingo Felipe Maza Zavala, etcétera, son centrales en esta reinterpretación. De esta manera, rompe con la historiografía que parte de la neutralidad axiológica.
¡Celebramos tan significativo logro!