miércoles, 22 de diciembre de 2021

Conversando con Yolisbeth Concha

 

*JUAN MARTORANO

El pasado 25 de noviembre de 2021, en los portales ensartaos y aporrea.org además de mis blogs escribí mi opinión sobre el caso de la periodista de Venezolana de Televisión, Yolisbeth Concha, mujer venezolana madre de dos pequeños que fue desalojada de un inmueble que ocupaba en Fuerte Tiuna por parte de representantes de algunas instituciones del Estado venezolano. La situación es que ya ha pasado más de un mes de esa situación, y no sólo que no se ha concretado una respuesta, y hay que poner el dedo en la llaga y en la palestra pública en la que algunos funcionarios del Estado desocuparon de un apartamento a una madre con dos niños. No está en discusión la propiedad de ese inmueble, si tiene dueño o si está en manos de la inmobiliaria nacional, sino responder la siguiente inquietud: ¿Qué va a pasar con ella y con sus hijos ahora? En este caso, confío en que nuestro Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia dará una oportuna respuesta.

Si bien es cierto que en la actualidad Yolisbeth Concha y sus hijos se encuentran en una casa de abrigo, solventando fundamentalmente el alojamiento de ella y sus pequeños, no es menos cierto que su entorno y convivencia allí se da con todas las limitaciones como las que tienen que ver con el derecho a ciertas condiciones de privacidad, comodidad, restricciones en las entradas y salidas del mismo y, en fin, ella necesita un hábitat que humanice las relaciones familiares y comunitarias. Se le hace un reconocimiento sin duda al Instituto y al Ministerio del Poder Popular para la Mujer e Igualdad de Género, y en especial a su titular, Margaud Godoy, que han atendido el caso y hacer más llevadera esta situación,  que en medio de esta etapa difícil ha puesto el mejor de los empeños para que Yolisbeth, sus hijos y el resto de mujeres, niños, niñas y adolescentes que se encuentran en situaciones similares la pasen de una manera menos espinosa, si así lo podemos señalar y de canalizarles solución a sus problemas de vivienda.

El caso de Yolisbeth es el caso de muchos compatriotas y camaradas que día a día se ven vulnerados y transgredidos en sus Derechos Humanos por parte de algunas instancias y funcionarios del Estado. Respecto al Ejecutivo Nacional encabezado por el presidente Nicolás Maduro, quién ya ha fijado posición haciendo alusión «a la indolencia» y a quien hay que reconocer los esfuerzos que ha hecho que en medio de una compleja situación que le ha tocado afrontar, por preservar las conquistas logradas durante la gestión del Comandante Chávez y durante su gestión. De igual manera, estoy consciente que el desalojo no es política de Estado ni del Gobierno Bolivariano ni del Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia en construcción, aún cuando debamos enfrentar el accionar de algunos “funcionarios y funcionarias” que no cumplen con los mandatos constitucionales, las instrucciones del propio Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, o peor aún, la falta de sensibilidad y empatía humana por aquellos y aquellas que sufren o tienen alguna necesidad, y esto es parte de las resistencias culturales que aún debemos superar y de las tareas pendientes que la sociedad toda debe asumir sin más dilaciones. En ese sentido,  lo que se persigue con esta semblanza, hacer de  conocimiento público casos como el de Yolisbeth y despertar la conciencia de nuestro Pueblo para que todas y todos nos resistamos a la naturalización de la violación de los más elementales Derechos Humanos por parte de algunos funcionarios y funcionarias de instituciones más no del Estado como un todo, como parte de la principal conquista que nos legó Hugo Chávez a través de la Constitución y el desarrollo de todo un conjunto de políticas públicas dirigidas a los más vulnerables, a través de las Misiones Sociales.

Pero lo más importante de lo que se persigue con esta conversación que me voy a permitir a reproducir, no es caer en un torneo de descalificaciones ni de dimes y diretes con respecto a lo sucedido en el caso de Yolisbeth Concha, aunque en algún momento habrá que hacer una referencia pormenorizada de esos hechos, de algunos funcionarios y de algunas instancias que en este caso y otros de similar naturaleza deben asumir sus responsabilidades por abuso o desviación de poder o por violación de la Constitución y leyes sociales que protegen a los más vulnerables, para que situaciones como éstas no vuelvan a repetirse. Lo que se persigue es mostrar el lado humano más allá de la “reportera de VTV”, que ciertos actores políticos y medios de comunicación han querido marcar una pauta informativa de distorsión de un justo anhelo de esta mujer venezolana y sus pequeños hijos, sometiéndola al escarnio público y que perfectamente podría configurarse un delito de difamación e injuria; por lo que infiero que este podría ser el elemento que se ha convertido en obstáculo para la oportuna respuesta a su petición de tener una vivienda adecuada, segura, cómoda e higiénica y en la que se priorice a su familia, a sus hijos. Es por ello que ha querido, más que responder o desmentir sobre esta situación, mostrar ante la opinión pública quién es Yolisbeth Concha. A continuación, difundo, en una primera entrega, las diferentes facetas políticas, comunicacionales además de su faceta profundamente humana, de una mujer que no dudo en calificar como muy inteligente, estudiosa, madre ejemplar y extraordinaria como ser humano.

Sin más preámbulos, presento a continuación mi conversación con Yolisbeth Concha:

Juan Martorano (JM) : ¿Quién es Yolisbeth Concha?

Yolisbeth Concha (YC): Yolisbeth Concha nace en Boconó, estado Trujillo el 18 de diciembre de 1981, hija de Yolanda Rosa Montilla de Concha, ama de casa, costurera y de Rubén Darío Concha Leal, obrero con más de 35 años de trabajo en el INOS, institución pública que hoy lleva el nombre de Hidroandes. Soy la menor de seis hermanos, cinco del matrimonio de mi mamá y de mi papá, y otro, el mayor, hijo de mi papá antes de casarse con mi mamá.

Crecí, viví hasta los 16 años de edad en La Calle Arriba de la parroquia El Carmen, calle Ayacucho con calle Andrés Bello. Esa casita que expusieron en los medios y que acreditaron como propiedad mía, es la casa donde vivieron mis abuelos padres de mi papá y luego al fallecer mis abuelos, sus hermanos le venden esa vivienda (a mi papá) y allí es en donde mis hermanos y yo crecemos, hasta que a los 16 años me toca irme a vivir a Maracaibo a estudiar comunicación social en la Universidad del Zulia. Esa calle, La Calle Arriba es dónde también pasó sus años de infancia Fabricio Ojeda, ese hombre a quien admiro por su lucha y por haber marcado la historia de nuestro país de la manera que lo hizo.

Cuando me graduó de bachiller, mis padres se ven en una situación difícil porque en 1.999 aún no había llegado la Revolución Bolivariana y se percibía difícil la vida y costear los estudios de una familia humilde a una joven que iba a irse a otra ciudad era muy difícil. Lo primero que me dijeron mis padres cuando a mí me sale el cupo por la OPSU, al aprobar la prueba para el ingreso y quedo en la Universidad del Zulia, me dicen que no podían apoyar mis estudios en el Zulia porque no tenían como pagarme la carrera; que era mejor que estudiara otra en alguna universidad del pueblo, ya que podía resultarme muy difícil estudiar en una ciudad donde no tenía familia. Inmediatamente, yo que venía de una formación rebelde en el sentido de lo que me proponía lo lograba, les contesté que no se preocuparan que ya yo venía trabajando desde los 13 años de edad, aunque el trabajo en ese momento para mí era más un hobby o distracción, porque laboré en el Museo Trapiche de Los Clavo como guía turística en Boconó y que podía desenvolverme en otros trabajos en el Zulia y así ayudarme a pagar la carrera.

Hice todas mis gestiones, logré algunos contactos en Maracaibo luego me enteré que había residencias universitarias, hice mis diligencias y a los 6 meses después de haberme mudado para allá ya estaba viviendo en una residencia becada por la universidad dónde no tenía que generar un gasto muy grande para mis posibilidades.

Estando en La Universidad del Zulia pude costearme los estudios trabajando en un café y una pizzería cercana a la Residencia Estudiantil Bertha ubicada por Indio Mara y los implementos para las clases de fotografía, cámara, rollos fotográficos los adquirí con recursos que obtenía haciendo rifas.

Fue duro rendir en mis estudios, pero nunca me aplazaron una materia, ya que trabajaba de 4pm o 6pm hasta las 3am – 4am para luego tener clase a las 7 de la mañana. Hubo trabajos en los cuales me bajaron la calificación por entregarlos en manuscrito, ya que no tenía dinero en ocasiones para mandarlos a transcribir.

Esta experiencia la vivieron la mayoría de las personas de la residencia estudiantil con quienes conviví los 5 años que duró mi carrera.

En el trabajo mi perfil es el siguiente: Soy una persona muy alegre de muy buen humor, un poco bochinchera como nos caracterizamos los venezolanos, pero a la hora de ejercer mi trabajo reporteril soy extremadamente seria y me concentro, me entrego mucho, trabajo con pasión. De verdad que todos esos reportes y el oficio del periodismo yo lo ejerzo con gran responsabilidad social, con ética y profesionalismo. En pandemia aún cuando tenía el argumento como otras mamás para no asistir a sus labores desde la llegada de la pandemia, yo me ofrecí como colaboradora para trabajar en las guardias especiales que surgieron desde el principio, aunque a comienzos de la pandemia yo me encontraba bajo comisión de servicio ejerciendo como Directora de Prensa del Ministerio del Poder Popular para la Mujer y La Igualdad de Género durante la gestión de la entonces ministra de ese despacho, Asia Villegas. Posteriormente regreso a VTV, ya había pasado mes y medio de la pandemia y me reincorporo al trabajo reporteril.

Uno de mis jefes, Barry Cartaya Gerente de prensa de Servicios Informativos de VTV hizo reconocimiento en varias reuniones frente al equipo de reporteras y reporteros, al compromiso demostrado durante mis labores en plena pandemia porque aún a riesgo de mi propia vida, había sido yo la única reportera que estuvo disponible en ciertas circunstancias en las que no tenía ningún otro periodista con quién contar porque las guardias y el servicio reporteril al canal en esta coyuntura no era obligatorio, sino quienes tuvieran la disposición, aún en pandemia de ejercer la labor reporteril. En lo particular siempre he estado a disposición, así como lo estoy en este momento atenta al llamado de mis jefes. He trabajado hasta que sucedió lo del desalojo como periodista por lo que voy a cumplir el próximo año los 18 años de servicio en VTV.

En una oportunidad, cerca de cumplir 12 años de servicio en VTV, renuncié y desempeñé algunas labores en otras instituciones públicas: En Radio Nacional de Venezuela como jefa de corresponsalía, también por un par de meses fui Directora de Relaciones Interinstitucionales de Colombeia TV, luego ejercí dos cargos, primero como coordinadora de prensa de la Misión Árbol y en CONARE como líder de prensa, ambos bajo la presidencia de esas instituciones de Osly Hernández. Tanto las camaradas Asia Villegas como Osly Hernández, quienes me sumaron a sus equipos de trabajo, son personas con un perfil de profundas raíces revolucionarias, coherentes en su accionar y su actuar en el desarrollo de la gestión pública de verdad que para mí fue un orgullo, me sentí honrada al haber formado parte de sus equipos de confianza, con quienes mantengo una relación afectiva y de camaradería.

JM: ¿Tienes anécdotas en la casa de tus abuelos?

YC: Sí, los abuelos en los pueblos siempre tenían baúles y objetos que significaban mucho en sus vidas y que siempre conservaban. Y una de las cosas que mi hermana mayor encontró en casa de mi abuelo fueron unos panfletos del Partido Comunista de Venezuela. Mi hermana mayor conoció a mi abuelo, yo no lo conocí porque cuando yo nací ya mi abuelo había fallecido, mis hermanos me llevan una diferencia de edad considerable.

Mi abuelo pese a trabajar como alguacil en un pueblito que se llama Guaramacal, hacia las montañas de Boconó, donde habita el oso frontino, mi abuelo fue muy querido y siempre se dedicó a las luchas colectivas y pese a su cargo apoyaba a los guerrilleros de esa época. Bajo esa figura, de acuerdo a lo que me cuenta mi hermana mayor, quién investigó más sobre la vida de mi abuelo, ya que ella se preguntaba el por qué nosotros en la familia teníamos esa sensibilidad social y esa inclinación hacia las luchas revolucionarias, por qué nos nace de corazón y ella quiso buscarle el sentido. Ahí es cuando comienza a asociar esos panfletos que ella se encuentra de mi abuelo y que justo su lucha fue conocida en un pueblo muy campesino dónde hay una calle que él ayudó a construir, una vía de comunicación y que, por un tiempo, no sé si todavía, esa calle llevaba el apellido de mi abuelo.

En esa época y durante esos años había que ser bien osado, bien arriesgado para marcar posición política, porque recordemos que allí eran perseguidos y asesinados cualquiera que tuviera una inclinación política y más si era de apoyo al Partido Comunista, eso era considerado un acto subversivo que no se perdonaba en esos tiempos, así que después que conocí esa historia, que mi hermana mayor me la cuenta, pues, me sentí con mucho orgullo y que está en mis raíces la lucha por transformar las cosas que no están bien, por inclinarse siempre del lado de los más débiles, de los más humildes y defender sus derechos, eso viene, de familia y eso me ha hecho sentir muy bien, es honorable llevar esos valores generacionales.

JM: Me llamó la atención que en tu cuenta twitter colocaste que eras seguidora del pensamiento de Fabricio Ojeda. ¿Podrías señalar el por qué?

YC: Para responderte esa pregunta con respecto a Fabricio Ojeda, esto me llega en lo más profundo.  Siento muchísima afinidad con la lucha emprendida por Fabricio Ojeda primero porque soy de su misma tierra, crecí en la misma calle donde él creció y segundo porque es un ejemplo de dignidad de la juventud venezolana, de la juventud boconesa, trujillana. Él fue un factor y motor fundamental para derrocar a la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, presidió la Junta Patriótica, pero además su energía espiritual es guía para muchos jóvenes con sensibilidad social y política. Lo que él hizo ese acto cuando renunció a su curul en la Asamblea Nacional (Congreso), él también fue al Zulia allí fue maestro, periodista que cubrió la fuente de Miraflores. Cuando yo decido estudiar periodismo, ya conocía la historia de Fabricio y eso me nace a mí entre el primer año y el segundo año de bachillerato. En Boconó se celebraba y se conmemoraba tanto la fecha de su nacimiento como la de su siembra, pero donde se hacían los actos más bonitos y emblemáticos era el día de su asesinato. A Fabricio lo conmemoran desde 1967, un año luego de su partida física. Los jóvenes de RUPTURA el año 1976 lo declararon como Día de los Mártires, asesinado por el Servicio de Inteligencia de la Fuerza Armada (SIFA) de esos gobiernos puntofijistas cuartorrepublicanos, que dijeron que Fabricio Ojeda se había ahorcado, cuando en realidad fue asesinado por ser un referente de lucha, porque nunca la perdonaron esa derrota que lideró contra Marcos Pérez Jiménez; además de su conducta que fue muy sana.

Es un referente político con una moral muy alta, muy elevada, lejos de egoísmos y ambiciones personales, inteligente, crítico. Con una gran comprensión de la realidad política de nuestro país, él fue un héroe anónimo para su tiempo, por tal actitud, Fabricio pudo haber llegado a ser Presidente de la República de Venezuela, y es ahora en tiempos de la Revolución Bolivariana que el Comandante Chávez eleva su nombre al igual que el Presidente Nicolás Maduro quién también le reconoce que él fue el motor fundamental de la Junta Patriótica y quién logró derrocar a Marcos Pérez Jiménez. Las ambiciones políticas es uno de los daños más grandes que se ha venido infiltrando dentro de nuestras filas revolucionarias. Esas ambiciones personales por el cargo que se ocupa, por el “quítate tú para ponerme yo”, muchos egoísmos que le hacen daño a nuestro Pueblo y otra de las cosas cada vez que leo sobre Fabricio, sus libros, me doy cuenta que él fue un impulsor de la unidad revolucionaria, yo naturalmente lo llevó como una característica dentro de mis principios revolucionarios el de unificar, me duele mucho las divisiones políticas, que si unos pertenecen a un grupo, que si otros pertenecen a otro grupo, que si uno tiene un “papá político”, eso no me gusta. Yo soy hija, defensora y guardiana del legado del Comandante Eterno Hugo Chávez, él fue muy enfático y directo cuando dijo apoyen a Nicolás Maduro, aquel 8 de diciembre cuando le hablaba al país, avizorando pues que su salud podía traerle una consecuencia que no deseábamos y no deseaba su Pueblo y que lamentablemente así fue. Y desde que le escuché esa línea que nos dio el presidente Comandante Eterno Hugo Chávez de apoyar al Presidente Nicolás Maduro aquí estoy apoyándolo 100% y además he tomado la palabra del presidente Nicolás Maduro cuando dijo o nos encomendó, al poco tiempo de ganar la Presidencia de la República, cuando el presidente llama al Pueblo y le dice: “Ayúdenme, ayúdenme a gobernar”. Y cada rebeldía nuestra, cada confrontación con lo que no está correcto en Revolución es un apoyo siguiendo ese llamado que nos hace el Presidente Nicolás Maduro a que las cosas se encaminen por el camino correcto, por el lado correcto.

JM: ¿Cuál fue el papel que ejerció tu papá en tu vida?

YC:  Mi padre fue un hombre con una conciencia revolucionaria en obras más que en militancia. Mi papá fue muy querido y es muy querido, aunque mi papá murió en el 2001, era muy querido por la comunidad porque además de haber sido un hombre trabajador, él realizaba servicio comunitario. No había un favor o apoyo que él le negara a la comunidad. Desde muy temprano pudo adquirir un vehículo, nunca lo guardó en garaje sino en la calle que yo me recuerde y la comunidad se lo cuidaba porque era un vehículo al servicio social. Cualquier cosa que sucediera a algún vecino que tuviera una urgencia, ir al médico, fuese la hora que fuese; a mi papá le tocaban la puerta y él siempre con una sonrisa y la mejor disposición de servir y ayudar al prójimo, acudía a ese llamado. Si tenía que trasladar a alguien al médico, pues él ponía al servicio ese vehículo y recuerdo que varias mujeres embarazadas o sus esposos tocaban a su puerta, familias, vecinos, él les hacía la carrera para el médico sin cobrar ni medio, él no prestaba sus servicios como taxista sino como servidor social. Entonces, dentro de los principios; el ayudar el amar al prójimo fue un valor muy importante que me inculcó mi papá.

Mi papá fue gallero, cuidaba y criaba gallos, finos de pelea, tenía muchísimos. Mis hermanos lo heredaron, son galleros, de esos que los entrenan, les cuidan la alimentación, le sacan cría, les pulen y montan sus espuelas. Y fue un hombre muy amoroso que le dio mucho amor y cuidado a mi mamá. Nunca presencié una discusión o una pelea entre ellos, al igual lo manifiestan mis hermanos que son mucho mayores que yo, si lo hicieron, si tenían sus discusiones, pues lo hacían a puerta cerrada, y recibimos mucho amor de ellos. Nuestros padres fueron muy afectivos y es esa una característica nuestra, que somos sujetos de manifestar con mucha facilidad nuestro afecto, nuestro aprecio, nuestros sentimientos porque así nos lo inculcaron y así nos criamos, bajo mucho amor.

También mi papá era rezandero, en los pueblos hay personas que se dedican a ser rezanderos y ayudar a bien morir a las personas. ¿Qué quiere decir eso? Pues mi papá tenía oraciones muy hermosas que le rezaba a las personas cuando fallecían, él era buscado para rezarle a los muertos los nueve días que se conocen dentro de la religión católica, como el novenario y que son importantes para despedir un alma. Entonces él tenía hermosas oraciones, rezaba rosarios bellísimos a los cuales siempre acompañé. Me llevaba porque como era la menor de sus hijas, la más consentida, pues así me sentía yo, él me enseñó a rezar, a tener mucha fe en Dios y otra de las cosas que él también inculcó en mí que lo vi cómo el ayudaba a bien morir a las personas que agonizaban, así como buscan a un cura para que perdone  los pecados y eche su bendición, a mi papá lo buscaban para  orarle a esa persona que estaba agonizando, él era quién ayudaba a esa persona a despedirse de este mundo de una manera que le diera tranquilidad, paz con sus oraciones, hasta que la persona podía ver la luz y poderse ir de este plano terrenal, eso también vi que mi papá lo hacía, no era un militante de un partido revolucionario, pero ya con sus actitudes me inculcó ese valor, del que ya te hablé.

En Los Andes se estimaba mucho a apoyar a los partidos adecos, más por allí si vi a mi papá en algunas oportunidades apoyó a los candidatos adecos y cuando llega o se conoce de Chávez en aquella rebelión de 1992 mi papá se sintió plenamente identificado, era un obrero explotado por la IV República y en 1.999 cuando nos corresponde apoyar al Comandante Chávez, su voto fue para el Comandante Chávez y allí en ese año mi papá fijó posición frente a nosotros y dijo: “Este hombre va a transformar la historia de este país”. Se lo escuché a mi papá y a mis hermanos también y se nos quedó eso, hacia donde teníamos que inclinarnos, hacia la Revolución Bolivariana porque nuestro referente de dignidad, de principios, de solidaridad, de amor que era mi padre pues eso nos estaba encomendando y así cuando a mí me tocó votar por primera vez mi voto fue para el Presidente Chávez, para la Revolución Bolivariana.

Mi papá fallece en el año 2001, ya yo tenía unos tres años en la Universidad del Zulia, tenía 19 años de edad cuando mi papá muere, una de las cosas también que quisieron imponer como matriz de opinión o que transmitieron algunos medios fue que mi papá estaba vivo y que vivía en algún área de aquí de Caracas, cuando eso es totalmente falso, eso lo hicieron como para justificar que yo no tenía extrema necesidad de tener una vivienda.  Mi papá murió producto de una enfermedad laboral porque como él era obrero, operaba con cloros y sustancias químicas con las que se le hacía mantenimiento al agua y para la época en la que él muere, su enfermedad no la asumen como una enfermedad laboral la institución para la que trabajó durante más de 35 años que fue el INOS, Hidroandes.

 JM: ¿O sea que ya has tenido antecedentes con campañas en tu contra por parte de algunos medios de comunicación?

YC: Si, ya ha habido antecedentes, no es la primera vez.

Pero quería retomar un poco las ideas de mi respuesta a tu interrogante anterior. En 1992, a mi papá  lo obligan a jubilarse bajo engaño y está es una historia que marca también mi vida porque ahí veo la explotación al trabajador y me hago sensible por los casos que tienen que ver  con las desmejoras, con la injusticia  laboral y principalmente  hacia ese trabajador humilde  porque mi papá lo vivió, yo lo viví  en casa, lo que se sufre una persona que dedica tanto  años de trabajo y sea explotado porque cuando le tocó jubilarse a él lo obligan bajo engaño al igual que a más de 10 mil trabajadores a escala nacional de distintas instituciones, CADAFE, CADELA, CANTV, y a esos trabajadores  nunca les pagaron las jubilaciones porque fue un complot, un engaño basado en que iban a privatizar las empresas y que si las privatizaban y no firmaban su jubilación pues nunca les iban a pagar, al momento de jubilarse en 1.992, esto sucede antes de la rebelión del Comandante Chávez, así fue al jubilarlo nunca le pagaron su jubilación ni a mi papá ni a esos trabajadores,  y quienes se prestan para mancillar los derechos de estos obreros, es, lo recuerdo clarito dicho por mi padre, la  CTV y Fedecámaras, lideraban este complot de violentar los derechos de tantos trabajadores eso despierta en mí el tener consciencia de clase  con el proletariado, con los trabajadores  y lo he demostrado con mi conducta en VTV motivo por el cuál siempre me vi involucrada  en las luchas por mejorar la calidad de vida y los beneficios del trabajador de VTV, esto bajo la figura de los Consejos de Trabajadoras y Trabajadores Socialistas de VTV «Jesús Romero Anselmi» en el 2010-2012,  fecha en la cual contamos con el apoyo para el impulso de esta organización de base, de RedTv y de cuadros políticos como el camarada Néstor González quien lamentablemente falleció hace poco producto del Covid-19, Tania Díaz y Ernesto Villegas. Formé parte del Consejo de Trabajadores y Trabajadoras, pero eso más que todo me trajo a mí un reto, en ese momento era muy importante llevar a los trabajadores a tener consciencia sobre la importancia de unirnos para lograr tener conquistas laborales en el canal y avanzar hacia mejores condiciones de vida en el trabajo.

Retomando la historia de mi padre, mi padre muere de tristeza, porque imagínate haber trabajado tanto y no tener para apoyar a sus hijos y brindarles una mejor calidad de vida eso lo deprimió muchísimo aparte de su enfermedad por consecuencias laborales. Los químicos con los que trabajó durante tantos años le afectaron la piel y no hubo el apoyo que necesitaba para su operación. A él tenían que hacerle un trasplante de médula y no se le pudo hacer porque no contábamos con los recursos económicos para ello, él jamás tuvo vicios, ni de alcohol, ni de nada, ah sí un solo vicio característico del hombre campesino como la mayoría de los boconeses, el chimó.

JM: ¿Cuáles han sido los momentos más duros en la política y en tu vida que te ha tocado afrontar y que enseñanzas te ha dejado?

YC: Me preguntabas los momentos más duros que en Revolución siento que a nivel político se han vivido y en los que me he visto afectada, bueno el Golpe de Estado en el 2002, yo estaba en la Universidad del Zulia y fue muy triste para mí  porque solamente el ver por un momento todos esos logros que ya se estaban encaminando en nuestro país por hacer justicia social, esa inclinación de tener un presidente a favor de los más humildes, de los pobres, esa conducta cristiana que Cristo Jesús también la tuvo al ponerse al lado de los más débiles como lo hizo Chávez, pues se vio derrumbada en ese momento el 11 de abril de 2002, fue muy triste para mí y para mi familia. Recuerdo que llorábamos todos, mi mamá, mis hermanas, mis hermanos y justo ocurrió un año después de fallecer mi padre. Fue un momento muy sensible para nosotros esa vez.

Para ese momento ya tenía elementos de formación como comunicadora social porque entré en 1999 a la Universidad del Zulia con 16 años de edad, para el 2002 ya yo tenía tres años en la Universidad del Zulia y yo vi como hubo total manipulación del periodista de Venevisión de los hechos que sucedieron en Puente Llaguno. Era muy fácil desmontar los hechos manipulados ya que las personas que estaban en Puente Llaguno no estaban atacando a la marcha que venía de Chuao, todo lo contrario, se estaban defendiendo de la Policía Metropolitana de Peña, porque lo que había debajo del puente eran policías disparando y el periodista que se presta para la manipulación nunca mostró ese ángulo en picado, sino que sus cámaras se iban a corte para asociar a su conveniencia esos disparos de militantes de la Revolución que se defendían tanto de los francotiradores como de los policías apostados en la Avenida Baralt y que allí nunca pasó la marcha, entonces me tocó un amplio debate días posteriores en clase con algunos profesores de la Universidad del Zulia que estaban inclinados a las ideas de la oposición venezolana, y a mí me tocó fijar posición en clase en contra de esa matriz que uno de los profesores llevó a las aulas, a los alumnos a analizar, quienes no querían debatir con el profesor por temor a que le rasparán la materia. Sin embargo, no fue mi suerte, todo lo contrario, cuando nos toca que nos den las notas finales, ese profesor, con inclinación política opositora, pensé que me esperaba lo peor por ser defensora de la Revolución y de Chávez desde las aulas, sin embargo, me dice: “Yolisbeth has aprobado con 17 puntos. Te felicito porque tus argumentos expusieron no sólo que tú eras una mujer afecta a la Revolución, sino que lo hacías con base”. Es decir, que ese profesor, lejos de vengarse de mí por ser opositora a su pensamiento o a las líneas políticas que él quiso marcar en clase, más bien me felicitó porque me dijo que estaba bien parada en la posición en la que estaba, me lo hizo saber y me manifestó su respeto hacia mí.

El otro momento duro que marcó mi vida que me afectó muchísimo fue el del 5 de marzo de 2013, cuando el presidente Chávez muere, eso fue muy doloroso. Y qué anécdotas quiero recordar de ese momento, más que todo y de hablar de lo que nos quebró en el alma, de la partida física y de la despedida del Comandante Chávez, quiero dejar un aporte o una reflexión porque siento que le hace falta a la Revolución. Hay personas que se dieron cuenta que eran revolucionarias, chavistas tras la siembra del Comandante Chávez. Conozco personas que se identificaban con la oposición y cuando vieron que no estaba ese protector de los más humildes que había partido a otro plano, abandonando el terrenal, esas personas se cambiaron de inclinación política y se hicieron afectos a la Revolución Bolivariana, entre llantos porque les dolió la muerte de Chávez, aunque lo adversaron en vida. Eso ocurrió también en nuestro país,  hay personas que empiezan a votar por la Revolución Bolivariana cuando se va a elecciones y el candidato es el presidente Nicolás Maduro, y estos se suman a la Revolución; eso ocurrió en las filas de la oposición, y no como infiltrados políticos, me consta que no, de corazón; personas que se les quebrantó el alma y se arrepintieron por no haber apoyado con el alma y en vida al Comandante Hugo Chávez, pero lo hicieron y lo hacen hasta el momento. Les digo que tengo ejemplos que conozco personas que sinceramente y de corazón están con el presidente Nicolás Maduro, lo apoyan en votos. No están en ninguna de sus trincheras políticas ni de autoridad, pero lo hacen desde el voto.

Por eso es que llamó la atención de aquellos y aquellas que han satanizado a las personas que firmaron en contra del Comandante Chávez y yo creo que no es importante detenernos de quien votó a favor o quien votó en contra porque la historia de nuestro país ha dado muchas vueltas y hay personas que hoy están con la Revolución Bolivariana y desde ese momento reconocieron que se equivocaron por ser opositores al Presidente Chávez, yo que siempre he sido de este proceso quiero hacer un llamado a la reflexión para que no satanicen a las personas que se suman a la Revolución y que en años anteriores no eran revolucionarios, porque alejamos a esas personas de tomar partido a favor de la Revolución. Tengo una experiencia en particular y por eso les hablo de esta manera y por eso hago este llamado, importante en nuestra historia, momentos muy importantes como las elecciones de la Asamblea Nacional Constituyente, hubo personas que estaban ya por saltar la talanquera en la época de las llamadas «guarimbas» actos fascistas porque pensaron que, con la violencia, el gobierno de Maduro iba a caer y no votaron ni participaron en la Constituyente. Yo creo que eso sí es muy importante; el que votó en la Constituyente, el que participó en la Constituyente demostró un valor, un arraigo y una fidelidad revolucionaria increíble, honesta, transparente. Me preocuparía más que en vez de averiguar quién votó en contra del presidente Chávez, quien votó a favor de la Constituyente, porque en ese año 2017 era muy importante rescatar la paz, volver a la normalidad a nuestro país con ese voto por la Asamblea Nacional Constituyente.

El otro momento duro es cuando la oposición obtiene la mayoría en la Asamblea Nacional en el 2015. Fue para mí terrible, muy triste y muy doloroso, porque sentía que, si no había sido fácil la lucha revolucionaria en las instituciones, con la derecha en la Asamblea Nacional iba a ser mucho más difícil. Así que es en ese año que yo decido renunciar a mis doce años de servicio en VTV, hubo un año que yo estuve fuera de VTV y fue producto de ese quiebre, de ese dolor, cuando la oposición gana la Asamblea Nacional, sentí que retrocedimos mucho en ese momento, me lo tomé demasiado a pecho y dije que necesitaba recargar mis fuerzas, mis energías porque la batalla iba a ser muy dura.

 Y es entre ese año 2015-2016 cuando yo me voy a Boconó, vuelvo a mi pueblo y me dedicó tanto a ejercer como periodista de la Alcaldía Bolivariana en Boconó en el año 2016 pero también  en una emisora, Burate 103.3 FM donde tuve mi programa radial llamado “Boconó en vivo” y desde esa trinchera de lucha, en el 2017 contribuyó a impulsar la Asamblea Nacional Constituyente y desde mi trabajo como periodista en la Alcaldía impartimos junto con un grupo de militantes revolucionarios  talleres de formación en las comunidades para motivar y estimular a todo aquel que había sido afectado por ese revés en las elecciones de la Asamblea Nacional,  a que apoyarán la Asamblea Nacional Constituyente, y que diéramos un voto de fe y de confianza de que ésta iba a transformar el país y que era la oportunidad para que las comunidades tomarán las riendas de la Revolución porque eso en esencia era lograr la Asamblea Nacional Constituyente, que el pueblo tomará el poder desde las bases y se eligieran actores políticos, constituyentes, para poder ejercer  y diseñar políticas que nos defendieran de toda esta conspiración y complots internacionales que había contra la Revolución Bolivariana, contra el Presidente Nicolás Maduro y contra el Pueblo, recordemos que en 2017 es cuando la oposición extremista desata la quema de personas por considerarlas afectas a la Revolución Bolivariana, acciones fascistas promovidas por la extrema derecha venezolana y que por primera vez se veían en nuestro país, como lo fue el asesinato de Orlando Figuera, hubo un odio muy grande que desde la oposición extremista de nuestro país se volcó a las calles en contra militares, funcionarios policiales y civiles.

JM: ¿En qué trincheras de luchas has estado y dónde has militado?

YC: Pertenecí al Movimiento Revolucionario de Estudiantes Residentes de la Universidad del Zulia; Patrullera del Consejo Comunal “VTV con las Comunidades” 2008-2009; Fui electa como vocera  del Consejo de Trabajadores y Trabajadoras Socialistas “Jesús Romero Anselmi” 2010-2012; también participé dentro de la Plataforma de Lucha de los Consejos Socialistas de Trabajadores y Trabajadoras de Distrito Capital desde el año 2011; Vocera del Clap Calle Arriba, Boconó, estado Trujillo durante los años 2016-2017; Integrante  de la Estructura Política Parroquial  del PSUV en la parroquia el Carmen 2016-2017; Miembro de la UBCH de la parroquia El Carmen, Boconó estado Trujillo, 2017; Miembro de la Fundación “Fabricio Somos Desde Siempre”, desde 2015; Promotora de la Campaña Comunicacional “Por la Asamblea nacional Constituyente” Programa Radial “Boconó en Vivo” en Burate 103.3 FM (Moderadora) en 2017 y ponente de charlas formativas en las comunidades como antesala a la Asamblea Nacional Constituyente.

La Universidad del Zulia tenía al menos cuatro residencias estudiantiles para estudiantes de bajos recursos que no tuvieran familia en esa ciudad, en Maracaibo, o que no pudieran pagar una residencia privada. Yo viví en una residencia llamada “Berta”, allí nos organizamos porque a través de investigaciones que hicimos los que no nos conformábamos con lo que nos dijeran, sino que buscábamos ir más allá de los logros que había en las universidades y de ese presupuesto que les tenían destinado, llegamos a encontrar que la OPSU enviaba la partida presupuestaria completa para que esas residencias fueran financiadas en su totalidad. ¿Qué ocurría?  En los años que estuve en las residencias estudiantiles, que el estudiante no se podía graduar, no podía egresar sino pagaba el 50% que le correspondía de la cuota mensual que había fijado el rectorado de la universidad, pero cuando investigamos nos dimos cuenta que la OPSU enviaba el dinero completo para que el estudiante no tuviera que pagar.

Así que se toma la decisión, logramos luego de vigilias, acciones fuertes de protesta contra los rectores de la Universidad del Zulia, incluso en una oportunidad nos postramos a las puertas del rectorado y no dejábamos entrar ni salir a nadie, para que nos dieran respuesta de este tipo de luchas. Y se logra la exoneración total para el estudiante de las cuotas de las residencias estudiantiles.

También otra de las luchas era porque había la posibilidad de que no nos siguieran dando la cena porque al estudiante residente le daban el desayuno, el almuerzo y cena, entonces en una oportunidad se vio en riesgo la cena y luchamos para que no nos la quitarán. Además de sumar al movimiento estudiantil a las marchas que convocaba el Presidente Chávez en apoyo a la Revolución.

La Fundación “Fabricio Somos Siempre” tiene el objetivo de proyectar y rescatar la memoria histórica de Fabricio Ojeda, darlo a conocer, y que ha emprendido a lo largo de estos años investigaciones para que su legado, su lucha sea referente para la juventud venezolana y del mundo, ya que desde varios países han mostrado interés por este sujeto histórico de transformación política.

Desde la fundación “Fabricio Somos Siempre”, organizamos actos que se realizan en Boconó en su conmemoración. En uno de estos actos conocí personalmente a Eliezer Otaiza meses antes de que lo asesinaran, él asistió a Boconó a una de estas conmemoraciones del asesinato de Fabricio.

Desde la Plataforma del Consejo de Trabajadores de la Gran Caracas, a la cabeza de Adelaida Zerpa, llegamos a viajar e intercambiar con muchas instituciones que estaban sumadas a esta lucha y al intercambio de experiencias. Llegamos a visitar Sidor, a compartir con sus trabajadores; con los de Lácteos Los Andes; hicimos congresos, reuniones, dictamos talleres de formación para que los Consejos de Trabajadores y Trabajadoras, recibieran capacitación técnica, formación política para ejercer los cargos que debieran asumir dentro de una institución pública o privada. Sin esa formación no era posible ejercer una gestión eficaz, eficiente como lo exigía los tiempos de la Revolución.

Como patrullera de VTV, previo al llamado del Presidente Chávez en el 2007 a conformar el partido más grande de Venezuela y Latinoamérica como lo es el PSUV,  me inscribí en el partido y comencé mi militancia activa, desde diferentes estructuras. Conformé la patrulla “VTV con las comunidades”, esa patrulla la organizó María Teresa Martín, trabajadora del canal y yo me sumé como patrullera. De allí realizamos varios trabajos en las comunidades. Particularmente fui a dar talleres de formación para apoyar a las comunidades en la conformación de los Consejos Comunales, especialmente en Caño Amarillo, fui a dar talleres de formación allí, sobre cómo se debían ejecutar las elecciones, cuál debía ser el perfil de esas personas a ser voceros de los Consejos Comunales, las estructuras de organización. En Catia y Petare también estuve apoyando la conformación de esta organización del Poder Popular.

Como periodista y reportera de VTV estuve haciendo reportes y seguimiento a esas elecciones que hacían las comunidades de sus Consejos Comunales. Uno de mis perfiles como comunicadora social, de mis fuentes preferidas son dónde se generan noticias que tienen que ver con el abordaje en las comunidades, las iniciativas de la comunidad, me gusta cubrir mucho esa fuente. Otra de las fuentes que me gusta bastante es la política; también tengo gran desempeño o facilidad por las historias de vida, me encanta el abordaje de las historias de vida de cada persona que han sumado voluntades para hacer un mejor país o que han ejercido liderazgos en las comunidades, también de quienes se han dedicado a transformar sus propias vidas, el Hombre Nuevo.

Algunos de esos abordajes los podemos encontrar por acá:

“Rolando, instrumento de Dios”: https://m.facebook.com/story.php?story_fbid=2778629992354855&id=100006236439623&sfnsn=wa

“Zuleima y el muro de piedra”: https://m.facebook.com/story.php?story_fbid=2921699288047924&id=100006236439623

Y en cuanto a los reportajes de fuente política tengo estos:

1.- Cumbre del Alba en Solidaridad con Venezuela: https://drive.google.com/file/d/0B0tEG14m_3g4V283OV9tUHRYTGs/view?ts=61ba46f8&resourcekey=0-nF3BKQhxQEIwIB47escRIw

2.- Tercera entrega Cumbre del Alba: https://drive.google.com/file/d/0B0tEG14m_3g4M0h3emplX3JFc3c/view?ts=61ba4715&resourcekey=0-KYCELQIrgCovoqODr3ZJng

3.- Cumbre internacionalista: https://drive.google.com/file/d/0B0tEG14m_3g4bk9iM1o0NHh4NGM/view?ts=61ba47ec&resourcekey=0-733W7cO7i5ReTkFzqnneow

En el año 2016, llegando a Boconó, el Presidente Nicolás Maduro ordenó la conformación de los Clap, y en mi comunidad conformamos el CLAP “Calle Arriba”, allí hay una bonita gestión que ejecuté junto a los demás voceros como jefa de calle y que ha sido reconocido tanto por personas de la comunidad afectas al sector opositor como personas revolucionarias porque se llevó una gestión muy transparente, muy limpia, en igualdad social y como lo pedía el Presidente de la República Nicolás Maduro para el momento, sin preferencias. Sencillamente era ayudar a las comunidades a tener acceso a los alimentos bajo una gestión de la figura de los Clap y así hacerle frente a la guerra económica, todavía hay personas que dicen que se me extraña en el pueblo, donde estuve 2016-2017 porque dicen que llevé una gestión que se sintió en la comunidad y que fue efectiva, para organizar la distribución de las bolsas, las cajas y demás beneficios que llegaban a través del CLAP.

Dentro de esa misma estructura, fui llamada a ser UBCH y como trabajadora de la alcaldía de Boconó, como comunicadora llamada también a formar parte de la estructura política parroquial del PSUV en la parroquia “El Carmen”, municipio Boconó del estado Trujillo.

JM: ¿Te gusta la lectura? ¿Qué tipo de literatura te llama más la atención y cuál ha sido el libro que podrías decirnos te ha marcado?

YC: Me encantan las lecturas que hablan de la historia de personajes emblemáticos, no solo de nuestro país sino de las luchas de Latinoamérica, todos aquellos que han promovido y han marcado la historia del mundo, dentro de la lucha socialista, la lucha revolucionaria.

La historia de Jorge Eliécer Gaitán, estando en la Universidad del Zulia en mis manos tuve un libro que se llamaba “Gaitán después de medio siglo”. Conocer que pudo ser presidente de Colombia y cambiar la historia de ese país pero que la CIA no se lo permitió, los enemigos de la libertad de los pueblos y de la justicia no se lo permitieron, tres días antes lo asesinan, esa es una historia que me conmovió mucho. La historia de Allende, la de Fidel, El Che, esas son las características de los libros que a mí me han llamado la atención, aquellos que han sentado precedente para nuestro accionar hoy en día y que han tenido marco de referencia en nuestra historia política revolucionaria.

Pero principalmente como yo tengo gran sensibilidad social por las luchas laborales, consciencia de clase, el libro que marcó y que me conmovió el corazón fue “La Madre” de Máximo Gorki. Ese libro me lo regaló el camarógrafo Ernesto Sotillo, camarógrafo junto a Adolfredo Torres del reportero Ricardo Durán (camarada asesinado) con quienes realicé mis primeras prácticas reporteriles para el canal del Estado. Hoy Ernesto Sotillo es parte del sector de los Jubilados del canal y es quien me regala ese libro cuando yo me inició en VTV más allá de 2004, que es el año que yo llego al canal, en el 2003 llegó a VTV como pasante. Por eso es que yo digo que hay sujetos históricos en el canal que tienen formación revolucionaria y que desde esa trinchera han defendido la parte comunicacional de VTV. Cómo el camarógrafo Antonio Parra quién perteneció al Consejo Socialista de Trabajadores, organización de base que integré siendo la vocera más votada del departamento de prensa cuando se impulsó el Consejo de Trabajadores, el cual denominamos “Jesús Romero Anselmi” por lo importante que fue “Chucho” el periodista y siempre reportero para nuestro canal y ese fue el nombre que en consenso se le dio a ese Consejo de Trabajadores. En ese momento también fueron electos Luis José Marcano, a quien aprovecho de saludar y felicitar por su reciente elección como gobernador del estado Anzoátegui, él perteneció al Consejo de Trabajadores y Jessica Sosa también, entre otras personas, que impulsamos cambios en el canal.

Yo luche arduamente para que existiera una guardería, si bien mi hijo, el único hijo que tenía para el momento, Diego, ya no estaba en edad para ser favorecido por el beneficio de una guardería, esa agonía que yo viví por no tener un lugar donde mi hijo estuviera mientras yo laboraba, me motivó a solicitarlo como vocera del Consejo de Trabajadores. Esa fue una de las principales razones de nuestra conformación y luego se impulsa la conformación de un sindicato bolivariano porque en el canal el sindicato que había se identificaba con las ideas de la oposición para ese momento, además que el contrato colectivo del canal tenía 21 años sin poder ser aprobado porque siempre se pateaba la mesa ya que el sindicato existente no lograba concretar la aprobación de ese contrato colectivo.

El Consejo de Trabajadores no acompañó hasta el final la aprobación de ese contrato, pero hubo logros que en una oportunidad en una asamblea de trabajadores con las autoridades le solicito al presidente del canal y mi ministro de ese entonces. ¿Cuáles eran las solicitudes que desde mi vocería como Consejo de Trabajadores expuse? La creación de una guardería en VTV; un espacio para que los camarógrafos de guardia pudieran pernoctar y a la vez estar en mejores condiciones, otorgándoseles un espacio más amplio con camas, colchones y una sala de estar, al igual para los conductores del canal, los transportistas,  quiénes tampoco tenían un espacio digno, fue otro de los logros que con mi voz y en lucha colectiva de los integrantes del Consejo de Trabajadores, se logra también que una farmacia se lleve a los espacios de VTV, la Farmacia Patria.

La Arepera Venezuela que luego, bueno no funcionó más como Arepera Venezuela, para el momento que la logramos llegó con unas ofertas para la alimentación de los trabajadores y de las personas que se acercaran a VTV fue muy importante porque eran logros sociales para mejorar nuestras condiciones de vida en el trabajo.

Tras la aprobación del contrato colectivo quedaron plasmadas reivindicaciones salariales y laborales muy importantes para el momento y la guerra económica inexistente para ese momento no afectaba nuestro bolsillo y se podían ver esos logros que hoy en día no se pueden disfrutar como en aquellos años por la situación con el dólar, la especulación y muchos otros factores que están en contra.

En lo único que no pudo participar el Consejo de Trabajadores fue en una cláusula que afectó mucho y que en esto quiero fijar posición, afectó mucho a los jubilados. Yo jamás me hubiese prestado para una cláusula que vaya en desmejora de los jubilados porque fui hija de un jubilado que murió porque fue violado su derecho y esa fue la única cláusula que en ese contrato colectivo logró el Sindicato Bolivariano y no estuve de acuerdo pero que se aprobó, allí ya el Consejo de Trabajadores no tuvo ni voz ni voto, por lo que dejo muy clara mi posición de ese fallo que no reivindicó a los jubilados del canal como lo merecían junto a otros compañeros que no estuvimos de acuerdo, porque era una decisión que lejos de reivindicar a los jubilados fue en retroceso .

También destacamos como un logro la apertura de una oficina de atención social digna para recibir al pueblo y canalizar sus necesidades, otro logro del Consejo de Trabajadores, aunque en estos momentos no funcione como tal.

JM: ¿Cómo llega Yolisbeth Concha a VTV?

YC: Recuerdo que en la universidad del Zulia me facilitaron el número de Recursos Humanos de VTV hoy Gestión Humana, tuve casi un año llamando haciendo seguimiento a mi solicitud de realizar pasantías en Venezolana de Televisión, siempre me respondía las llamadas Lilibeth, hasta que decidí viajar de Maracaibo a Caracas y solicitarlas personalmente, recuerdo que solo saludé y la persona que atendió durante varios meses mis llamadas, reconoció de inmediato mi voz, «eres Yolisbeth Concha» dijo al escucharme.  Y así es como llegó a VTV. (me acompañó ese día una prima y un hombre del cual estuve muy enamorada, mi primer amor)

JM: ¿Cuáles son los sueños de Yolisbeth? ¿Qué otras anécdotas quisieras compartir con los que lean esta semblanza tuya y que mensajes tienes tanto para los simpatizantes como a los que adversan la ideología bolivariana?

YC: ¿Cuáles son los sueños de Yolisbeth?

En este momento el más anhelado es poder mejorar mi calidad de vida y la de mis dos hijos, Diego e Ignacio y eso se materializa con la asignación de una vivienda.

Y no lo está solicitando una mujer paternalista o vividora del Estado, pues no es mi caso, todo lo contrario desde el 2007 al 2010 pude con recursos propios, producto de mis ahorros adquirir una vivienda por el sector privado y la banca privada, años después de habitarlo e indagando el por qué del estado en el que se encontraba, me conseguí con que dicha edificación décadas antes había sido declarada en alto riesgo y sus habitantes desalojados por los bomberos y protección civil, al paso de los años como no se desplomó su infraestructura fue ocupada por familias que necesitaban vivienda y es años después que soy estafada al comprar un apartamento sin saber dicho antecedente y el precario  estado de su infraestructura y sus servicios básicos. Algunas personas que habitan ese edificio desconocen esa historia.

Hay quienes le deben todo lo que tienen a la Revolución Bolivariana y otros que no hemos ostentado ningún bien material, ni inmueble producto de ella, pues hemos comprometido nuestra vida en defensa y al servicio de este proceso político más por conciencia y por convicción, que por interés.

En esta oportunidad no deseo enfocarme en los detalles de las luchas que he dado por adquirir una vivienda en óptimas condiciones, ya habrá oportunidad para ello y así desmontar los juicios y descalificaciones personales de las cuales fui objeto, las calumnias, vagas interpretaciones y falsos positivos que se levantaron en mi contra y en contra de los tesoros más preciados que tengo, mis hijos, tras el desalojo forzoso donde fuimos víctimas de violencia vicaria y violencia institucional por parte de algunos funcionarios que distorsionan el verdadero sentido del servidor público y servidora pública que necesitamos en tiempos de Revolución. En una próxima oportunidad nos referiremos con más detalle y en concreto sobre ello.

Mis niños son el combustible de mi vida, el primero planificado, producto de la unión matrimonial y el segundo producto de la libertad que nos da la vida de errar al amar, deseado más no planificado, ambos llegan como consecuencia del amor.

¿Qué mensaje le deseo transmitir a las personas afectas a la Revolución?

Sean fieles a sus principios éticos y morales, y defiéndanlos como el valor personal más preciado, para que nadie tenga control sobre sus acciones y cuándo deseen fijar posición ante cualquier injusticia puedan hacerlo con libertad plena.

A la oposición venezolana yo les digo, podemos adversarnos en lo político y no por ello ser enemigos

El enemigo histórico los revolucionarios lo tenemos bien identificado y no nació en nuestra tierra, no es de Venezuela.

Yolisbeth con sus hijos Diego e Ignacio

Conversando con Yolisbeth Concha

No hay comentarios: