jueves, 27 de marzo de 2025

El capitalismo salvaje de Estados Unidos

 ALEXANDRA MULINO

Antecedentes. A partir de las décadas de 1970 y 1980 el nuevo “rostro” de la geopolítica mundial se asomaba sin timidez: el mundo unipolar promovido por los Estados Unidos consolidaba nuevas racionalidades científico-técnicas en todas las ramas de la producción, lo que obligó a los Estados capitalistas a desregular sus normativas con el propósito último de garantizar la reconversión industrial, la deslocalización de capitales y la normalización de las inversiones especulativas.

La Cuarta República. Ante este escenario geoeconómico, el proceso de privatización en Venezuela arrancó bajo el gobierno socialcristiano de Luis Herrera (el Viernes Negro, 1983), seguido por el segundo mandato del socialdemócrata Carlos Andrés Pérez (el Caracazo, 1989) y el del copeyano Rafael Caldera (1994-99), quienes aspiraron la venta de Pdvsa y las industrias básicas.

La Quinta República. La rebelión del 4 de febrero de 1992 propinó un golpe de timón a las inevitables políticas impuestas por el Consenso de Washington y sus distintas reediciones. Hugo Chávez apostó por la consolidación de la soberanía y el Estado interventor a contrapelo de la contabilidad hemisférica. Nicolás Maduro prosigue la aspiración genuina del proceso bolivariano, asunto que recrudeció la política hemisférica del “Gran Garrote”.
La ultraderecha criolla. María Corina Machado (y su grupo) representa los intereses más oscuros de la geopolítica dominada por los gringos. Destrozar el Estado nacional es su objetivo político. Por ende, los valores que estructuran su accionar son apátridas, delincuenciales y entreguistas.

La Ley de Enemigos Extranjeros. El ultranacionalismo de Trump ansía convertir a su área de influencia en un “patio trasero” de orden económico y militar. Así, los discursos racistas y anticomunistas retornan a la palestra con fuerza inusitada. Esta ley del año 1798 convierte en terrorista a todo aquel ciudadano que provenga de naciones cuyos gobiernos sean antimperialistas y soberanos. Es decir, sancionan para quebrar gobiernos y luego tachan de bandidos a los migrantes pobres.

Definitivamente, es importante reorganizar a los cuadros obreros y trabajadores en general en la concepción de las tres raíces y la teoría marxista nuestroamericana a fin de embestir esas causas contrarrestantes que elabora la actual burguesía internacional con Elon Musk a la cabeza.



No hay comentarios: