lunes, 30 de septiembre de 2013

El Show de Chávez: "Bush es Mr. Danger"

Chávez: El Antimperialista.

1/6 Discurso Pte Chavez En Asamblea ONU 24 Sept 2009.

Hugo Chávez - 4/8 La Revolución no será Transmitida - 11 de Abril del 2002.

Hugo Chávez - 3/8 La Revolución no será Transmitida - 11 de Abril del 2002.

DEFENDER AL PRESIDENTE MADURO.


Por Toby Valderrama y Antonio Aponte
(Texto)

La Revolución, el Socialismo, la Humanidad, están por sobre cualquier consideración personal, egoísta, el bien común debe ser la condición para el bien individual: "Con todos y por el bien de todos" es nuestra divisa.

Es con esos pensamientos que debemos analizar el momento que vivimos y tomar decisiones. Los anteriores conceptos deben fundirse con el profundo sentimiento de amor por el Comandante Chávez y guiar nuestra conducta.

No es secreto que tenemos muchas y profundas diferencias con el Presidente Maduro, las hemos escrito y lo seguiremos haciendo con “Irreverencia”. Creemos que ese es nuestro deber y defendemos esa libertad que es la salud de una Revolución.

Pero junto con esa Irreverencia tenemos la más alta “Lealtad” con el sueño revolucionario de millones, sentimos la responsabilidad de actuar movidos por los altos intereses de la Humanidad, por sobre las otras discrepancias siempre pequeñas.

El Presidente Maduro representa el espíritu revolucionario que este pueblo alcanzó con el Comandante Chávez, sólo con él podremos corregir lo mucho que debe ser corregido, sólo con él protegeremos el recuerdo del Comandante, sólo con él podremos seguir avanzando, revolucionando su pensamiento. No hay atajos, no hay otra vía, sólo él preserva la esperanza de la rectificación de la Revolución.

Si se debilita el Presidente Maduro, si la oligarquía gringa consigue torcer el rumbo de la Revolución, apartarlo del rumbo al Socialismo, cambiar los pasos por sarcasmos, entonces vendrá el fascismo, intentará aplacar a este pueblo que, sin jefatura revolucionaria, se inmolará en las calles de la improvisación.

Si la neooligarquía interna consigue "cambiar el camino real por veredas reformistas", por atajos distraccionistas, si los cambios en las relaciones se convierten sólo en titulares de televisión y prensa, si nos engañamos sustituyendo la realidad por la pantalla, si los fríos números suplantan la emoción, entonces, debilitados, entregaremos la esperanza en las garras del fascismo que borrará todo vestigio de Chávez, de Socialismo, de pueblo en la calle… Estos años de libertad, de vuelo alto, serán olvidos deformados, repudiados por la ignorancia de un pueblo sometido.

Debemos fortalecer al Presidente Maduro fortaleciendo al Socialismo, derrotando las falsificaciones, desechando las ilusiones de que capitalismo emergente nos ayudará a ser socialistas. Esta labor de convencimiento es principal para los revolucionarios.

No nos equivoquemos, no tomemos decisiones considerando sólo el posible malestar inmediato. Es un crimen, una traición a la Patria, a la Humanidad, a nosotros mismos, no apoyar al Presidente Maduro. No hay excusas para no apoyarlo, para regatearle la defensa. Que los oligarcas gringos sepan, que nosotros sepamos, que si se meten con el Presidente Maduro lo hacen con el corazón del pueblo, lo hacen con Chávez, con el Socialismo. En ese momento todos seremos Chávez, todos seremos Socialismo, el Presidente Maduro será Chávez, será Socialismo y la respuesta será terrible, arrasaremos con la última piedra del Capitalismo, no habrá contemplaciones, fundaremos el nuevo mundo, seremos socialistas… No habrá perdón, El Libertador volverá a Trujillo.
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“No hay oportunidad en una Revolución para los farsantes, no hay oportunidad en una Revolución para los acomodaticios, no hay oportunidad en una Revolución para los ambiciosos, no hay oportunidad en una Revolución para los mediocres, no hay oportunidad en una Revolución para los débiles y cobardes” (Fidel)

http://picasion.com

Día por la Despenalización del Aborto en América Latina y el Caribe.



La Araña Feminista 

Declaración Pública

Por la MATERNIDAD LIBRE y SEGURA PARA TODAS

La maternidad voluntaria y libre, protegida y apoyada socialmente es un derecho humano fundamental, garantizado y protegido por nuestra Constitución. Esto implica reconocer a las mujeres como personas con autonomía y agentes morales capaces de decidir si desean o no ser madres, el número de hijos, y el tiempo entre los nacimientos.

Todas las mujeres queremos una maternidad deseada con alegría, vital y segura, no forzada por leyes ni obligada por imperativos ideológicos cargados de prejuicios, hipocresía y desconocimiento. Para que esto sea posible es indispensable que las mujeres puedan tomar con libertad y seguridad la decisión de continuar o interrumpir su embarazo.

La penalización de la interrupción del embarazo, que continúa vigente en nuestro Código Penal, niega a las mujeres la posibilidad de decidir sobre su cuerpo y lejos de evitar la práctica, la convierte en clandestina, insegura y un negocio muy lucrativo. En nuestro país las muertes por abortos que se complican por haberse practicado en condiciones insalubres representan la tercera causa de muertes maternas, cuyo índice tenemos el compromiso de disminuir urgentemente, según las metas asumidas para el milenio. Comparativamente Uruguay, que despenalizó la interrupción en 2012, registra cero muertes por esta causa.

La criminalización de la interrupción voluntaria del embarazo nos afecta de manera desigual según nuestra clase social: mientras las mujeres con poder adquisitivo pueden acceder a servicios médicos privados, las pobres deben poner en riesgo sus vidas con brebajes, ganchos de ropa o anos no calificados que no ofrecen las condiciones mínimas.

Destacamos que la construcción de una sociedad humanista no será posible mientras las mujeres, especialmente las más pobres, continúen muriendo por interrupciones clandestinas de embarazo y sean objeto de condenas y castigos. Se trata de injusticia clara y manifiesta. La Revolución Bolivariana debe acabar con esta injusticia, como lo hizo la Revolución Cubana en 1965.

Las mujeres venezolanas merecemos que se nos reconozca capacidad para decidir y soberanía sobre nuestros cuerpos, además de, la comprensión de que detrás de las interrupciones hay embarazos que fueron forzados, falta de acceso a la anticoncepción, falla de algún método, pobreza, abandono, irresponsabilidad paterna, enfermedades o gestaciones con graves malformaciones, entre otros motivos.

Llamamos a la reflexión sobre algunas realidades de la interrupción del embarazo:

· La interrupción del embarazo tiene una larga historia de prohibición que sólo consigue hacer su práctica insegura y peligrosa, dando lugar a un negocio rentable que niega el derecho a la salud a las mujeres pobres exponiéndolas a graves consecuencias, incluso la muerte.

· La ilegalidad de la interrupción del embarazo transforma un acto de decisión personal en un acto criminal.

· La interrupción del embarazo es una decisión personal tomada habitualmente como último recurso.

· La penalización de la interrupción del embarazo discrimina a las mujeres frente a los hombres. Los hombres abandonan, las mujeres abortan.

· Las mujeres quedamos embarazadas contra nuestra voluntad, pero no lo hacemos solas: detrás de cada embarazo interrumpido hay una historia de irresponsabilidad, inconsciencia o predominio de un modelo sexual de dominación masculina.

· Graves consecuencias biológicas, sociales, psicológicas derivan de embarazos forzados.

· En la interrupción del embarazo subyace la complejidad de la sexualidad humana, en cuya comprensión tienen mucho que aportar los saberes ancestrales de las mujeres y los avances de la ciencia.

· El estado no debe obligar a las mujeres a tener hijos no deseados y menos recurriendo al Código Penal.

· El estado venezolano es laico y debe legislar como tal, sin presiones religiosas, ni prejuicios oscurantistas.

Las feministas venezolanas organizadas en redes y colectivos sociales, reclamamos un nuevo Código Penal sin discriminación sexual y de género, que despenalice y abra el acceso a una interrupción del embarazo legal, segura y gratuita como una demanda de derechos humanos, de justicia social y de salud pública.

El mismo cuento.

JOSÉ VICENTE RANGEL.


El formato es el mismo. O mejor, el cuento es el mismo. Porque la derecha tiene una incorregible tendencia a repetir. ¿Falta de imaginación? Es posible. Pero también es posible que sus dirigentes, que desprecian al adversario y actúan con una arrogancia fuera de serie, producto del complejo de superioridad que los motiva, consideren que los demás son unos pendejos. A los cuales se les puede engañar, una y otra vez, sin riesgo de que sean sorprendidos con las manos en la masa
El formato es el mismo. O mejor, el cuento es el mismo. Porque la derecha tiene una incorregible tendencia a repetir. ¿Falta de imaginación? Es posible. Pero también es posible que sus dirigentes, que desprecian al adversario y actúan con una arrogancia fuera de serie, producto del complejo de superioridad que los motiva, consideren que los demás son unos pendejos. A los cuales se les puede engañar, una y otra vez, sin riesgo de que sean sorprendidos con las manos en la masa.

Me refiero al juego doble que ese sector siempre practica. En el que insiste con motivo de los pronósticos desfavorables de las elecciones municipales de diciembre. Por un lado se maneja en el plano cívico, aparentando vocación democrática, invocando la vigencia de una Constitución -la Bolivariana del 99- que rechazó cuando Chávez la propuso y cuando se debatió en el Parlamento. Luego la violó, descaradamente, el 11-A de 2002, y sistemáticamente la agrede con acciones como la guarimba, el terrorismo, la vinculación a intereses foráneos y un reiterado desconocimiento de las instituciones. El otro plano es la conspiración abierta, descarada, implícita en un discurso de corte fascista, orientado a estimular el golpe. Un mensaje con el que pretende ganar adeptos en la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y explotar cuanto conflicto social surge.

Esa dualidad, inaceptable en una democracia, en la cual todos pueden expresar sus puntos de vista y optar a ser gobierno a través de comicios libres, se convirtió en rutina. El lenguaje que emplea la oposición lo recoge. Ejemplo, el feroz ataque contra el CNE, combinado con el reclamo de más garantías democráticas para el ejercicio pleno de los derechos por partes de la oposición. Dirigentes que denuncian limitaciones a su actividad política y al mismo tiempo niegan la existencia de un gobierno democrático y recurren a instancias internacionales como si en Venezuela imperara un atroz régimen represivo.

¿Qué se busca con semejante actitud? No se necesita ser experto en política para arribar a la conclusión que lo que se quiere es socavar la institucionalidad, descalificar el orden democrático existente y crear las condiciones para que se produzca un golpe de Estado. Es esa la experiencia derivada de lo que sucedió en Chile hace 40 años, donde los mismos sectores políticos, sociales y económicos que aquí adelantan esa campaña provocaron el cruento desenlace que hemos recordado en estos días. Es también la experiencia que vivió Venezuela en las fechas previas al 11-A de 2002, de cuyas consecuencias el país aún no se repone. El cuento es el mismo: decir que no se conspira, que no se quiere un golpe, y, en el fondo, trabajar para alcanzar ese objetivo.

Pero la situación de hoy no es la que existía en Chile cuando el golpe contra Allende. Tampoco la que imperaba el 11-A en Venezuela. Ahora el movimiento popular, el gobierno bolivariano y, en general, la sociedad, están blindados. Están conscientes de la realidad y de cómo actuar en una emergencia. La Fuerza Armada Nacional Bolivariana no es la de once años atrás. La revolución aprendió la lección, no así la derecha, dada su evaluación subjetiva y prepotente de la historia. No obstante, hay que desenmascarar la tramoya. Evidenciarla. Porque el lobo con piel de oveja se mueve y cree engañar al país. Cuando a lo lejos se percibe la estratagema, que no es otra que dar la impresión de que se trabaja cívicamente, y en paralelo se elaboran planes para saltarse la Constitución y arremeter contra el Estado de derecho, está prohibido confiar. Ya que el cuento es el mismo de siempre: decir que se rechaza el golpe, pero en la oscuridad se cocina la aventura para imponer una concepción fascistoide y antidemocrática. ¿Podrán lograrlo? Lo dificulto: Venezuela es otra y se niega a volver al pasado.

Perversa complicidad.



 Incuestionable la confabulación entre la mayoría de los medios y las dos principales fuerzas políticas, GPP y MUD, de manera tal que al informar tales medios están claramente alineados con una u otra trinchera política. La oferta informativa refleja un evidente sectarismo político que promueve la estigmatización de voces y noticias críticas, supuestamente perjudiciales para el sector político que representa y reseña ciegamente. 


Mientras los medios privados de oposición desarrollan desde diferentes ángulos una tenaz y concertada estrategia de ataque a la gestión de gobierno. Los medios del Estado, de espaldas a tales embestidas, observan un comportamiento reactivo y se solazan y distraen en las respuestas oficiales en detrimento de la consolidación del poder popular. Se centran en “la agenda gubernamental”, en la difusión de “las obras de gobierno” y en la promoción de funcionarios que inauguran, firman convenios, etc. Prevalece la agenda de “acciones dirigidas a fabricar un clima de anarquía, desestabilización social e ingobernabilidad” y la denuncia de cercos mediáticos, golpe económico, eléctrico…Muy marginal el tratamiento a la gestión de la transición al socialismo

Desde la oposición distinguimos ataques constantes y arremetidas coyunturales. Infaltable la crítica negativa a la gestión de la seguridad y el manejo del miedo. Inquebrantable la arremetida contra la gestión económico-financiera que dibuja un país en crisis y al borde del colapso.

En cuanto a los ataques coyunturales destaca el cuestionamiento a la gestión de salud y la respuesta gubernamental profusamente reseñada en los medios del Estado: conformación de un Estado Mayor de Salud e inversión de dinero. La arremetida contra la gestión eléctrica se centra en mal mantenimiento, falta de previsión y secretismo en torno a la inversión en el área. Los medios del Estado se hacen eco de la denuncia oficial de un “nuevo golpe” y destacan la creación de la Unidad de Seguridad e Inteligencia del Sistema Eléctrico.

Entre “la ciudadanía mediática” y los medios afines políticamente se ha establecido una suerte de perversa complicidad, en la que usuarias y usuarios toman fuertes medidas de seguridad para evitar la disonancia política, evadiendo exponerse a mensajes incompatibles con sus preferencias políticas. Sin embargo observamos una ruptura en la audiencia bolivariana y un reclamo abierto por un periodismo crítico.
maryclens@yahoo.com


Maryclen Stelling

domingo, 29 de septiembre de 2013

Revoluciones en democracia, democracias en revolución.


El golpe de los súper.

MARIADELA LINARES.


Eso de poner a la milicia a hacer el trabajo que tienen que desempeñar los empleados, es lo mismo que colocar soldados a manejar trenes si hay un paro en el Metro. En una emergencia se vale cualquier cosa, pero lo que estamos viviendo está lejos de ser un hecho imprevisto. Hay en marcha una cadena de desaciertos que, ligados a las conspiraciones siempre al acecho, terminan por generar huracanes en un tobo
Eso de poner a la milicia a hacer el trabajo que tienen que desempeñar los empleados, es lo mismo que colocar soldados a manejar trenes si hay un paro en el Metro. En una emergencia se vale cualquier cosa, pero lo que estamos viviendo está lejos de ser un hecho imprevisto. Hay en marcha una cadena de desaciertos que, ligados a las conspiraciones siempre al acecho, terminan por generar huracanes en un tobo.

Cualquiera diría que estamos pasando hambre. Es tal el manejo mediático con el asunto de la ausencia de importantes rubros alimenticios, que ya un especialista debe estar hablando de "sensación térmica de desabastecimiento", o lo que es lo mismo, que la piel extraña que ya no le echemos la misma cremita de costumbre y que en su lugar usemos una que nos resulta rara.

A la impericia e ineficacia gubernamentales frente al peligroso tema del abastecimiento, se suma la excusa de la nueva Ley del Trabajo y el aumento del salario mínimo para justificar que todos los supermercados, incluyendo los del propio Estado, estén operando con una mínima capacidad de atención al público, con el consecuente malestar de los compradores. El círculo vicioso del consumo y la percepción de que no hay de todo lo que queremos, tiene enloquecido a la gente. La clientela recorre diariamente los automercados en una absurda cacería de cosas. A excepción de las carnes, la leche y el papel sanitario, todo lo demás es sustituible. Si no hay arroz, uno come pasta; si no hay caraotas blancas, entonces lentejas; si no hay aceite, mejor para el colesterol, y así hasta entender que aquí nadie se queda sin comer sus tres platos.

En lugar de poner a inexpertos a enredar el papagayo, sería más lógico exigirles a los supermercados su estructura de costos para comprender por qué la reducción de la jornada laboral tiene que traducirse automáticamente en una desmejora en la calidad de atención y en las consiguientes interminables colas. Seguro encontraríamos que las ganancias cubren holgadamente las horas extras o el aumento en la nómina. Lo que pasa es que aquí nadie quiere reducir su margen de ganancias, aunque sea un poquito. Al final, siempre hay un gobierno al cual echarle la culpa.

Mlinar2004@yahoo.es

Argumentos chatarra.


Defectuosos no, colonizados.