Juan Martorano.
Once días antes de la celebración de los comicios parlamentarios ya
celebrados, me llegó una información sobre los escenarios y hasta de los
posibles resultados que se darían en estos comicios. Confieso que no
daba crédito a dichas informaciones, pero que lamentablemente fueron
ciertas y tiene que ver con los resultados que ya el país todo conoce.
Por ello, a pesar del dolor que me causa la paliza que nos dieron el
pasado domingo, particularmente quien esto escribe no está sorprendido
de dichos resultados.
En este día de amor y la lealtad a Hugo Chávez, puesto que un día como hoy, pero de hace tres años, el Gigante dio su último mensaje a la Nación. Y es en este día, que antes de iniciar con las opiniones que quiero expresar en las líneas siguientes, ofrecer mis disculpas al Comandante Eterno, porque creo que pude haber dado mucho más, para que un resultado como el dado el domingo 6 de diciembre de 2015 no se hubiese dado. Asumo la cuota de responsabilidad que me toca.
Y asumiendo mi responsabilidad, y luego de opiniones y peticiones de algunos compatriotas y camaradas, es que me permito hoy escribir las siguientes líneas, expresando que lo más importante en la vida cuando uno se cae, no es quedarse en el piso, sino levantarse y seguir adelante. Y es lo que trataré de hacer en estas líneas, sin pose de sabérmelas más que los demás, sino que hagamos una construcción en colectivo.
En mi último artículo publicado en aporrea.org y otros portales titulado: "¿Qué pasará en Venezuela dentro de cuatro días? Llegó la hora de la conciencia", di algunas opiniones que pudieran condensar las causas de nuestra derrota en los pasados comicios parlamentarios. La situación real en la que nos encontramos. Por ello, y ante la pregunta de algunos de mis compatriotas que espero en la medida de lo posible tratar de responder en este artículo, trataré de plantearme los escenarios que se pudieran dar, a partir del resultado del pasado domingo.
Ya conocidos los resultados electorales, ya con datos aportados por las Juntas Regionales Electorales, se ha confirmado un escenario que para mí era uno de los más improbables y difíciles de concretar, pero que lamentablemente se concretó: La ultraderecha venezolana se alzó con los 2/3 de las curules en disputa en nuestro Parlamento, al obtener 112 diputados y diputadas.
Sin duda este es el peor de los escenarios para la Revolución Bolivariana, además de muy peligroso por lo siguiente: 1.- La derecha podrá someter a referendo los tratados, convenios o acuerdos internacionales que pudieran comprometer la soberanía nacional o transferir competencias a órganos supranacionales (léase FMI, OMC, Banco Mundial); 2.- Someter a referendo Proyectos de Ley; 3.- Designar y remover a los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, previa audiencia concedida al interesado o interesada, en caso de faltas graves calificadas por el Poder Ciudadano en los términos que la ley establezca; 4.- Nombrar o remover al Defensor o Defensora del Pueblo; 5.- Nombrar o Remover al Fiscal o a la Fiscal General de la República; 6.- Nombrar o remover al Contralor o Contralora General de la República; 7.- Nombrar o remover los rectores y rectoras del Consejo Nacional Electoral; 8.- Aprobación o derogatoria de leyes orgánicas; 9.- Aprobar proyectos de Reforma Constitucional; 10.- Dar voto de censura al Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva, Ministros o Ministras, y la aprobación de esta moción de censura implica la destitución del funcionario o funcionaria la cual es objeto de la respectiva propuesta y 11.- Aprobar la iniciativa de una Asamblea Nacional Constituyente. Eso sin contar también la no aprobación de una Ley Habilitante; de no aprobación de créditos adicionales y hasta tratar de arrinconar al Ejecutivo para la aprobación de la ley de presupuesto y endeudamiento anual.
También la derecha buscaría generar escenarios para forzar la renuncia del Presidente Nicolás Maduro de la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela; o destituirlo cambiando la correlación de fuerzas del TSJ y que éste a través de una sentencia decrete su incapacidad física o mental permanente certificada por una junta médica designada por nuestro máximo tribunal y con aprobación del Poder Legislativo o la declaratoria del abandono del cargo. Ellos tratarán de inventar cualquier excusa para derrocar a Nicolás Maduro.
Este escenario es tan complejo a lo interno de nuestra Asamblea Nacional, ya que la bancada revolucionaria estará a merced de que no se aprueben ninguna de las propuestas en beneficio de los sectores populares como por ejemplo los presupuestos para las grandes misiones sociales. Tampoco en este escenario la bancada revolucionaria podrá recurrir a la figura del "rompimiento del quórum" a través del retiro temporal o definitivo de sus diputados y diputadas del hemiciclo de sesiones del Palacio Federal Legislativo, o de otro lugar donde se éste celebrando la correspondiente sesión, para impedir la aprobación de una determinada materia que considere perjudicial para nuestro pueblo.
La derecha una de las primeras cosas que hará a partir del 5 de enero de 2016, además de la elección de la junta directiva del parlamento ( la cual estaría entre Henry Ramos Allup y Julio Borges la Presidencia) será la reforma del Reglamento Interior y de Debates de la misma. Esto, con la idea de barrer con el canal televisivo ANTV y AN Radio, echando a la calle a miles de periodistas, trabajadores y trabajadoras. Así que se avizora un gran conflicto con estos compatriotas y camaradas. Volverán las manipulaciones y distorsiones informativas de los medios privados y sus dueños, al permitírsele nuevamente a estos volver al hemiciclo de sesiones del Parlamento.
También impulsarán la promulgación para una "Ley de Amnistía" para soltar a los políticos presos Leopoldo López, Daniel Ceballos, Lorent Saleh y otros tantos delincuentes. Además de impulsar la derogatoria de la Ley Orgánica de Costos y Precios Justos y la Ley Orgánica del Trabajo de los Trabajadores y Trabajadoras. Pero, Hugo Chávez que es un vergatario aunque físicamente no nos acompaña, dejo algunos mecanismos para proteger a nuestro pueblo, y es por eso que, a pesar de estos deseos de la derecha, no podrán promulgar dichos instrumentos jurídicos, y ya les explico el por qué.
Me permito transcribir textualmente el artículo 29 de nuestro texto constitucional: "El Estado estará obligado a investigar y sancionar legalmente los delitos contra los derechos humanos cometidos por sus autoridades.
Las acciones para sancionar los delitos de lesa humanidad, violaciones graves de los derechos humanos y los crímenes de guerra son imprescriptibles. Las violaciones de derechos humanos y los delitos de lesa humanidad serán investigados y juzgados por los tribunales ordinarios. Dichos delitos quedan excluidos de los beneficios que puedan conllevar su impunidad, incluidos el indulto y la amnistía." (Subrayado del articulista).
Concatenado esto con el artículo 271 de nuestro texto constitucional: "… No prescribirán las acciones judiciales dirigidas a sancionar los delitos contra los derechos humanos, o contra el patrimonio público o el tráfico de estupefacientes…" (Subrayado del articulista).
Como diría Hernán Canorea: "Más claro, no canta un gallo". Este es un elemento que, pese al escenario adverso, favorece a la Revolución Bolivariana. Punto a favor para nosotros.
Igualmente, el "Golpe a la Paraguaya" está planteado de banda a banda, pero también la posibilidad latente y muy alta de que se solicite contra Nicolás Maduro un referendo revocatorio a partir del 19 de abril de 2016, que es la fecha cuando se cumpliría la mitad del período del actual mandatario nacional. Al recoger la oposición las firmas y activándose el referido mecanismo constitucional, dicho referendo pudiera celebrarse entre los meses de septiembre y octubre de 2016. Si Nicolás Maduro, en este cuadro de Guerra Económica (que va a continuar y arreciar, no les quepa la menor duda) de ineficiencias, ineficacias, del burocratismo, de las fallas, más la conflictividad social que se pudiera avecinar y la inestabilidad política que tratará la derecha de sumir al país desde el parlamento, no toma medidas, sería revocado, tal y como se dieron los resultados de las parlamentarias del pasado domingo. Y si esto es así, se abre el escenario de unas elecciones presidenciales anticipadas, ya que la revocatoria de mandato supone uno de los seis supuestos previstos por el artículo 233 de nuestra Constitución de falta absoluta del Presidente o Presidenta de la República Bolivariana de Venezuela, y produciéndose esta falta absoluta dentro de los primeros cuatro (4) años del período constitucional, procede a convocarse nuevas elecciones presidenciales dentro de los treinta (30) días siguientes, encargándose del Ejecutivo Nacional el Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva. En este caso, el Presidente que resulte electo, completaría el período constitucional correspondiente.
Si la falta absoluta se diera dentro de los dos (2) últimos años del período constitucional, el Vicepresidente de la República asumiría la Presidencia y completaría lo que resta del período constitucional, por eso es que la fecha del 19 de abril de 2016 es clave.
Ahora bien, en el supuesto de que Nicolás Maduro fuese revocado como Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, surgen las siguientes interrogantes: ¿Sería políticamente conveniente que se presente nuevamente como candidato presidencial del PSUV y el Gran Polo Patriótico Simón Bolívar? Y si no es él ¿Quién sería el hombre o la mujer que asumiría el testigo para preservar la Revolución Bolivariana? Dejo ahí esas interrogantes.
Ahora bien, si vamos a revocatorio y Nicolás Maduro lo gana, no ha pasado nada y completaría en principios y sin mayores sobresaltos, su sexenio presidencial.
Cuando Nicolás Maduro dio su mensaje, el cual me pareció acertado, sin embargo, me parece que le falto un poco de humildad y de reconocer errores y fallas de la gestión gubernamental. No es sólo decir que "duerme tranquilo con su conciencia pues ha hecho todo por proteger al pueblo". No señor, si bien somos objeto de una Guerra No Convencional que se manifiesta en todos los órdenes en nuestro país (en lo político, en lo económico, en lo social, etcétera) lamentablemente como Gobierno, no hemos podido contrarrestar la campaña mediática del enemigo, ni acompañar al pueblo en sus luchas, ni de minimizar los daños por esta Guerra, y eso tiene arrecho a nuestro pueblo. Y si no damos un "Golpe de Timón", perderemos totalmente la Revolución. Alerta.
Pero como se ha señalado, no se trata de hacer las críticas y observaciones con el sentido de "auto flagelarnos", sino de corregir errores para avanzar. Al igual que el año 2007, estamos a las puertas de una gran crisis e inestabilidad política, con elementos adversos y amenazas, pero también con oportunidades y elementos que nos favorecen, y procedo explicar algunos de ellos.
Obviamente, la movilización popular de las fuerzas revolucionarias será clave, y no solo en los momentos y ciclos electorales, de los cuales me referí en artículos anteriores. También las movilizaciones para defender los logros y conquistas dados por esta Revolución Bolivariana en medio de la conflictividad social que se tratará de generar.
Otro elemento es que el Presidente de la República Nicolás Maduro, tiene la atribución constitucional de vetar las leyes, y esto lo podrá hacer cuando considere que dicho instrumento jurídico sea contrario al interés social, y entablar el conflicto entre poderes que dirimiría la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. Además de que cuenta con una Ley Habilitante, la cual debería utilizar en estos días, antes de que fenezca su vigencia.
También otro elemento que debemos aprovechar es que de aquí y hasta el 4 de enero, continúa la Asamblea Nacional de mayoría "roja rojita". De acá al casi mes que resta para que la Asamblea Nacional entré en su período constitucional 2016-2021, pudieran crearse leyes o dictarse cualesquiera actos que sirvan para blindar las conquistas del pueblo. Creo que no hay tiempo que perder. Aún cuando el período ordinario de sesiones culmina el 15 de diciembre, perfectamente pudieran convocarse sesiones extraordinarias.
También la posibilidad de que el Presidente de la República pueda disolver el parlamento electo el pasado 6 de diciembre de 2015. El artículo 236 en su numeral 21 establece lo siguiente: "Son atribuciones y obligaciones del Presidente o Presidenta de la República: …21.- Disolver la Asamblea Nacional en el supuesto establecido en esta Constitución".
El supuesto que señala este numeral lo encontramos en el primer aparte del artículo 240 de nuestro texto constitucional, sin embargo que me permito transcribir textualmente y completamente el referido artículo:
"Artículo 240: La aprobación de una moción de censura al Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva, por una votación no menor de las tres quintas partes de los integrantes de la Asamblea Nacional, implica su remoción. El funcionario removido o funcionaria removida no podrá optar al cargo de Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva, o de Ministro o Ministra por el resto del período presidencial.
La remoción del Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva en tres oportunidades dentro de un mismo período constitucional, como consecuencia de la aprobación de mociones de censura, faculta al Presidente o Presidenta de la República para disolver la Asamblea Nacional. El decreto de disolución conlleva la convocatoria de elecciones para una nueva legislatura dentro de los sesenta días siguientes a su disolución.
La Asamblea Nacional no podrá ser disuelta en el último año de su período constitucional" (Subrayado del articulista).
Es decir, habrá muchos conflictos en materia constitucional que deberán ser dirimidos por la Sala Constitucional de nuestro máximo Tribunal. Así que los abogados tendremos bastante trabajo.
También el Presidente de la República y el pueblo tienen posibilidades de convocar referendos, de acuerdo a las disposiciones constitucionales.
En esta coyuntura será clave el rol que asumirá la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y de cómo esté su correlación de fuerzas a lo interno.
Así que, ante este escenario de nuevas dificultades que sin duda habrá, mi recomendación es la siguiente. Tomar estos días de diciembre para el reposo del guerrero y la guerrera: Para un repliegue que sirva para reorganizarnos, reflexionar y volver a la ofensiva. Eso es necesario en estos momentos.
Así que nada de tristeza ni desmoralización. Calcémonos las botas de campaña porque se vienen duros tiempos de combate.
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
En este día de amor y la lealtad a Hugo Chávez, puesto que un día como hoy, pero de hace tres años, el Gigante dio su último mensaje a la Nación. Y es en este día, que antes de iniciar con las opiniones que quiero expresar en las líneas siguientes, ofrecer mis disculpas al Comandante Eterno, porque creo que pude haber dado mucho más, para que un resultado como el dado el domingo 6 de diciembre de 2015 no se hubiese dado. Asumo la cuota de responsabilidad que me toca.
Y asumiendo mi responsabilidad, y luego de opiniones y peticiones de algunos compatriotas y camaradas, es que me permito hoy escribir las siguientes líneas, expresando que lo más importante en la vida cuando uno se cae, no es quedarse en el piso, sino levantarse y seguir adelante. Y es lo que trataré de hacer en estas líneas, sin pose de sabérmelas más que los demás, sino que hagamos una construcción en colectivo.
En mi último artículo publicado en aporrea.org y otros portales titulado: "¿Qué pasará en Venezuela dentro de cuatro días? Llegó la hora de la conciencia", di algunas opiniones que pudieran condensar las causas de nuestra derrota en los pasados comicios parlamentarios. La situación real en la que nos encontramos. Por ello, y ante la pregunta de algunos de mis compatriotas que espero en la medida de lo posible tratar de responder en este artículo, trataré de plantearme los escenarios que se pudieran dar, a partir del resultado del pasado domingo.
Ya conocidos los resultados electorales, ya con datos aportados por las Juntas Regionales Electorales, se ha confirmado un escenario que para mí era uno de los más improbables y difíciles de concretar, pero que lamentablemente se concretó: La ultraderecha venezolana se alzó con los 2/3 de las curules en disputa en nuestro Parlamento, al obtener 112 diputados y diputadas.
Sin duda este es el peor de los escenarios para la Revolución Bolivariana, además de muy peligroso por lo siguiente: 1.- La derecha podrá someter a referendo los tratados, convenios o acuerdos internacionales que pudieran comprometer la soberanía nacional o transferir competencias a órganos supranacionales (léase FMI, OMC, Banco Mundial); 2.- Someter a referendo Proyectos de Ley; 3.- Designar y remover a los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, previa audiencia concedida al interesado o interesada, en caso de faltas graves calificadas por el Poder Ciudadano en los términos que la ley establezca; 4.- Nombrar o remover al Defensor o Defensora del Pueblo; 5.- Nombrar o Remover al Fiscal o a la Fiscal General de la República; 6.- Nombrar o remover al Contralor o Contralora General de la República; 7.- Nombrar o remover los rectores y rectoras del Consejo Nacional Electoral; 8.- Aprobación o derogatoria de leyes orgánicas; 9.- Aprobar proyectos de Reforma Constitucional; 10.- Dar voto de censura al Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva, Ministros o Ministras, y la aprobación de esta moción de censura implica la destitución del funcionario o funcionaria la cual es objeto de la respectiva propuesta y 11.- Aprobar la iniciativa de una Asamblea Nacional Constituyente. Eso sin contar también la no aprobación de una Ley Habilitante; de no aprobación de créditos adicionales y hasta tratar de arrinconar al Ejecutivo para la aprobación de la ley de presupuesto y endeudamiento anual.
También la derecha buscaría generar escenarios para forzar la renuncia del Presidente Nicolás Maduro de la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela; o destituirlo cambiando la correlación de fuerzas del TSJ y que éste a través de una sentencia decrete su incapacidad física o mental permanente certificada por una junta médica designada por nuestro máximo tribunal y con aprobación del Poder Legislativo o la declaratoria del abandono del cargo. Ellos tratarán de inventar cualquier excusa para derrocar a Nicolás Maduro.
Este escenario es tan complejo a lo interno de nuestra Asamblea Nacional, ya que la bancada revolucionaria estará a merced de que no se aprueben ninguna de las propuestas en beneficio de los sectores populares como por ejemplo los presupuestos para las grandes misiones sociales. Tampoco en este escenario la bancada revolucionaria podrá recurrir a la figura del "rompimiento del quórum" a través del retiro temporal o definitivo de sus diputados y diputadas del hemiciclo de sesiones del Palacio Federal Legislativo, o de otro lugar donde se éste celebrando la correspondiente sesión, para impedir la aprobación de una determinada materia que considere perjudicial para nuestro pueblo.
La derecha una de las primeras cosas que hará a partir del 5 de enero de 2016, además de la elección de la junta directiva del parlamento ( la cual estaría entre Henry Ramos Allup y Julio Borges la Presidencia) será la reforma del Reglamento Interior y de Debates de la misma. Esto, con la idea de barrer con el canal televisivo ANTV y AN Radio, echando a la calle a miles de periodistas, trabajadores y trabajadoras. Así que se avizora un gran conflicto con estos compatriotas y camaradas. Volverán las manipulaciones y distorsiones informativas de los medios privados y sus dueños, al permitírsele nuevamente a estos volver al hemiciclo de sesiones del Parlamento.
También impulsarán la promulgación para una "Ley de Amnistía" para soltar a los políticos presos Leopoldo López, Daniel Ceballos, Lorent Saleh y otros tantos delincuentes. Además de impulsar la derogatoria de la Ley Orgánica de Costos y Precios Justos y la Ley Orgánica del Trabajo de los Trabajadores y Trabajadoras. Pero, Hugo Chávez que es un vergatario aunque físicamente no nos acompaña, dejo algunos mecanismos para proteger a nuestro pueblo, y es por eso que, a pesar de estos deseos de la derecha, no podrán promulgar dichos instrumentos jurídicos, y ya les explico el por qué.
Me permito transcribir textualmente el artículo 29 de nuestro texto constitucional: "El Estado estará obligado a investigar y sancionar legalmente los delitos contra los derechos humanos cometidos por sus autoridades.
Las acciones para sancionar los delitos de lesa humanidad, violaciones graves de los derechos humanos y los crímenes de guerra son imprescriptibles. Las violaciones de derechos humanos y los delitos de lesa humanidad serán investigados y juzgados por los tribunales ordinarios. Dichos delitos quedan excluidos de los beneficios que puedan conllevar su impunidad, incluidos el indulto y la amnistía." (Subrayado del articulista).
Concatenado esto con el artículo 271 de nuestro texto constitucional: "… No prescribirán las acciones judiciales dirigidas a sancionar los delitos contra los derechos humanos, o contra el patrimonio público o el tráfico de estupefacientes…" (Subrayado del articulista).
Como diría Hernán Canorea: "Más claro, no canta un gallo". Este es un elemento que, pese al escenario adverso, favorece a la Revolución Bolivariana. Punto a favor para nosotros.
Igualmente, el "Golpe a la Paraguaya" está planteado de banda a banda, pero también la posibilidad latente y muy alta de que se solicite contra Nicolás Maduro un referendo revocatorio a partir del 19 de abril de 2016, que es la fecha cuando se cumpliría la mitad del período del actual mandatario nacional. Al recoger la oposición las firmas y activándose el referido mecanismo constitucional, dicho referendo pudiera celebrarse entre los meses de septiembre y octubre de 2016. Si Nicolás Maduro, en este cuadro de Guerra Económica (que va a continuar y arreciar, no les quepa la menor duda) de ineficiencias, ineficacias, del burocratismo, de las fallas, más la conflictividad social que se pudiera avecinar y la inestabilidad política que tratará la derecha de sumir al país desde el parlamento, no toma medidas, sería revocado, tal y como se dieron los resultados de las parlamentarias del pasado domingo. Y si esto es así, se abre el escenario de unas elecciones presidenciales anticipadas, ya que la revocatoria de mandato supone uno de los seis supuestos previstos por el artículo 233 de nuestra Constitución de falta absoluta del Presidente o Presidenta de la República Bolivariana de Venezuela, y produciéndose esta falta absoluta dentro de los primeros cuatro (4) años del período constitucional, procede a convocarse nuevas elecciones presidenciales dentro de los treinta (30) días siguientes, encargándose del Ejecutivo Nacional el Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva. En este caso, el Presidente que resulte electo, completaría el período constitucional correspondiente.
Si la falta absoluta se diera dentro de los dos (2) últimos años del período constitucional, el Vicepresidente de la República asumiría la Presidencia y completaría lo que resta del período constitucional, por eso es que la fecha del 19 de abril de 2016 es clave.
Ahora bien, en el supuesto de que Nicolás Maduro fuese revocado como Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, surgen las siguientes interrogantes: ¿Sería políticamente conveniente que se presente nuevamente como candidato presidencial del PSUV y el Gran Polo Patriótico Simón Bolívar? Y si no es él ¿Quién sería el hombre o la mujer que asumiría el testigo para preservar la Revolución Bolivariana? Dejo ahí esas interrogantes.
Ahora bien, si vamos a revocatorio y Nicolás Maduro lo gana, no ha pasado nada y completaría en principios y sin mayores sobresaltos, su sexenio presidencial.
Cuando Nicolás Maduro dio su mensaje, el cual me pareció acertado, sin embargo, me parece que le falto un poco de humildad y de reconocer errores y fallas de la gestión gubernamental. No es sólo decir que "duerme tranquilo con su conciencia pues ha hecho todo por proteger al pueblo". No señor, si bien somos objeto de una Guerra No Convencional que se manifiesta en todos los órdenes en nuestro país (en lo político, en lo económico, en lo social, etcétera) lamentablemente como Gobierno, no hemos podido contrarrestar la campaña mediática del enemigo, ni acompañar al pueblo en sus luchas, ni de minimizar los daños por esta Guerra, y eso tiene arrecho a nuestro pueblo. Y si no damos un "Golpe de Timón", perderemos totalmente la Revolución. Alerta.
Pero como se ha señalado, no se trata de hacer las críticas y observaciones con el sentido de "auto flagelarnos", sino de corregir errores para avanzar. Al igual que el año 2007, estamos a las puertas de una gran crisis e inestabilidad política, con elementos adversos y amenazas, pero también con oportunidades y elementos que nos favorecen, y procedo explicar algunos de ellos.
Obviamente, la movilización popular de las fuerzas revolucionarias será clave, y no solo en los momentos y ciclos electorales, de los cuales me referí en artículos anteriores. También las movilizaciones para defender los logros y conquistas dados por esta Revolución Bolivariana en medio de la conflictividad social que se tratará de generar.
Otro elemento es que el Presidente de la República Nicolás Maduro, tiene la atribución constitucional de vetar las leyes, y esto lo podrá hacer cuando considere que dicho instrumento jurídico sea contrario al interés social, y entablar el conflicto entre poderes que dirimiría la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. Además de que cuenta con una Ley Habilitante, la cual debería utilizar en estos días, antes de que fenezca su vigencia.
También otro elemento que debemos aprovechar es que de aquí y hasta el 4 de enero, continúa la Asamblea Nacional de mayoría "roja rojita". De acá al casi mes que resta para que la Asamblea Nacional entré en su período constitucional 2016-2021, pudieran crearse leyes o dictarse cualesquiera actos que sirvan para blindar las conquistas del pueblo. Creo que no hay tiempo que perder. Aún cuando el período ordinario de sesiones culmina el 15 de diciembre, perfectamente pudieran convocarse sesiones extraordinarias.
También la posibilidad de que el Presidente de la República pueda disolver el parlamento electo el pasado 6 de diciembre de 2015. El artículo 236 en su numeral 21 establece lo siguiente: "Son atribuciones y obligaciones del Presidente o Presidenta de la República: …21.- Disolver la Asamblea Nacional en el supuesto establecido en esta Constitución".
El supuesto que señala este numeral lo encontramos en el primer aparte del artículo 240 de nuestro texto constitucional, sin embargo que me permito transcribir textualmente y completamente el referido artículo:
"Artículo 240: La aprobación de una moción de censura al Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva, por una votación no menor de las tres quintas partes de los integrantes de la Asamblea Nacional, implica su remoción. El funcionario removido o funcionaria removida no podrá optar al cargo de Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva, o de Ministro o Ministra por el resto del período presidencial.
La remoción del Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva en tres oportunidades dentro de un mismo período constitucional, como consecuencia de la aprobación de mociones de censura, faculta al Presidente o Presidenta de la República para disolver la Asamblea Nacional. El decreto de disolución conlleva la convocatoria de elecciones para una nueva legislatura dentro de los sesenta días siguientes a su disolución.
La Asamblea Nacional no podrá ser disuelta en el último año de su período constitucional" (Subrayado del articulista).
Es decir, habrá muchos conflictos en materia constitucional que deberán ser dirimidos por la Sala Constitucional de nuestro máximo Tribunal. Así que los abogados tendremos bastante trabajo.
También el Presidente de la República y el pueblo tienen posibilidades de convocar referendos, de acuerdo a las disposiciones constitucionales.
En esta coyuntura será clave el rol que asumirá la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y de cómo esté su correlación de fuerzas a lo interno.
Así que, ante este escenario de nuevas dificultades que sin duda habrá, mi recomendación es la siguiente. Tomar estos días de diciembre para el reposo del guerrero y la guerrera: Para un repliegue que sirva para reorganizarnos, reflexionar y volver a la ofensiva. Eso es necesario en estos momentos.
Así que nada de tristeza ni desmoralización. Calcémonos las botas de campaña porque se vienen duros tiempos de combate.
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
Abogado, Activista por los Derechos Humanos, Militante Revolucionario y de la Red Nacional de Tuiter@s Socialistas (RENTSOC). jmartoranoster@gmail.com @juanmartorano
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