Carmen Hernández
Los últimos planteamientos de Chávez respecto a la FARC- EP y el estímulo al sector privado han puesto en el tapete el tema del respeto y la coherencia ideológica que se merecen todos los revolucionarios.Es emocionante ver como hemos reaccionado todos los que militamos en este proceso revolucionario Venezolano. La indignación, el rechazo, la justificación, el despecho; en fin todo pone al descubierto que existe gente pensante en este proceso. Tanto en Venezuela como en el exterior. Y eso merece un fuerte aplauso. Definitivamente el socialismo no ha muerto.Inclusive estás emociones encontradas están demostrando el necesario respeto político- ideológico que estamos obligados a tenernos los propios revolucionarios.No es una individualidad la que nos tiene que reconocer como revolucionarios somos nosotros mismos los que estamos obligados a cuidar nuestro espacio: a expandirlo.Bienvenida esta lucha ideológica. Ella nos permite romper con las falsas lealtades y establecer con pensamientos propios cuál ha de ser la dirección correcta para encausar la organización de las masas en este proceso revolucionario. Defendamos nuestra línea ideológica: el socialismo.Propongamos nuestra estrategia y nuestros objetivos revolucionarios y luchemos hasta la muerte por ellos. Levantémonos pues, todos los que creemos en la revolución socialista y bolivariana sobre nuestros dos pies. Dejemos la modorra y el falso compromiso; bajémonos de las espaldas de otros camaradas y marquemos nuestro propio destino sin complejos ni culpabilidades.En la revolución todos tenemos mucho que dar y en ella siempre nos encontramos en la misma acera. Por ello, hoy, mañana y siempre el destino de la revolución está en nuestras manos.!
chernan2007@hotmail.com
jueves, 17 de julio de 2008
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