Elizabeth Valdiviezo
El escenario electoral para escoger los próximos diputados a la Asamblea
Nacional, no está nada claro, el termómetro en la calle en los actuales
momentos no arroja resultados que apunten a definir lo que pudiera
resultar en esa contienda electoral.
Es evidente que hay muchos factores que pudieran estar afectando los
resultados de la elección parlamentaria, los cuales no son necesarios
mencionarlos en estas líneas, pues muchos coincidimos que afectaran los
resultados, pero muy a pesar de esto, hay uno de esos factores que es de
suma importancia y que es necesario analizar, ya que afecta tanto a la
oposición como al chavismo.
Ambas partes están marcadas por el cogollismo, vicio cuatro republicano
que ha sido difícil de erradicar, extinguir, execrar sobre todo de las
filas de la Revolución. Muy a pesar de la inclusión y participación de
la militancia Chavista, de los discursos, de reorganización y creación
de movimientos para mantener a la militancia activa, las cúpulas
existentes dentro del Partido PSUV, siguen creando decepción dentro de
una militancia que le ha sido fiel a Chávez y que se ha desgastado con
el tiempo.
En el caso de la oposición el descontento que existe en sus seguidores,
es gracias a que se han dado cuenta que las cúpulas de poder, no le
permiten la participación a los pendejos. Para ser candidato tienes que
pagar y no conforme con eso, las primarias no son a nivel nacional, sino
en algunos municipios.
A ese Cogollo que existe en la oposición, solo les interesa llegar
obtener la mayoría parlamentaria, con el firme propósito de sacar a
Nicolás Maduro del Poder, no les importa el País, no les interesa la
economía, ni la seguridad de sus ciudadanos. Buscan desestabilizar al
gobierno, por cualquier medio, la muerte juega un principal papel
dentro de sus planes, sus víctimas de ser necesario serán sus mismos
seguidores. El fin justificara a los medios y su gente ya ha logrado
conciencia de esto.
En el Chavismo, el Cogollismo se quedó enquistado muy a pesar de que
Chávez trato con sus orientaciones de desarticular a los grupos de poder
que se fueron formando, no pudo lograrlo, más bien, fueron creciendo.
El sectarismo ha sido un factor determinante de la baja en la
revolución. Esto trajo como consecuencia nuevas tendencias dentro del
proceso revolucionario. Chávez en su afán de mantener a la militancia
contenta, busca una nueva estrategia y llama a conformar a la militancia
en movimientos sociales y la creación del Gran Polo Patriótico, todo lo
deja plasmado en las 5 líneas de acción política. Esta tarea nunca se
cumplió, pues las cúpulas de poder no les convenían poner en prácticas
estas 5 líneas estratégicas. El GPP queda solo como figura de
organización de los partidos aliados a la revolución y los movimientos
sociales.
En este nuevo periodo de la revolución, con tantos factores en contra,
es necesario unificar las fuerzas que conforman a la revolución. El Gran
Polo Patriótico, es clave determinante, así como otras tendencias que
vienen surgiendo identificadas con la revolución como opciones de
triunfo.
Mi preocupación como militante revolucionaria es que no aprovechemos las
oportunidades de victoria porque se imponen las cúpulas de poder del
PSUV. Deben entender los líderes que ya esos discursos no convencen,
pues ese mismo discurso ha sido utilizado en oportunidades pasadas y
hasta ahora no habido cambio alguno. Seguimos viendo las mismas caras
que durante estos años de revolución se han mantenido rotando, ocupando
varios cargos de importancia y eso es cogollismo.
El PSUV no garantiza la victoria, el 28 de junio se escogerán los
candidatos que se medirán en las parlamentarias ante la oposición. ¿Y
dónde participa el GPP? ¿Los partidos aliados no tendrán participación? O
¿Los candidatos por listas serán escogidos por los diferentes partidos
que conforman el GPP?
No la tenemos fácil, y la solución no es hacerle un llamado a la
oposición decepcionada que se venga al chavismo, la solución está en
hacerle el llamado a las diferentes tendencias revolucionarias a
participar con sus candidatos, para lograr una victoria contundente.
Irreverentes en la discusión, leales en la acción. La disciplina no debe
utilizar para convalidar acciones contrarias a los ideales de la
revolución. Los principios deben prevalecer ante los intereses grupales y
la única manera de lograr la Victoria Contundente, es unificando las
fuerzas de la revolución, reconociendo y respetando los partidos
aliados, los movimientos sociales y otras tendencias con la
participación.
Unidad, Lucha, Batalla y Victoria
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