*JUAN
MARTORANO.
En las líneas que siguen, y como hombre guayanés que me considero,
aún cuando no nací en esa tierra bendecida por la mano de Dios,
trataré de hacer algunas apreciaciones de carácter estratégico,
sobre el tema del Arco Minero del Orinoco, con el fin de contribuir a
este debate bastante álgido, pero no por ello menos interesante.
De hecho, esto hay que verlo dentro de un punto de vista estratégico,
no solo desde el punto de vista ambiental, el cual es un elemento
importante, que lo respaldamos, aunque no es el único que hay que
considerar a la hora de estos análisis.
Y señalo esto, porque como persona criada desde hace muchos años en
la región Guayana, y que conozco muy bien las tierras del sur del
Orinoco, debo señalar que los pasivos ambientales producto de la
minería, que en este caso se explota de manera ilegal, no son
elementos nada nuevos en esas tierras. Así que oponerse a ultranza a
la explotación de dicha zona sólo por el tema ambiental, obviando
el ejercicio de la soberanía y la seguridad de Estado, carece de
toda racionalidad y de toda pertinencia.
Además de ello, esto también podría contribuir de manera
importante, a la ocupación por parte del Estado y al ejercicio de
soberanía en zonas fronterizas, y en una zona tan estratégica y
vital como el estado Bolívar y los otros seis estados (Apure,
Guárico, Amazonas, Delta Amacuro, sur de Anzoátegui y sur del
estado Monagas), además de ser una zona colindante con la Faja
Petrolífera del Orinoco “Hugo Chávez”, no olvidemos esto.
Y esto lo señalo, no porque no deba haber una política ambiental y
de preservación de los ecosistemas que allí existen, y en lo cual
estamos totalmente de acuerdo, además del respeto a las comunidades
indígenas que hacen vida en esa zona. Pero así como es tan negativo
la implementación de un modelo extractivista que no respete al
ambiente, el cual combatimos, es también muy pernicioso que bajo un
discurso “ambientalista” y de “economía verde”. se rechace
que el Estado ejerza soberanía en esa zona, y que no se combata con
la misma energía a las transnacionales ubicadas en esa zona, y que
explotan de manera ilegal las riquezas que yacen en ese sagrado
territorio.
Si debo señalar que, siguiendo la línea de mis últimos escritos,
donde destaco las decisiones políticas de alto riesgo y de un
importante impacto político, la del Arco Minero del Orinoco es una
de ellas, y que a nadie le quepa la menor duda de ello.
Pero, también es importante señalar, y esto por una información
observada nada más y nada menos que en el diario El Universal de la
República Bolivariana de Venezuela, en fecha 20 de agosto de 2016, y
en trabajo periodístico firmado por Alberto Rapano, fue tasado en 2
trillones de dólares el potencial del Arco Minero del Orinoco.
Esto lo toma Rapano, de acuerdo a declaraciones que tomó del
Ministro del Poder Popular de Desarrollo Minero y Ecológico, Roberto
Mirabal.
El titular de dicha cartera, de acuerdo a este trabajo periodístico,
recordó que los yacimientos de minerales de alto valor industrial
desplegados a lo largo de esta franja, la cual se extiende a 11.800
kilómetros cuadrados, contiene materiales estratégicos como el oro,
bauxita, hierro, diamante, titanio, cobre, estaño, cuarzo, coltán,
níquel y uranio, además de varios elementos inorgánicos.
En ese escenario, aseguró que el oro reviste un “valor comercial”
en el mundo de $200.000 millones, $180.000 millones el hierro, y
9.000 millones de dólares la bauxita.
De acuerdo con las proyecciones que se manejan en el marco del Motor
Minero, el AMO posee alrededor de 200 millones de toneladas de
bauxita y unas 44 mil toneladas entre oro y diamantes.
También es importante que recuerde en estas líneas, sobre todo a
los opositores a ultranza de este proyecto, que de hecho es
reconocido por el Comandante Chávez en el Plan de la Patria
2013-2019, lo que el analista Fernando Travieso señaló en el
programa “Leyes del Pueblo”, conducido por la abogada y
comunicadora, María Alejandra Díaz, quien señaló que Saddam
Hussein nacionalizó todo el sector petrolero en Irak, y esto sin
duda creó todo un conflicto de intereses con los países que
posteriormente procedieron a apoyar la invasión de ese país.
Se ha tratado de centrar este debate sobre el AMO en base a que
algunas concesiones de la explotación del oro se le concedió a la
empresa canadiense Gold Reserve, elemento que me parece pudiera ser
objeto de revisión, puesto que esta empresa ocasionó importantes
daños en el yacimiento “Las Cristinas”, ubicado a 15 kilómetros
del Esequibo y a 88 de las colonias móviles de El Dorado, y que es
el segundo yacimiento de oro más grande del mundo que hay en este
planeta, junto a Cristallex, pero creo que hay elementos que estos
opositores no están tomando en cuenta.
Nuevamente recurro a Travieso, y hay que destacar que el Estado
Venezolano en el caso del Arco Minero no ha otorgado concesiones
privilegiadas a ningún grupo en particular. Lo que ha hecho el
Presidente Nicolás Maduro para evitar el conflicto de intereses como
el caso iraquí antes mencionado, fue que el Estado venezolano
diversificó estratégicamente esas concesiones. Además, habrá una
vigilancia férrea por parte del Estado.
Pero además de ello, sabían los lectores y lectoras que
representantes del Estado Venezolano suscribieron contratos por el
orden de los 4.500 millones de dólares con empresas de China, Rusia,
El Congo, Arabia Saudita, Sudáfrica, Canadá, Estados Unidos,
Ingalterra, Alemania, Suiza y Francia.
Si observamos detenidamente, empresas de los cinco (5) países
miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la Organización de
las Naciones Unidas (ONU), harán vida en el AMO, por lo que los
Estados Unidos no podrá saquear “a placer” las riquezas que
yacen en Guayana, sin entrar en conflicto con otras potencias
mundiales. Es decir, Maduro nuevamente aplicó las enseñanzas de la
compleja geopolítica internacional que aprendió como canciller de
nada más y nada menos que del Gigante Hugo Rafael Chávez Frías.
Es decir, y esto obliga a redefinir los marcos de los análisis que
se están haciendo en estos momentos, Maduro con las últimas
decisiones que ha estado adoptando, esta desarrollando toda una
estrategia política de alto impacto, que algunos a simple vista, no
se están dando cuenta.
Ahora sí, y para ir culminando, me parece que si debe haber una
mayor información acerca de los proyectos que se desean impulsar en
el AMO, de abrir este debate, escuchando todas las posiciones, tal y
como se hizo en la campaña para el aumento de los precios de la
gasolina. Y además de ello, y si el tiempo histórico y político
fuese pertinente, que este tema pudiese ser sometido a consulta
popular a través de un referendo consultivo, luego de este debate
intenso y ampliamente difundido de cara al país que estoy
proponiendo.
Por ahora lo dejaremos hasta aquí, pero estén pendientes de los
próximos escritos, porque seguiremos explicando un poco acerca de
esta estrategia política de alto impacto, no solo para decir que es
lo que pasa, cosa que hacen ya muchos analistas, lo cual es bueno,
más no suficiente, porque además del diagnóstico que hay que
realizar, en estos momentos se requieren recomendaciones, propuestas,
los decisores de este país requieren de nosotros los analistas que
podamos responder la pregunta ¿Como resolvemos los problemas que hoy
vivimos? O en su defecto, decirles lo que ellos deben precisar y
saber para consultar otras fuentes, otros actores, otros análisis
que les permita realizar una síntesis que les permitan determinar
las soluciones o los planes de acciones y estrategias a seguir.
¡Bolívar y Chávez
viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria
Siempre!
¡Independencia y
Patria Socialista!
¡Viviremos y
Venceremos!
*Abogado,Activista por los
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