Laila Tajeldine.
Antes de la Revolución pensar ya era un peligro para nuestra juventud venezolana, ya que ello necesariamente los llevaba a reclamar por las injusticias, la explotación y la violación de los derechos elementales del pueblo; ello era la razón para la represión, la tortura y la desaparición por parte de los distintos gobiernos de derecha que compusieron la IV República. Lo que caracterizaba a esos gobiernos era la visión política de defensa de los intereses del capital, de la economía de mercado, para lo cual necesariamente incluía la toma de medidas gubernamentales que afectaban los intereses del pueblo en salud, educación, trabajo, etc. El caso de Noel Rodríguez, estudiante de Economía de la UCV, es uno de los tantos casos de desapariciones vividos en Venezuela. Noel fue detenido en 1973 durante el Gobierno de Caldera, fue salvajemente torturado, asesinado y desaparecido, sin embargo sus familiares no obtuvieron información de él. Igual ocurrió con José Luis Otamendi, Leonel Gómez, Héctor Rodríguez, Delfín de Jesús, Ramón Pasquier, Luis Hernández, Mervin Marín, entre otros.
Lo que vive hoy el pueblo mexicano nos traslada a aquellos momentos en Venezuela de tantas tristezas e injusticias, de tanto silencio internacional. Hoy nuestros hermanos mexicanos son víctimas de la cobardía del capitalismo salvaje, ya que los persigue, tortura y asesina por miedo a sus pensamientos. La desaparición de 43 estudiantes de izquierda en el estado de Guerrero destapó una caja de pandora, ya que se demostró la política de Estado represiva y violatoria de los derechos humanos que se extiende en todo el país y superan los 21mil desaparecidos. Además, evidenció el vínculo existente entre el gobierno y los carteles del narcotráfico para la neutralización de las voces mexicanas disidentes del sistema económico que impera en ese país.
Ojalá más pronto que tarde se dé la transformación política necesaria para nuestros hermanos mexicanos, a quienes les deseamos una pronta Revolución para la vida y el desarrollo de ese pueblo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario