Esto es un principio, es lo que diferencia a la democracia de la anarquía o la tiranía.(1)
Kamala Harris
Democracia de élites
El vetusto sistema electoral de Estados Unidos permanece intacto desde finales del siglo XVIII, es complejo y profundamente heterogéneo, presenta costos elevados y debilidades estructurales que facilitan el control por parte de los grupos económicos de los colegios electorales, debido a las aportaciones privadas a las campañas, imponiéndose sobre la voluntad del electorado.
El Centro Carter debería avocarse a la reforma del sistema electoral estadounidense, promoviendo su automatización con miras a crear un sistema transparente sencillo y que permita la simultaneidad del voto, garantizando, además, la máxima de un elector o electora, un voto, para lo cual podría inspirarse en el moderno sistema electoral venezolano.
Situación interna
Después de una campaña electoral marcada por la polarización e incertidumbre, ante las constantes amenazas al orden público, Donald Trump ha sido declarado oficialmente como el cuadragésimo séptimo presidente electo de Estados Unidos.
Sus principales promesas electorales constituyen una clara provocación a sectores sociales con alta capacidad de movilización, lo que nos hace prever un período convulso. La deportación masiva de inmigrantes llegados después de 2020, medida que estaría dirigida a bajar la tasa de desempleo, no obstante, enciende las alarmas a empresas de los sectores de la construcción, hotelería y el entretenimiento, las cuales dependen de esta mano de obra en estados como Texas, Florida y California.
La guerra comercial contra China y el aumento de aranceles a los productos importados, pareciera una promesa que reactivaría a la industria nacional; sin embargo, debido a la globalización de la economía, prácticamente toda la industria depende de insumos importados, fundamentalmente del gigante asiático, por lo que esta medida elevaría los costos de sus cadenas productivas y, por ende, originaría una mayor alza inflacionaria.
La retórica trumpista, caracterizada por ser supremacista, racista, homofóbica y misógina, tiende a polarizar aún más a la sociedad estadounidense, unificando a amplios sectores opositores a sus políticas que vulneran derechos sociales conquistados.
La guerra de la OTAN contra Rusia
En medio de una feroz campaña por mantener su hegemonía, el Coloso del Norte mantiene activos varios frentes de lucha, la guerra de la OTAN contra Rusia por controlar el mercado europeo del gas, le está ocasionando fuertes daños a su economía y hundiendo a Europa en la recesión, mientras las élites armamentistas y las corporaciones energéticas obtienen ingentes ganancias.
Trump ha prometido alcanzar un acuerdo de paz con Rusia en Ucrania. El Kremlin, por su parte, advierte que las relaciones ruso-estadounidenses se encuentran en el nivel más bajo de su historia, donde Estados Unidos es considerados un país hostil. A pesar de esta situación, Moscú se mantiene abierto al diálogo.
Latinoamérica, Venezuela y Palestina
La política agresiva del trumpismo contra el progresismo y las izquierdas latinoamericanas consolidan discursos y acciones que tienden a resistir y oponerse a sus directrices. A la vez que agrupa a las corrientes ultraderechistas y a sus dirigentes como María Corina Machado, Jair Bolsonaro, Javier Milei, Bukele, Noboa, entre otros, que aspiran mayor apoyo a sus planes para asaltar o mantenerse en el poder.
Respecto al genocidio en Palestina y la guerra de exterminio contra los pueblos árabes y musulmanes en Medio Oriente, el trumpismo continuará apoyando al Estado nazisionista de Israel puesto que, al igual que Venezuela, forma parte de la agenda estratégica imperial y no depende de las simpatías del gobernante de turno, sino de asegurarse espacios geoestratégicos y recursos energéticos que consoliden su amenazada hegemonía unipolar.
Fuentes consultadas
(1) Discurso de Kamala Harris: "Cuando perdemos una elección, aceptamos el resultado". FRANCE 24 Español. Disponible en: https://cubaminrex.cu/sites/default/files/2024-09/InformeB2024.pdf
Anabel Díaz Aché
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