Zonia Linares
El próximo 10 de diciembre se cumplirán 190 años de la última proclama de nuestro libertador Simón Bolívar, el cual reza lo siguiente: "Colombianos mis últimos votos son por la felicidad de la patria, si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide la unión, yo bajaré tranquilo al sepulcro". Y han pasado casi dos siglos, y Bolívar nunca ha podido descansar, porque los Santander de América Latina, jamás han cesado en su empeño de destruir sus sueños y borrar su huella.
En nuestro caso particular Venezuela, cuna y pila bautismal del Padre de la Patria, además de honrar su nombre, su lucha y gloria, en 1879 adoptamos el bolívar como nuestra moneda nacional, con los años y con los cambios de gobierno se fue devaluando, cada día fue perdiendo más estabilidad, pero luchaba por mantenerse.
Desde hace más de 20 años una amenaza se cierne sobre nuestro país, los EEUU de norteamérica, se declaró nuestro enemigo, tanto así que nos declaró una amenaza inusual para su territorio, y la palabra invasión apareció en la palestra pública y comenzamos a prepararnos para repeler los ataques que han venido desde todos los flancos, la población se ha visto vapuleada por un sinfín de bloqueos que nos ha llevado a retroceder muchos años atrás, muchas personas volvieron a la cocina de leña, nos hizo regresar al campo, (viento a favor) las bicicletas se han puesto de moda y lo más triste de todo, vidas valiosas se han perdido por falta de medicamentos, que no se han podido traer al país, por los bloqueos que ha impuesto el gobierno de EEUU contra nuestro pueblo, por el simple hecho de no arrodillarse
Donald Trump presidente de EEUU, prometió acabar con el gobierno de Nicolás Maduro, a costa de lo que sea, ¡Y vaya que lo intentó! Para ello ha tenido aliados, tanto nacionales como internacionales, pero la voluntad del pueblo ha sido más invulnerable y ha aguantado como un titán, a pesar de ser el único afectado en está guerra sin cuartel y es que con los años, hemos aprendido que la violencia, sólo trae más violencia y han sido muchos los hogares enlutados y hermanos caídos por causa de la violencia, aupada por quienes adversan al gobierno.
Así que la cordura ha prevalecido entre los venezolanos, a pesar de las provocaciones. Pero toda historia tiene una segunda parte, mientras le hacíamos frente a las embestidas brutales del gobierno norteamericano y sus aliados, un enemigo ya declarado, pero desestimado y pareciera que a propósito ignorado, entraba sigilosamente a posicionarse y apoderarse de nuestra economía, ya muy golpeada por los bloqueos, nos invadió el norte, sin armas, sin un solo disparo, pero hirió de gravedad nuestro Bolívar, hasta enterrarlo literalmente, y como en toda invasión quedan daños colaterales, pues ésta no sería la excepción, hoy nuestra moneda está casi extinta nadie da precios en bolívares, nuestra economía se cotiza en billetes de otro país y lo más triste de todo es que la población vulnerable creció desmesuradamente. No hubo necesidad de enfrentar, tanques de guerra, ni marines, nos invadieron desde adentro, hirieron de muerte nuestro Bolívar, y el Padre de la Patria se revuelca en su tumba, porque nuestra moneda sucumbió ante un enemigo que arrasa por donde pasa y todo ocurre bajo el absoluto silencio de los entes del estado venezolano, bien dijo Bolívar "Los EEUU parecen destinados por la provincia, para plagar a América de miseria, en nombre de la libertad" si robarnos nuestra moneda y empobrecer nuestro país, no es invasión, díganme cómo se llama ese crimen.
Nací con corazón revolucionario. Chavista desde 1992. Creo en Dios, mi patria sigo y seguiré los sueños de mi comandante eterno.
sonfer723@gmail.com @sonfer723
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