*JUAN MARTORANO
América Latina y el Caribe son en
estos momentos escenarios de grandes manifestaciones y protestas como parte de
una convulsión social producto de las medidas neoliberales que EEUU y aliados
aplican, dentro del contexto del dominio del espectro global y en sus planes de
reconquista y recolonización de lo que ellos consideran su “patio trasero”.
Indudablemente, los triunfos en
Bolivia y Argentina nos alegran sobremanera. Uruguay luce cuesta arriba, sin
embargo el hecho de que un triunfo del Frente Amplio luzca cuesta arriba no
quiere decir que en cuatro semanas no pueda revertir una tendencia, si se saben
hacer las rectificaciones a tiempo y desenmascarar la propuesta programática de
Lacalle Pou. Es importante que esto se haga así, por el bien de la Patria
Grande.
Pero la mayor atención se ha
enfocado en una de las sociedades más desiguales del continente como lo es
Chile. El país que han mostrado como la panacea y el modelo a exportar para el
resto de nuestras naciones, mostró su verdadero rostro: Un pueblo hastiado de
las políticas de shock y de la receta neoliberal, que ha estallado por los
cuatro costados.
Chile lleva cerca de tres semanas
encendido en protestas y manifestaciones, resistiendo una brutal represión y
violaciones de Derechos Humanos, hechos estos en los que los organismos
multilaterales guardan silencio cómplice y miran a otro lado. Parte de la hipocresía
y la doble moral de este tipo de organismos de Derecho Internacional Público,
varias veces denunciado por el Comandante Chávez.
Indudablemente el panorama de
Chile nos duele en el alma, y a la vez nos llena de esperanza, pero como
analistas objetivos de esta realidad, también el camino que ha adoptado la
sociedad chilena no es nada fácil, y los riesgos aumentan porque el
imperialismo no escatima esfuerzos para derramar sangre y llevarse por el medio
a quien ose obstruir sus planes hegemónicos de tutelaje y dominio.
El primer elemento que tienen a
favor las fuerzas de la reacción en Chile es el carácter de cancerberos de la
burguesía y de los propios gringos por parte de los carabineros y la Fuerzas
Armadas de ese país. No es como en el caso venezolano, que la Fuerza Armada
Nacional Bolivariana (FANB) tiene un origen y un carácter eminentemente
popular. En Chile, los componentes de la fuerza pública y el componente armado
tienen un origen y una derivación eminentemente elitesca y de defensa de las
clases dominantes.
Por otra parte, está el
predominio de la Constitución y todo el entramado que construyó la dictadura de
Augusto Pinochet que tiene un carácter pétreo (como una roca muy dura, resulta
prácticamente inmodificable) y de parte de los actores políticos, sobre todo
los que hacen vida en el parlamento y en Poder Ejecutivo, hay poca voluntad
política de realizar las reformas que Chile demanda en estos nuevos tiempos.
Pero hay algo peor, y esto sí es preocupante,
y es lo afirmado por el profesor y camarada José Sant Roz, quien al igual que
Diosdado Cabello (Primer Vicepresidente del Partido Socialista Unido de
Venezuela y Presidente de la Asamblea Nacional Constituyente) quienes al observar
la espontaneidad de las manifestaciones en Chile, pero que le falta
evidentemente una clara conducción política, el riesgo de que el resurgimiento
del fascismo aplique de que el remedio sea peor que la enfermedad.
Me explico. El profesor Sant Roz
denunció en reciente artículo titulado: “Pompeo monitorea Chile: “Si es
necesario un Pinochet, PUES, no vacilaremos”. En el referido artículo, Sant Roz
revela que Pompeo, en una reunión ante una Comisión de Urgencia de la Cámara de
Representantes, manifestó la preocupante situación de Chile: “América del Sur
se nos puede embrollar de modo incontrolable si no tenemos siempre a la mano un
líder militar, y en el caso de Chile, esto reclama un jefe de la “CALIDAD
SOLIDARIA” del general Augusto Pinochet. Esa es la cuestión de esta hora, la
que estamos enfrentando en este momento, y que la estamos enfocando con sumo
cuidado. Queremos que las cosas en Sudamérica en general, nunca vayan bien a lo
interno de cada país en estos permanentes polvorines, aunque eso forme parte de
nuestra línea estratégica fundamental, pero… siempre y cuando los eventos
desestabilizadores puedan ser dirigidos por nosotros…”.
Otra de las revelaciones del
profesor Sant Roz de su nota, la cual recomiendo leer, revela que el pasado 23
de octubre hubo movimientos inesperados: viajaron a Santiago de Chile un grupo
de asesores norteamericanos para tratar directamente la grave situación interna
del país, la que estaba enfrentando el presidente Sebastián Piñera, algo
realmente insólito. El país estaba sublevado, desafiando a los carabineros, una
fuerza especial de ocupación, cuyos altos jefes casi siempre han sido
entrenados en Estados Unidos, para cuestiones de alta seguridad de Estado.
Ojo con esto, porque el optimismo
y la esperanza de la correlación de fuerzas en el continente no deben hacer que
perdamos las perspectivas ni entremos en excesos de confianza, porque el
enemigo también juega y despliega sus tácticas. Y cuando por momentos logra
neutralizarnos por revelar nuestras cartas, entonces entramos en decepción.
Sebastián Piñera como buen
fascista e hijo de Pinochet, no va a renunciar a la Presidencia de Chile. Y las
Fuerzas Armadas chilenas y carabineros, como buenos gendarmes del statu quo, no
se les aguará el ojo para reprimir, pero sobre todo PARA MATAR a cuantos osen
insubordinarse al orden establecido. Las únicas maneras en las que pudiera
salir Piñera del poder es a través de elecciones presidenciales (las cuales
serán en Chile en el 2022), o a través de un Golpe Militar (el cual, mientras
este se va a su exilio dorado en EEUU, lo amnistía de todos los crímenes que
cometerá, con tantos asesinatos que harían ruborizar hasta al propio Hitler).
Y este riesgo de que una bota
militar se apodere de Chile no sería exclusivo de ese país. La Argentina con
Alberto y Cristina Elizabeth Fernández también corre ese riesgo, al igual que
el Estado Plurinacional de Bolivia de Evo Morales y Álvaro García Linera ante
la reactivación de la “media luna” de hace 12 años en ese país, a propósito del
desconocimiento de la oposición de los resultados de las elecciones generales
celebradas en esa nación hace un par de semanas, y que a la cabeza de ese plan
desestabilizador está el ex candidato y ex presidente de ese país, Carlos Mesa.
Es ahí, cuando pasamos como lo
hemos señalado en el título de este artículo, a formular algunas
consideraciones sobre el frente interno en Venezuela. Los recientes resultados
electorales en Bolivia y Argentina, más el resto de las situaciones en el resto
de Suramérica, el Caribe (Con Haití, Honduras y ahora se suma Panamá a
protestas de calle) y hasta en Europa (con la retoma de las protestas en
Cataluña por su independencia del reino de España) hace que dentro de las filas
de la oposición haya una desazón y una cierta desesperanza.
Sostenemos estas aseveraciones,
puesto que hace un par de días escuchábamos un análisis del abogado
constitucionalista José Vicente Haro muy desesperanzador para la oposición en
Venezuela. Esto porque el presidente electo de Argentina, Alberto Fernández
habría manifestado su disposición de abandonar el denominado “Grupo de Lima”,
siendo el segundo país que lo hace por el cambio de signo de su gobierno que
será a partir del próximo 10 de diciembre, al igual que lo hizo el gobierno de
Andrés Manuel López Obrador en los Estados Unidos Mexicanos desde el 1 de
diciembre de 2018.
Pero, a pesar de que este
escenario en lo internacional puede presentarse favorable a Venezuela (también
hay que tener claro que la llegada de esta nueva oleada de gobiernos
progresistas y revolucionarios no será la misma de cuando Chávez y Kirchner, y
esto lo explicaremos con mayor detalle en próximos artículos), esto hace que
las fuerzas de la oposición venezolana, y en especial del fascismo entren en
desespero, y que puedan tornarse peligrosos.
Y el peligro representa, porque
el mismo Haro expresó en sus apreciaciones que debían “volver al punto inicial”,
es decir, a la “presión interna”. ¿Será que el colega Haro estará pidiendo la
reactivación de los actos terroristas (guarimbas) del año 2013,2014 y 2017 que
enluto a varios hogares en Venezuela?
Al respecto, volvemos nuevamente
a citar al compañero Diosdado Cabello, quien en su programa “Con El Mazo Dando”
transmitido en la noche del día de ayer 30 de octubre de 2019, formuló la
siguiente advertencia, la cuál nos permitiremos reproducir íntegramente:
La Patriota Fisgón
informa:
En el año 2017, antes del inicio de las protestas violentas planificadas
por la oposición venezolana, fueron muchos los casos en los que se descubrieron
en los puertos y aeropuertos del país cargamentos donde se hallaron máscaras
antigases, resorteras, guantes, pasamontañas que pretendían fuera usadas
en las violentas acciones de calle propiciadas por la oligarquía venezolana y
algunos dirigentes con el fin de derrocar al gobierno bolivariano.
Recientemente
fueron descubiertos por autoridades venezolanas 1 mil mascaras antigás
procedentes de la ciudad de Miami. ¿Será causalidad o tiene que ver con
el plan de Juanito Alimaña para
el 16 de noviembre?
¡Sigue inventando
campeón de la derrota, no volverán!”
Como se diría en el argot de los bajos fondos: “Ya el plomo está cantado”.
Ahí se las dejo.
¡Leales Siempre! ¡Traidores Nunca!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
* Abogado, Defensor de Derechos Humanos, Militante
Revolucionario y de la Red Nacional de Tuiteros y Tutiteras Socialistas. Www.juanmartorano.blogspot.com , www.juanmartorano.wordpress.com , jmartoranoster@gmail.com, j_martorano@hotmail.com , juan_martoranocastillo@yahoo.com.ar , cuenta tuiter e instagram: @juanmartorano, cuenta
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