Toby Valderrama y Antonio Aponte.
Una noticia nos sorprende contradictoriamente, la aplaudimos y alertamos, veamos la información:
Los militares, que estudian estrategia y táctica, saben del papel del engaño en la guerra, un clásico dijo que “la guerra es el arte del ardid”. Y en esta guerra del Socialismo contra el capitalismo se cumple plenamente la máxima. Es necesario estudiar el teatro de la guerra para poder detectar los engaños, sólo así se podrá tener éxito en la campaña.
El Comandante Chávez develó la esencia de la confrontación de hoy: es el choque milenario ya de los humildes, los desposeídos, contra los despojadores de la riqueza social. El habló de la lucha del Socialismo contra el capitalismo que es continuación de la batalla permanente de Cristo, de Bolívar, esa es la verdadera guerra, no hay otra. Chávez dejó asentado de su puño y letra en el Plan de la Patria los objetivos históricos de la lucha por la redención de los humildes. Nos habló de la soberanía como esencial punto de partida y el Socialismo como instrumento para alcanzarla. Su discurso de presentación del Plan de la Patria en el CNE debe ser de obligatorio estudio en esta nueva fase de la FANB. Estudiando el Plan de la Patria tendremos un azimut nítido para movernos en el mar engañoso que nos proponen los antichavistas, y evitaremos perdernos en los engaños que minan el camino.
Discutir la ley de amnistía es un engaño burdo, es perderse en una escaramuza de segundo orden, distraerse. El centro de la política hoy, lo que deben discutir los militares es, primero, el Plan de la Patria, allí se encontrarán con la falsificación; ya el rescate del original es una victoria chavista. Después, a la luz de ese Plan, el original, (más información en el libro “El Chavismo según Chávez” que se encuentra en el aradoyelmar.blogspot.com) se debe analizar lo que se está haciendo con los recursos de la Patria, con su soberanía, se debe evaluar la presencia de antisocialistas, de empresarios capitalistas asumidos en la dirección de la economía; los pasos en la minería, en PDVSA, las asociaciones con empresas extranjeras, con contratos clandestinos, participaciones ocultas y litigios a dirimir en tribunales gringos. De esta manera, la FANB estará en condiciones de tomar posiciones en la confrontación entre capitalistas y socialistas, guerra donde ya perdimos al Comandante Chávez y se juega la suerte de la Patria y de la Humanidad.
Ojalá los militares discutan lo que hay que discutir, aporten sus ideas, sus pensamientos en esta guerra por otros medios que es la política y sepan sortear los engaños.
El ministro para la Defensa, Vladimir Padrino López, indicó
que este martes las Fuerzas Armadas iniciaron una jornada para evaluar
el impacto del Proyecto de Ley de Amnistía aprobado por la Asamblea
Nacional.
“Hoy se inicia en la FANB jornada para evaluar Ley de
Amnistía y su impacto en estado de derecho, impunidad y DDHH”, escribió
Padrino López en su cuenta de Twitter.
Seguidamente, indicó que “la FANB reitera su compromiso con
la institucionalidad democrática, es amante de la paz y respetuosa de
los DDHH, siempre dentro de la Constitución de la República Bolivariana
de Venezuela”
Nos contenta que la FANB discuta la política y abandone la hipocresía de
que los militares son apolíticos, recordemos que la guerra y la
política sólo se diferencias en los medios, porque los objetivos y metas
son los mismos. Pero también nos preocupa que esta participación de los
militares de manera abierta en política sea tan absurda. Veamos.Los militares, que estudian estrategia y táctica, saben del papel del engaño en la guerra, un clásico dijo que “la guerra es el arte del ardid”. Y en esta guerra del Socialismo contra el capitalismo se cumple plenamente la máxima. Es necesario estudiar el teatro de la guerra para poder detectar los engaños, sólo así se podrá tener éxito en la campaña.
El Comandante Chávez develó la esencia de la confrontación de hoy: es el choque milenario ya de los humildes, los desposeídos, contra los despojadores de la riqueza social. El habló de la lucha del Socialismo contra el capitalismo que es continuación de la batalla permanente de Cristo, de Bolívar, esa es la verdadera guerra, no hay otra. Chávez dejó asentado de su puño y letra en el Plan de la Patria los objetivos históricos de la lucha por la redención de los humildes. Nos habló de la soberanía como esencial punto de partida y el Socialismo como instrumento para alcanzarla. Su discurso de presentación del Plan de la Patria en el CNE debe ser de obligatorio estudio en esta nueva fase de la FANB. Estudiando el Plan de la Patria tendremos un azimut nítido para movernos en el mar engañoso que nos proponen los antichavistas, y evitaremos perdernos en los engaños que minan el camino.
Discutir la ley de amnistía es un engaño burdo, es perderse en una escaramuza de segundo orden, distraerse. El centro de la política hoy, lo que deben discutir los militares es, primero, el Plan de la Patria, allí se encontrarán con la falsificación; ya el rescate del original es una victoria chavista. Después, a la luz de ese Plan, el original, (más información en el libro “El Chavismo según Chávez” que se encuentra en el aradoyelmar.blogspot.com) se debe analizar lo que se está haciendo con los recursos de la Patria, con su soberanía, se debe evaluar la presencia de antisocialistas, de empresarios capitalistas asumidos en la dirección de la economía; los pasos en la minería, en PDVSA, las asociaciones con empresas extranjeras, con contratos clandestinos, participaciones ocultas y litigios a dirimir en tribunales gringos. De esta manera, la FANB estará en condiciones de tomar posiciones en la confrontación entre capitalistas y socialistas, guerra donde ya perdimos al Comandante Chávez y se juega la suerte de la Patria y de la Humanidad.
Ojalá los militares discutan lo que hay que discutir, aporten sus ideas, sus pensamientos en esta guerra por otros medios que es la política y sepan sortear los engaños.
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