*JUAN MARTORANO
Partir y no regresar, es sin duda el recorrido de un nuevo camino para el que se va y un gran pesar para los que se quedan…
¿Adonde irá el artista cuando muere?
¿Adonde irá el que lucho como potro sin rienda por su gloria?
Adonde, Adonde…
¿Será el átomo de futuras mentes?
¿En los anales históricos será olvido?
¿Será fulgor en la vencida tarde?
Quizá orgullo de poeta sea
Darte el postrimer adiós,
En versos recordar tu nombre
Y al creador eterno ofrecer tu alma.
Así finaliza “Réquiem para un artista”, un poema homenaje escrito por Kiko Fonseca y con el que iniciamos nuestro escrito de hoy.
Sin duda, la muerte es uno de los fenómenos naturales que une a todos los seres humanos y hace que nos encontremos en nuestras diferencias, no tiene prejuicios, de modo que es capaz de arrancar la vida igual a ricos y a mendigos. Cuando se pierde a un ser querido la sensación de vacío es una de las más terribles que se pueda experimentar. Los pueblos latinos somos sentimentales y melancólicos por naturaleza, seguramente, producto de la mezcla de la furia y del sentimentalismo negro, el tradicionalismo europeo y la magia y el respeto indígena. De manera que somos pueblos muy apegados a la tierra, al pan y al amor por nuestras familias, es por esta razón que la muerte es un paso doloroso para los que se quedan añorando al que se ha ido.
No puedo escribir la presente edición de esta columna, con profundo dolor y pesar y con una lágrima en el corazón, al enterarme de la infausta noticia del fallecimiento del Dr. Julián Isaías Rodríguez Díaz. Pero para quienes lo amamos y para el Inolvidable Comandante era simplemente “Isaías”. Reserva política y moral de la Revolución Bolivariana como el Comandante William Izarra, William Lara, David Nieves, entre otros y otras.
Recuerdo cuando a finales de 2018 y comienzos de 2019, luego de haberme encontrado personalmente con el Comandante Izarra, en el marco de buscar la creación del Instituto de Investigación del Socialismo Bolivariano, uno de los presentes era el Dr. Isaías. El Comandante Izarra le dijo: “Isaías, acá te presentó a Juan Martorano”, cuál fue mi sorpresa cuando además de estrechar con la humildad que siempre le caracterizó, mi mano, con su voz suave pero a la vez firme de un hombre de profundas convicciones, me dijo: “Te leo mucho”. Vaya que inmenso honor el haberlo conocido y compartido tantas cosas con él.
Del político, del Fiscal General, del Primer Vicepresidente Ejecutivo de la Revolución Bolivariana se ha escrito, se escribe y se escribirá durante mucho tiempo. Pero acá de quien quiero escribir es del Isaías amigo, del Isaías padre, del Isaías guía, del Isaías profundamente humano y con ese don de gente que pocos hoy en día tienen.
Recuerdo el inmenso honor además de pedir e intercambiar nuestros números telefónicos y nos hablábamos y escribíamos a diario. Sus observaciones a varios de nuestros escritos.
Recuerdo cuando me invitó la primera vez a su casa, en Residencias Turagua en Chulavista, Colinas de Bello Monte, municipio Baruta del estado Miranda. Tomé el Metro hasta Chacaíto, caminé hasta Las Mercedes y me perdí como por dos horas, ya que paré en Valle Arriba, y luego cuando volví a Las Mercedes y tomar la dirección correcta, por no tener vehículo, me tocó subir todo el trayecto a pie. Él muy apenado porque no tenía como hacer que subiera, pero le dije que no se preocupara que llegaría. Fueron 20 minutos de caminata, pero llegué a su residencia. Me comuniqué con él, dio instrucciones al vigilante para que me abriera la puerta y lo esperé en el sitio donde el funcionario de seguridad me indicó que lo esperara.
Mi sorpresa fue mayúscula al ver a un hombre sencillo, en pantuflas y short quien bajó personalmente a abrirme la reja del edificio y acompañarle a subir seis pisos hasta su vivienda. El compartir 4 maravillosas horas y que el mismo compartiera un almuerzo. Tal vez algún día escriba los testimonios inéditos de la historia de ese país bajo la óptica de Isaías Rodríguez, que tuve ese inmenso privilegio de escuchar.
Pero sobre todo, el gesto de pagarme la carrera del taxi que me condujo nuevamente a mi lugar de trabajo, pero que hasta que el taxista no entró en el estacionamiento del edificio y yo lo abordará, no me abandonó y siempre estuvo ahí.
O aquél año 2022, 28 de diciembre, Día de los Inocentes, cuando acompañado de Freddy García, Marisol Olmeta y Yuraní Godoy, celebramos su cumpleaños 80. Los cuatro recordamos las palabras de su amada esposa, Norelys, cuando nos conminaba a ir más seguido a su casa porque su esposo, luego de cierto decaimiento en su ánimo, al vernos estuvo muy risueño. Quien se imaginaría que el destino le tendría reservado muy poco tiempo para que permaneciera con nosotros.
Nunca olvidaré cuando en un momento particularmente complejo que en lo personal estaba atravesando, su palabra de aliento, de amor, de moral, de ánimo. Aunque ese audio se me borró, sus palabras quedaron grabadas como llama sagrada, fuego sagrado en mi mente y espíritu: “Tú eres capaz de superar cualquier obstáculo que se te presente en el camino”.
Serían muchas las anécdotas y vivencias que pudiera contar de Isaías, pero no me alcanzarían las páginas ni la vida para ello.
Por eso, cuando lamentablemente el destino te ha arrancado físicamente de nosotros, no puedo dejar de llorarte. Créeme que escribo estas líneas con los ojos llenos de lágrimas como no lo había hecho en las 48 horas precedentes al enterarme de la infausta noticia de tu partida. No sólo es el PSUV, no solo es el movimiento revolucionario que está de luto, y sobre todo los que te amamos y conocimos realmente.
Pudiera decirte que en ese momento duro y difícil por lo menos la vida me dio la posibilidad de despedirte. Mi conciencia, pese al dolor que me embarga y la tristeza pudo abrazarte en el alma y darte el hasta siempre. Recordaré tus sabias enseñanzas, tu humildad que se convertirá en faro y guía de lo que me quedé de vida, el abrazo eterno y tu alegría de aquel inolvidable 28 de diciembre de 2022 y de todo tu tránsito en esta tierra.
Espero que antes de tu partida hayas podido ver la juramentación de Nicolás y que el país está en paz. Un gran triunfo de la Revolución y el país que tu ayudaste a construir.
Ahora, estas en la presencia de Dios, y por lo menos en lo personal, te pido que intercedas ante nuestro creador para que me siga protegiendo, para que me dé luz y sabiduría para las decisiones y acciones que debo seguir tomando, tanto en lo político, en lo profesional, como en mi vida personal.
Mi querida Yolisbeth Concha, me dio una sorpresa y a la vez me hizo una exigencia que espero en el transcurrir del tiempo estar a la altura de ese compromiso. Me señaló que “Dios te dé mucha fortaleza e inspiración para que compartas las anécdotas con aquellas personas que no conocieron como tú, tan de cerca a un hombre del Fiscal de la Dignidad”. Es un reto e inmenso compromiso que espero poder concretar.
Y además de reiterar mis condolencias a tu amada esposa Norelys, a tus hijos, nietos, quiero en este cierre y además como amante de la poesía, regalarte los versos de una hermosa canción cristiana llamada «Cómo han caído los Valientes», como manera de honrarte en esta hora póstuma, y recordarte por siempre.
«Como han caído los valientes»
Angustia siento por ti, hermano mío
Salva tu alma infeliz entre espinos
Cuan dulce fue estar
La verdad te voy a extrañar
Ligero eras aun mas
Que las águilas.
Como han caído los valientes
Como las armas en la guerra
Caídos mas no destruidos
Derribados mas no vencidos
Mi alma guarda la fe en Cristo
Que en su venida estaremos reunidos
Y volverás a reír
Brillara tu genio infantil
Y cuando suene el clarín
Volverás a vivir.
Como han caído los valientes
Como las armas en la guerra
Caídos más no destruidos
Derribados mas no vencidos
Como han caidos los valientes
Aguardaran el dia durmientes
La orden final que los defienden
Saber que vive por los siglos
Saber que vive por los siglos.
¡¡¡Hasta la Victoria Siempre Isaías!!!!
.
¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron sigue!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
*Abogado, Defensor de Derechos Humanos, Militante Revolucionario y de la Red Nacional de Tuiteros y Tuiteras Socialistas (RENTSOC). jmartoranoster@gmail.com, j_martorano@hotmail.com, juan.martorano@yandex.com. Cuenta tuiter e instagram: @juanmartorano, cuenta en Facebook: Juan Martorano Castillo. Canal deTelegram: El Canal de Martorano
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario