Juan Martorano
A 588 días de enfrentar una dura contingencia en Venezuela producto de
la pandemia global de la Covid 19, en la finalización de la semana 84 y
siendo el día domingo 24 de octubre de 2021, quiero opinar, como lo
señalé en la edición anterior de esta columna, sobre la coyuntura de
cara a los comicios regionales y municipales, conocidos como
megaelecciones, que celebraremos dentro de 27 días y un lindo amanecer,
en la República Bolivariana de Venezuela.
Indudablemente que, en otro contexto, estos comicios hubiesen tenido
otra mirada, debido a que siempre en sus resultados inciden las
particularidades regionales y locales de cada estado y de cada
municipio. Sin embargo, en el marco de la guerra no convencional, esa
sumatoria de resultados estadales y municipales tendrán un impacto en la
realidad nacional y del horizonte político durante los próximos años.
A 28 días de la realización de los comicios, en los estudios y sondeos
que he venido realizando, el chavismo, referido al PSUV y aliados del
Gran Polo Patriótico Simón Bolívar, parten como amplios favoritos para
ganar la mayoría de las gobernaciones en disputa (20 de 23) y por lo
menos 305 de las 335 alcaldías en disputa (incluyendo la del municipio
Libertador de Caracas) eso sin contar la mayoría de curules en los
parlamentos regionales y Cámaras Municipales. Esto en teoría debería
garantizarle al Presidente Maduro la gobernabilidad y la gobernanza del
país.
La oposición ve esta elección como la posibilidad de evaluar el estado
real de sus fuerzas, además de una oportunidad de ganar espacios
políticos de cara a su estrategia de doble vía para desalojar al
chavismo del poder. Bien a través de la organización de ellos de cara a
un eventual referendo revocatorio a partir del 10 de enero de 2022, como
está establecido en nuestra Carta Magna, y la otra que a través de esos
espacios que puedan ganar y lo estratégico de las mismas, contribuir en
la inestabilidad política, caos e ingobernabilidad. Esto más que
demostrado durante los cinco años en los que la derecha tuvo mayoría en
la AN, y sin contar en gobernaciones y alcaldías donde ellos han tenido
gestiones.
Sin embargo, pese a esta primera aproximación, no podemos subestimar
ciertas realidades, debido a que a mi juicio no estamos en una realidad
ordinaria, y muchas veces la incertidumbre será nuestra compañera en
nuestro diario transitar. Hay elementos en la coyuntura venezolana
actual, que pueden sorprender y arrojar en resultados sorprendentes en
algunos casos.
Importante es de destacar que, a diferencia de los comicios legislativos
del 6 de diciembre de 2020, donde el PSUV-GPPSB como expresión
mayoritaria del chavismo obtuvo las 4/5 partes del parlamento, es bueno
señalar que en estos comicios, a mi parecer estará más sometida que en
esa oportunidad, la gestión del chavismo a un exhaustivo escrutinio por
parte de la población. Si bien es cierto es que la mayoría de la
población está consciente que la mayoría de que muchos sectores de la
hoy oposición en caso de llegar a espacios de poder, harán todo lo
posible por destruir al chavismo y a la izquierda como una comunidad
política y casi que hasta espiritual, y de ahí la ventaja que tiene de
cara a los comicios, no es menos cierto que hay deudas muy grandes,
malestar y descontento por parte de la población.
Hay cuestionamientos a gestiones de ciertos actores políticos, sin
embargo, este pueblo que es fiel al amor y a los legados de Chávez, nos
volverá dar una nueva lección y escribiremos una nueva página dorada y
una nueva victoria.
Es bueno recordar a nuestro pueblo, que en el momento en que acuda a la
cita del 21 de noviembre, muchas de las caras de los responsables de
pedir bloqueos, “sanciones” para hacernos pasar penurias estarán allí.
Los que impulsaron y ejecutaron actos terroristas, enlutaron familias en
función de sus mezquinos y perversos propósitos, pero peor aún, nunca
asumieron responsabilidades y ahora pretenden pintarse como “salvadores
de la patria”, ahora te piden tu voto. Creo que no exagero al señalar
que nuevamente en esas elecciones estaremos ante la encrucijada de dos
caminos. De los que pese a los problemas y críticas que tenemos,
queremos seguir amando y defendiendo nuestra patria y los que desde
espacios de poder piden apuntalar agresiones a la patria en la que
supuestamente nacieron. Esto no podemos olvidarlo bajo ninguna
circunstancia y que tengamos conciencia que la decisión estará en
nuestras manos.
Las oposiciones, producto de sus divisiones, disputas internas, la
erosión de su base política y social de respaldo, sólo les quedará
apostar, de cara a cambiar la tendencia que se asoma para los comicios a
realizar en este país en menos de un mes, a la generación de toda una
cadena de eventos desencadenantes de alto impacto, que traten de
originar una conmoción interior y/o exterior, para tratar de cambiar una
tendencia que apunta a ser irreversible. A los que creen que esto que
señalo luce descabellado, los invito a revisar el caso del atentado a la
estación ferrocarrilera de Atocha, en Madrid, España en el año 2004, en
la que este evento desencadenante cambio una tendencia electoral que
parecía irreversible a favor de la organización de extrema derecha
Partido Popular de José María Aznar, y que este trató de manipular este
evento a su favor, pero al descubrirse el engaño que pretendió Aznar en
esa oportunidad, la tendencia cambio en menos de 24 horas a favor de los
opositores del PSOE en aquella oportunidad.
De ahí que las “bolas” y “rumores”, lo que técnicamente conocemos como
Operaciones de Guerra Psicológica (OPSIC) estarán a la orden del día.
Ayer me llegó uno de esos “rumores” que los andan viralizando por
plataformas tecnológicas y redes sociales digitales. Sin embargo,
tampoco los desdeñó de buenas a primeras porque con algunas
charlatanerías como ésas, se ejecutaron ataques a puestos policiales y
militares y la Operación Gedeón. Por ello, ante el desespero en la que
caerán algunos y algunas al darse cuenta que los números no le
favorecen, la posibilidad de que los asesinatos y ataques selectivos
estarán a la orden del día, por lo que nuestros ojos y oídos deben estar
bien atentos y prevenidos.
Sin duda que la situación económica, que evidentemente tiene su impacto
en lo social es una de las tareas pendientes de la gestión
gubernamental. Esperemos que después de los comicios y con este fin de
año los impactos que esto pudiera arrojar en el futuro del corto y
mediano plazo.
Si bien esta es una primera y aún somera aproximación de lo que podría
pasar en los comicios. En la medida de lo posible, y de acuerdo a los
elementos que nos arrojen los eventos. Espero poder contribuir con más
aportes y análisis al respecto.
También espero referirme a un tema poco tratado, pero no por ello menos
importante, que tiene que ver con la realidad de la juventud trabajadora
en el mundo, ya que el post covid que se avecina atizará las
contradicciones y la lucha de clases ya que esta pandemia ha
visibilizado aún más las desigualdades. Pero esto será objeto de otra
edición de esta columna.
Por ahora lo dejamos hasta aquí. Pero pendientes y vista.
¡Bolívar y Chávez Viven! ¡Y sus luchas y la patria que nos legaron siguen!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
Abogado, Defensor de Derechos Humanos, Militante Revolucionario y de la Red Nacional de Tuiteros y Tutiteras Socialistas. Www.juanmartorano.blogspot.com , www.juanmartorano.wordpress.com , jmartoranoster@gmail.com, j_martorano@hotmail.com , juan_martoranocastillo@yahoo.com.ar , cuenta tuiter e instagram: @juanmartorano, cuenta facebook: Juan Martorano Castillo. Canal de Telegram: El Canal de Martorano.
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